Equipo que sale a defender termina perdiendo y eso fue lo que le pasó a Ñublense frente a Temuco, rival ante el cual nuevamente mostró su mezquindad ofensiva para caer por 1 a 0.
Para enfrentar al líder de la competencia el entrenador Fernando Díaz presentó cinco cambios en relación al último partido y el experimento ante el rival menos indicado no rindió los resultados que esperaba.
En la primera mitad del duelo, y al igual que en todos los partidos de visita, los chillanejos se intentaron parar bien en el fondo, pero nada más que eso, porque de medio campo hacia arriba evidenció una esterilidad que ya es un verdadero cáncer como forastero.
Es así como el control de la pelota fue de los dueños de casa que administraron el fútbol a su antojo y que, mostrando una convicción envidiable, se dedicaron a tocar y tocar para desgastar a los chillanejos.
Temuco fue pasivo y gracias a ello llegó el primer gol gracias a la irresponsabilidad de Sebastián Toro que le comete un penal a Arturo Sanhueza que transformó en anotación Sergio Comba en el minuto 27.
Cabe destacar que antes se le anuló un gol de cabeza a Ñublense que convirtió José Rojas, quien se encontraba en posición de adelanto según el juez del partido. En el segundo tiempo a Temuco le anularon dos goles.
Otro dato a considerar es que Ñublense enfrentó a una defensa improvisada de Temuco y a pesar de ello no tuvo la insolencia para instalarse en campo contrario.
Tampoco se puede omitir que en la recta final del partido se fue expulsado Piero Campo en Temuco, hombre más que Ñublense no supo aprovechar. Ya que de acuerdo a las palabras del entrenador, cuando los chillanejos pierden un hombre, "eso condiciona el partido".
Fue así como en un reducto en el cual ya se palpita el ascenso de Temuco, Ñublense nunca presionó al rival, algo que ya no es un síntoma como forastero, sino que es una clara enfermedad sin cura y que se gesta desde el trabajo de la semana. Temuco hizo lo justo para desnudar las falencias de Ñublense.
Para contextualizar y explicar la derrota ante el cuadro más poderoso de la Primera B, cabe recordar que Ñublense solo conoce de derrotas en el torneo como visitante, ayer acumuló la quinta. También tenía bajas obligadas y hay rendimientos individuales que están completamente en deuda. Sin embargo, hay que agregar la mala lectura del técnico que le entregó el protagonismo al rival, que ayer decidió entrar sin delanteros, ya que Luis Flores no tiene ritmo de competencia, y que los cambios fueron equivocados.
Para explicar lo anterior hay que señalar que la salida de Juan Oviedo no se explica, ya que trataba de dejar algo en la generación de fútbol. Además, cuando ingresaron Emilio Rentería y Alex Silva, este último se sumó a la zona de volantes siendo un hombre más de área.
Con todos estos antecedentes, ¿era esperable que Ñublense le ganara al líder?, ¿le iba a ganar al equipo que solo conoce dos derrotas?, ¿iba a ganar un equipo que solamente ha ganado un partido fuera de casa? La respuesta es no. Pero lo que se critica una vez más es la falta de hambre para pasar la mitad de la cancha.
Para variar el cuadro de Díaz no mostró hambre de triunfo fuera de casa, no deja en claro la convicción de querer quedarse con el triunfo y menos mostró que es un equipo que se armó para subir a Primera, pero que la verdad solo se instala entre el montón del medio.
Además, tras la derrota Ñublense se aleja más de la zona de liguilla. Ahora tiene tres partidos consecutivos como local y si no los gana todos, simplemente adiós pos temporada, adiós opción de ascenso.
17.30 Horas
Del próximo domingo, Ñublense recibe en el Nelson Oyarzún a Deportes Concepción. 12
Puntos Suma Ñublense en la segunda rueda y tras los resultados de ayer se ubica en el 9° lugar.