Inspección de Seremi de salud a plantel porcino dejó 5 exigencias
MEDIOAMBIENTE. A la fecha la empresa Agrícola y Ganadera Chillán Viejo, de propiedad de MaxAgro, tiene dos sumarios por malos olores. En el último de ellos arriesga multas entre 1 a mil UTM
Ingrid Acuña Caballero ingrid.acuna@cronicachillan.cll
Cinco exigencias dejó el seremi de Salud, Mauricio Careaga, a la empresa Agrícola y Ganadera Chillán Viejo, de propiedad de MaxAgro, para reducir los malos olores que emanan del plantel porcino ubicado en el kilómetro 415 de la carretera 5 Sur.
La fiscalización, que se realizó a primera hora de ayer, detonó en que la firma deberá reforzar plan de fumigación sobre moscas y larvas, disminuir superficie de riego con purines, o suspenderla cuando se registre altas temperaturas y terminar a fin de mes el techado donde se encuentra la piscina que contiene purines, lugar que es uno de los focos de malos olores.
Finalmente, la quinta petición abordó la aplicación de nuevos productos aromatizantes o neutralizador de olores. En caso que no se cumplan estos requerimientos, se abordará la reducción de purines, decisión que se conocerá el 8 de febrero, fecha prevista para una inspección técnica, donde se constatará si la empresa realizó los cambios solicitados por la autoridad regional de salud.
"Lo que hemos notado en la inspección, vamos a sugerir y concordar con la empresa algunas intervenciones inmediatas, tenemos aún fines de enero, febrero y marzo con temperaturas altas que es lo que acentúa en la percepción del olor. No podemos solo actuar por el olor, el que de alguna manera no tiene norma en Chile, pero sí podemos intervenir desde el punto de vista de que el malestar en la gente, tenemos un tema de corte sicológico, por la percepción, molestia y el creer que me voy a enfermar por esto, esa ya es una intervención en personas, lo que nos obliga a estar en vigilancia de este proceso", sostuvo al final de la inspección el Seremi de salud Mauricio Careaga.
Fiscalización
La intervención de la autoridad sanitaria en el manejo de malos olores comenzó en diciembre, luego de una seguidilla de reclamos a través de las redes sociales, en las que se acusaban hedores nauseabundos, justo cuando el termómetro registraba altas temperaturas.
Esto significó una primera fiscalización el 30 de diciembre del año pasado, donde el delegado de la Autoridad Sanitaria solicitara a la empresa poner en marcha un plan de emergencia para mitigar los olores. En ese momento se confirmó que se trabajaba de acuerdo a lo que establece la resolución sanitaria, por lo que no se levantó un sumario sanitario en contra de MaxAgro, pero sí se dejaron requerimientos que cumplir.
Fue así como en enero las altas temperaturas registradas en la tercera semana de enero nuevamente detonaron en varios episodios críticos de malos olores, por lo que el 20 de marzo se visitó la empresa, inspección en la que se constató un nulo avance, en las exigencias que fueron solicitadas por el delegado provincial.
"En ese momento se instauró un nuevo sumario sanitario a esta empresa. Eso hace apenas siete días, no hemos recibido una denuncia formal, solo por las redes, pero ayer (martes) ingresó por despacho una denuncia formal, y hoy con los cuerpos técnicos desde Concepción, apoyados por los cuerpos técnicos de Chillán, hemos hecho un recorrido y como está en proceso un sumario, están algunas deficiencias, pero también hemos notados que se están haciendo algunas mitigaciones", sostuvo el seremi de Salud.
Las cinco piscinas donde son tratados los purines, además de la zona de riego, son las que están en la mira de la autoridad sanitaria. "Hemos revisado tres piscinas de elevación y posteriormente hemos recorrido la zona de riego. Hemos estado en las dos piscinas de separación de líquidos y sólidos, en la parte alta y la gran piscina final que es la que entrega solo líquidos y están dentro de las normas técnicas y se están notando las mejoras", aseguró Careaga.
En proceso
Luego de la inspección realizada ayer se constató que se encontraba funcionando el sistema de purines, como también que los olores molestos se encontraban en sectores definidos de la planta. También se pudo confirmar que se siguen las acciones del Plan de Manejo de Olores y Vectores, el que fue presentado por la empresa el 7 de enero de 2016.
"En relación a las recomendaciones que nos dejaron, tenemos un plazo de 10 días para responder. En principio, las que leí, pero que me falta conversar un poco más con la gente que trabaja allá (Chillán), estaríamos encontrando adecuadas las mejoras que nos propusieron para implementar", sostuvo Pablo Espinosa gerente agroindustrial de Max Agro.
Para la próxima inspección se revisará cuan avanzada están las recomendaciones hechas en esta fiscalización y en caso de no cumplirlas, podría ordenarse la reducción de la capacidad de la empresa, a objeto de que ello signifique una reducción en el impacto ambiental hacia la población.
"Dentro de las medidas de mitigación que hemos aplicado está el producto químico que se esparce en las piscinas, el que genera una capa que minimiza los malos olores y que actúa de manera inmediata. Teníamos la recomendación de aplicarla cada siete días, pero a raíz de las intensas temperaturas creemos que disminuye su radio de acción por lo que hemos decidido aplicarlo cada dos días. Este producto es amigable con el ambiente", aseguró Pablo Espinosa.
La Agrícola y Ganadera Chillán Viejo, que actualmente tiene un sumario en curso, le había sido aplicado un sumario en diciembre del año 2014, el cual derivó en multa la que fue pagada a inicios de 2015, y sobre ella, han recurrido fiscalizaciones en febrero de 2015 y diciembre del mismo año.
"Nos habíamos comprometido a tapar la laguna con malla raschel, al igual como se realizó con el resto de los pozos de homogenización", aseguró Espinosa.
Con el sumario que está en curso, la empresa arriesga sanciones que van desde la amonestación, multas de 1 a 1.000 UTM, hasta prohibición temporal o definitiva de funcionamiento. Tanto los planteles de Rucapequén como El Peumo, pertenecientes a la empresa, se encuentran con proyectos en evaluación ambiental, donde se contempla la implementación de un sistema de tratamiento de residuos líquidos (biodigestor), cuyo proceso de ejecución final estaría finalizado el próximo año, lo que reduciría las emanaciones de olores molestos.
"Nuestro compromiso es que en abril partimos construyendo los biodigestores y la próxima temporada de verano, no deberían afectar con olores molestos como lo ha pasado este año", precisó el gerente de agroindustria.
Si bien la seremi de salud, se espera que en 72 horas se produzca la reducción de malos olores, para los vecinos del sector lo ideal es que las inspecciones se realicen en los momentos en que se generan los hedores.
"Encuentro positivo que se hagan inspecciones, lamentablemente, son a destiempo. La temporada de malos olores se inició a fines de noviembre y estamos terminando enero. Es una lástima que la autoridad sanitaria no pueda actuar por oficio y que no reaccione a los reclamos de la gente tanto por los medios de comunicación como por las redes sociales", precisó Ulises Lari presidente del comité ambiental de Chillán Viejo.
"Es una lástima que la autoridad sanitaria no pueda actuar por oficio y que no reaccione a los reclamos de la gente tanto por los medios de comunicación como por las redes sociales".
Ulises Lari, Presidente del comité ambiental Chillán Viejo