Es uno de los jugadores emblemáticos del actual plantel de Ñublense. Desde el 2013 en la institución, con el paso del tiempo se ha ido convirtiendo en uno de los referentes, a tal punto que el técnico Fernando Díaz lo consideró para que fuera el capitán del equipo. Por lo anterior, resultó extraño ver que en el último pleito de los chillanejos ante Puerto Montt, la capitanía estuviera en manos del defensa Sebastián Toro.
Ayer, en el entrenamiento de Ñublense en Paso Alejo, el delantero formado en Everton aclaró la situación vivida el último fin de semana en la décima región, descartando de paso cualquier problema con el entrenador o alguno de sus compañeros.
"Aunque me tenían considerado, preferí hablar con el técnico y le dije esta vez quiero pasar porque tengo un problema y espero que se solucione", lanzó de entrada.
La dificultad a la que hace mención el delantero tiene relación con el aspecto económico. Si bien al jugador se le respetó el salario que ganaba cuando Ñublense estaba en primera división, el impasse tendría relación con los premios que habría acordado Varas con la dirigencia, pues ésta no estaría cumpliendo con esa parte de la relación contractual.
Mejor disposición
Pese al problema, Sebastián Varas se manifestó abierto a encontrar una pronta solución al problema. "Tengo la mejor disposición para arreglar esta situación, pero exijo un poquito de respeto. Del tiempo que llevo acá nunca me habían fallado. Estoy muy orgulloso de vestir estos colores, me han ayudado mucho", dijo.
No obstante el tema pendiente, Varas descartó que esta controversia afecte su rendimiento deportivo. "De hecho, antes del pleito con Puerto Montt ya estaba con esta dificultad, y al contrario, me sirvió para entrar con más ganas y hasta convertir", remarcó.
Sobre plazos para una solución, el atacante puntualizó que "hay una reunión pendiente con la directiva, y espero que podamos arreglar, ya que tengo familia y compromisos que por este impasse no he podido cumplir", explicó.
Son para ganarlos
La victoria ante Puerto Montt fue un importante golpe anímico de cara al clásico del próximo domingo ante Curicó, a las 15:30 horas en el Nelson Oyarzún. Formado en la cantera de Everton de Viña del Mar, el jugador sabe que estos choques, más allá del aspecto deportivo, tienen un sabor especial.
"Sin duda, ante Curicó será un partido difícil, pero más allá de eso, es un clásico, y éstos son para ganarlos. En mi caso, he jugado en dos ocasiones ante Curicó, ganando uno, y perdiendo el otro, pero este fin de semana espero que los tres puntos se queden en el Nelson Oyarzún", puntualizó el delantero central.
Aunque fue reemplazado pasado el cuarto de hora del segundo lapso ante Puerto Montt, Varas descartó que la modificación respondiera a problemas físicos. "Abandoné por precaución, es una cancha peligrosa, y como estábamos con el resultado a favor, avisé al banco para que ingresara otro compañero", sentenció.
Cabe recordar que el último encuentro entre chillanejos y curicanos en el Nelson Oyarzún se jugó el 2012, terminando igualado a un tanto. El gol de los Diablos Rojos fue obra de Sebastián Montesinos, a los 82 minutos de juego. No obstante, desde el 2004 que Ñublense no vence al cuadro tortero en Chillán.
2013 es el año
que arribó proveniente de Rangers el atacante Sebastián Varas, transformándose en uno de los jugadores emblemáticos del club. 15:30
horas es el horario fijado para el pleito entre chillanejos y curicanos en el Nelson Oyarzún. El árbitro del cotejo será Nicolás Gamboa.