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No cabe duda que la agricultura tanto en nuestra región como en el país, debiera ser uno de los motores que reimpulsen la economía nacional frente a la caída en el precio de los commodities y su impacto en nuestra producción de cobre y el empleo. En efecto, el sector agrícola dispone -según un informe del Ministerio de Agricultura- del 12% de la fuerza del trabajo en Chile, y genera alrededor de 700 mil empleos permanentes , a los que se deben agregar otra cifra significativa de empleos temporales por períodos más prolongados.

Por eso, es que iniciativas como las de Fomape, una pyme de San Carlos, en Chillán, resulta interesante de destacar en esta materia, por su aporte al desarrollo agrícola en la zona y por cierto, generación de mano de obra. Fomape creó un sistema automático de control de riego y temperatura para producción de forraje verde.

Construido sobre la base de un ambiente sanitario y controlado de tipo móvil, el equipo permite el monitoreo y operación de todos los componentes del sistema bomba-riego desde una interfaz de fácil usuario uso para el productor.

La solución reduce los costos, tiempo y espacio de producción aumentando a su vez la disponibilidad de forraje a los animales, permitiendo un bajo tiempo de retorno de la inversión además de múltiples ventajas operativas.

Claves

Lo relevante del proyecto es que ha desarrollado una tecnología innovadora que permite la producción acelerada de forraje verde, en un ambiente controlado, optimizando las condiciones ambientales de manera de obtener un forraje con excelentes características nutritivas para la engorda de ganado, mejorando la digestión de los animales y la calidad de la carne resultante, y en plazos mucho más reducidos que el sistema tradicional.

Como resultado de este trabajo, se logró fabricar el primer prototipo completamente automatizado y controlado por PLC, que permite una producción continua de pasto verde, independiente de las condiciones climáticas imperantes. Utilizando una superficie de solo 15 metros cuadrados, produce 150 kg. de forraje verde al día de características naturales, siendo los insumos principales solamente las semillas, electricidad y agua.

Cabe destacar que Fomape, cuyo representante legal es César Parada, es un emprendimiento -apoyado por Innova Bio Bio- de la comuna de San Carlos, en Ñuble. Y el apoyo para este proyecto consistió en un cofinanciamiento equivalente al 71,2% del costo, lo que implicó un aporte de $41.994.000 millones.

La tecnología desarrollada permite la producción continua de forraje verde, generando una gran diferenciación con respecto a la producción en praderas, dada la menor cantidad de tiempo necesario para la producción de forraje, la no utilización de tierra y por menor consumo del recurso agua, además la los pequeños propietarios le permite requerir de un menor espacio para su producción ganadera, pudiendo destinar mayor terrero para otros cultivos.

Beneficios

Además, el forraje producido genera mejoras en la salud animal, específicamente en la asimilación de la ración alimenticia y en los efectos nutritivos.

En relación, a las actuales soluciones de forraje verde hidropónico, el nuevo equipo desarrollado, además de ventajas en costos y tiempos, permite dar una solución personalizada para los productores, partiendo desde pequeñas producciones (4 cabezas) en adelante, adicionando a esto la característica de movilidad del equipo, lo cual permite desplazarlo hasta el lugar requerido aprovechando de esta forma el acceso a productores de todos los tamaños. El equipo permite la producción de forraje utilizando muy poco espacio, desde 32 metros cuadrados.

La solución planteada, considera la producción mediante el uso de bandejas en Acero Inoxidable, lo cual permite una producción completamente higienizada. El equipo se compone de una sala transportable con materiales de alta resistencia y con capacidad aislante. Cada unidad contiene todo el equipamiento necesario para la operación automática del sistema, además se puede incorporar en caso de ser requerido un mayor nivel de automatización para el control de eventos y de situaciones de excepción.

Según el proyecto, la principal diferenciación de la tecnología propuesta versus el forraje verde hidropónico está en el propósito de cada tipo de producción de forraje. "En el caso del forraje hidropónico se busca la germinación y desarrollo del forraje hasta que complete un cierto tamaño y consistencia dependiendo de cada tipo de especie de pasto, en condiciones controladas, sin el uso de tierra y agregando una solución de nutrientes y fertilizantes".

En el caso de la tecnología propuesta se "busca generar un forraje verde natural y saludable que contenga solo las potencialidades propias de las semillas en cada caso, en condiciones controladas, sin el uso de tierra y sin incorporar nutrientes ni fertilizantes".

La utilización de este equipo puede significar para la industria ganadera bovina el cambio necesario que le permita reducir los costos, y mejorar los resultados.

41 millones

994 mil pesos fue el aporte que recibieron de Innova Bio Bio. 71,2%

del costo consistió en un cofinanciamiento, lo que implicó un aporte de $41.994.000 millones.

El Salón Auditorium de la Universidad de las Américas fue el escenario de la ceremonia de premiación anual del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Chile, donde se distinguió a sus miembros más destacados en las áreas privada, gremial y científicas.

Miguel Allamand Zavala, presidente de la frutícola Subsole, recibió el galardón Salvador Izquierdo, a la actividad privada; a Carlos Rojas Walker, profesor de investigación y consultor de la Universidad Santo Tomás, se le entregó el premio Carlos Porter, a la labor científica; mientras que en Fernando Maira Palma, por 11 años gerente del Colegio, recayó el honor Roberto Opazo, a la función gremial.

En la ceremonia estuvo presente el ministro de Agricultura, Carlos Furche, quien fue reconocido por el presidente de la entidad, Jorge Wicha Álvarez, por su trayectoria tanto a nivel nacional como en el extranjero.

Además, durante el evento se otorgaron diplomas especiales a los 17 mejores alumnos titulados en 2014 de las facultades de agronomía del país y también a los 17 nuevos miembros honorarios 2015 del Colegio.