Una pena de 3 años es la que recibió Víctor Rubio Pino, condenado por el tribunal Oral en Lo Penal de Chillán, luego que se le condenara por el delito de lesiones graves.

De pie frente a los magistrados, el hombre oriundo de Yungay escuchó atento la condena, que hasta el miércoles podía llegar hasta los 12 años, debido a que el Ministerio Público, representado por el fiscal Mario Lobos, había solicitado la pena, aduciendo que lo que hubo fue un femicidio frustrado.

Esto, luego de que el 15 de febrero del año pasado, hiriera con un cuchillo de 30 centímetros en el abdomen a su mujer, a quien -según se declaró en el juicio- le habría sido infiel.

Por ello, sostuvieron una discusión al interior del domicilio, cuando llegó carabineros, alertados por los vecinos. En aquella ocasión, mientras los uniformados esperaban que el matrimonio diera una explicación y la mujer diera cuenta de que el hombre la estaba agrediendo, optaron por entrar al domicilio, donde le propinó una herida cortopunzante que la tuvo en riesgo vital.

A raíz de esta situación, el hombre fue formalizado por femicidio frustrado, donde el Sernam participó del litigio como querellante, quedando en prisión preventiva desde ocurridos los hechos.

A raíz del fallo, el abogado querellante y representante de la víctima, Rodrigo Morales, comentó que la pena en sí no los dejó conformes. "Lo que siempre hemos planteado es que fue femicidio frustrado, y viendo todos los antecedentes del sernam, tenemos que consultarlo con la víctima antes de saber si presentaremos un recurso de nulidad", dijo.

Por su parte, Milton Parra, defensor del condenado, comentó que "no obstante que habían dos circunstancias anteriores y colaboración sustancial, no rebajó la pena y la aplicó para que se cumpliera de forma efectiva".