El Gobierno Regional del Biobío y el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) dieron a conocer la mañana de ayer las dos nuevas cámaras instaladas en las cercanías del complejo volcánico Nevados de Chillán, buscando focalizar la vigilancia de la actividad superficial en el nuevo cráter formado el ocho de enero, en una de la ladera este del volcán Nuevo.
El Intendente Rodrigo Díaz, quien estuvo acompañado de la gobernadora de Ñuble, Lorena Vera; el director regional de Sernageomin, Héctor Contreras; y la directora de la Onemi Biobío, Gilda Grandón, explicó que "este es un sector bastante amplio con casi 7 kilómetros de extensión y aquí con la instalación de las dos nuevas cámaras de vigilancia hay 15 equipos que miden diferentes situaciones como la actividad sísmica".
"Por ejemplo, todo esto hace que podamos tener una capacidad de lectura y de monitoreo de lo que existe en el sector tanto en la comuna de Pinto como en la comuna de Coihueco con una gran percepción instantánea de lo que está ocurriendo. Este monitoreo en línea que estamos realizando sin duda es muy significativo. Estas dos cámaras nuevas que nos permiten ampliar la percepción visual que teníamos con la cámara original, permitiendo así tener un radio de observación mucho más grande", señaló Díaz.
La autoridad regional agregó que "Todo lo anterior nos permite decir que la situación actual de Nevados de Chillán es una situación normal. Si bien se encuentra efectivamente con una alerta amarilla, con pulsos eruptivos y eso, también ha habido días de completa tranquilidad".
Nuevos equipos
Según se explicó en la oportunidad, una de las cámaras está específicamente en el entorno del sector del andarivel, a cinco kilómetros del actual centro de emisión, mientras que la segunda cámara se instaló al noreste del volcán, a 1,3 kilómetros del nuevo centro de emisión. Las instalaciones incluyen equipo de radiocomunicación, con respaldo autónomo de energía a través de panel solar.
Cada cámara y su equipamiento asociado tuvieron un costo de 10 millones de pesos. Sobre la base de lo anterior, el Sernageomin, institución a cargo de la Red Nacional de Vigilancia Volcánica de Chile, informó que el equipamiento total dispuesto en la zona contempla 7 estaciones sísmicas, 3 cámaras IP, 4 equipos para medir deformación, un equipo de Espectrometría de Absorción Óptica Diferencial (DOAS, en inglés) para medición de gases de origen volcánico, y una estación acústica.
Cristian Delgado, ingeniero electrónico del observatorio volcanológico de los andes del sur, señaló que desde el año 2009 que se está implementando la red de monitoreo en Nevados y que se tiene equipos suficientes en stock como para atender emergencias.
"Hoy se reforzó la red de monitoreo existente en el volcán, se instalaron tres nuevos equipos de GPS para medir información del volcán y una nueva estación sísmica que está a unos 3 kilómetros del centro de emisión. Adicional a lo anterior se instaló un equipo de infrasonido que sirve para corroborar si hay algún aumento de actividad sísmica relacionada a una erupción del volcán", concluyó el experto.
Finalmente Sernageomin invitó a la comunidad a participar de una reunión el próximo martes 2 de febrero en Gimnasio colegio Las Trancas de Pinto a las 10:30 y en el Auditorio del centro cultural Alfonso Lagos en Coihueco a las 15:30.
Situación actual
Según la información otorgada por Sernageomin el complejo volcánico se encuentra en fase de desgasificación intermitente desde el 8 de enero, cuando comenzó la actividad superficial asociada a su sistema hidrotermal, compuesto principalmente por agua, gases y especies químicas disueltas, que son termalmente calentadas por una fuente de calor más profunda. A medida que dicha fuente se acerca a la superficie, induce cambios de presión y temperatura en el sistema hidrotermal, generando así inestabilidad sísmica superficial y explosiones pequeñas, mayoritariamente de vapor.