Entre cinco a diez personas por día pasan a preguntar al tribunal Oral en Lo Penal de Chillán por los requisitos para ser parte del público en el primer juicio por el delito de incitación a electores a proporcionar domicilio electoral falso, contemplado en de la Ley 20.568, y que tendrá este miércoles en el asiento de los acusados a la alcaldesa de San Fabián, Lorena Jardua.

Lo anterior es reflejo de la efervescencia en términos políticos que traerán las audiencias, que se prevé se extiendan al menos por dos semanas, esperándose que se transforme en uno de los litigios más largos desarrollados en Ñuble.

Ayer se realizó la última audiencia previa al juicio, en que los magistrados debieron debatir en torno a dos solicitudes de personas que serán parte de las pruebas testimoniales, quienes pidieron rendir la prueba mediante videoconferencia. Fue el caso de uno de los detectives que participó en la indagatoria. Respecto a él, el tribunal desestimó acoger su testimonio, dado que se encuentra en Coyhaique.

Caso contrario ocurrió con Damaris Hernández, quien se encuentra con una licencia médica y podrá declarar desde Concepción.

Fiscalía: 39 testigos

En el Ministerio Público, la fiscal a cargo de la indagatoria, Patricia Suazo, será quien realice los alegatos junto a Álvaro Serrano, designado a nivel regional como encargado de delitos de corrupción.

Serrano llega al juicio en lugar de Pablo Fritz, quien durante estas semanas estará subrogando al fiscal regional, Julio Contardo. Serán en total 39 pruebas testimoniales las que presentará el Ministerio Público.

En cuanto a la parte querellante, patrocinada por el senador Alejandro Navarro, la novedad será el regreso del abogado Carlos Astorga, quien logró conciliar las diferencias con el parlamentario, lo que llevó a presentar hace tres semanas su renuncia a la causa.

El lado de la Defensa

Desde que comenzó el caso de 'Acarreo político', en octubre de 2013, el abogado Ricardo Robles representa a la alcaldesa de San Fabián y en esa condición llega al litigio.

Con el fin de comprobar la inocencia de Jardua, presentará otros 20 testimonios, además de 21 pruebas documentales para respaldar su versión.

Junto a Jardua, se encontrará en el banquillo de los acusados su esposo, Ariel Torres, además del concejal Juan Carlos Parada. A estos dos últimos, el abogado Rodrigo Vera Lama, quien se unió al caso en septiembre de 2015, los defenderá con dos testimonios, además de prueba documental.

La cuarta acusada es Marcia Ortiz, estrecha colaboradora de la alcaldesa -que hoy se encuentra suspendida temporalmente por el juicio-, cuya defensora es la abogada penquista Paula Villalobos, quien la representa desde noviembre.

De esta manera, se espera que Gendarmería elabore un plan de seguridad especial, dado el amplio marco de público y de testigos del primer juicio en el país por este delito.

La presencia de una barra de metal en plena ruta del Itata es hasta ahora la principal hipótesis respecto a la caída que sufrió un motociclista que perdió la vida durante la tarde de ayer.

Se trata de Francisco Bozzo, de 43 años, quien viajaba desde Concepción en dirección hacia el norte, emprendiendo el regreso hacia Calama, su tierra natal, desde donde había viajado hace una semana junto a cuatro amigos motoqueros; entre ellos, su pareja.

El accidente de tránsito se produjo alrededor de las 18.20 horas, a la altura del kilómetro 30, y según la versión de testigos que transitaban justo detrás del motociclista, éste de pronto perdió el control de su móvil, impactando su cuerpo de lleno en la barrera de contención, tras lo cual sufrió lesiones de gravedad.

Al lugar concurrió personal de la unidad de rescate de Bomberos de Quillón, quienes efectuaron las labores de reanimación en el lugar; sin embargo, estas maniobras fueron infructuosas ya que ante la atónita mirada de sus compañeros de ruta, Bozzo dejó de existir minutos más tarde.

A raíz de esta situación, Carabineros realizó un amplio operativo de gestión del tránsito, ya que a 400 metros del lugar, hacia el sur, dos camiones de carga colisionaron por alcance, generando gran congestión en la ruta que une Chillán con la capital regional.

Mientras declaraban ante carabineros sobre lo ocurrido, fueron los propios amigos quienes notificaron a la familia de Francisco, que se encuentra en Calama, de lo que había acontecido.

Según comentó Rodolfo Morales, su compañero de ruta había dormido la cantidad de sueño necesaria y tampoco había ingerido alcohol previamente. Asimismo, señaló que llevaba más de diez años dedicándose a su pasión, que eran las motos. Por instrucción de fiscalía, la Siat de Carabineros investiga el caso, mientras que el cuerpo de Francisco será entregado a hoy por el SML a sus familiares.