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Chillán avanza con su Plan Regulador y Pladeco vencidos

URBANISMO. Ambos instrumentos prioritarios para el desarrollo de la comuna aguardan la entrada en vigencia de sus actualizaciones, mientras la ciudad sufre sus efectos.
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Marcelo Arroyo L.

La comuna crece y las demandas por áreas verdes, seguridad vecinal, conexión vial, ciclovías y espacios públicos aumentan cada día, tanto como la superficie autorizada para "obras nuevas", que se incrementó en Chillán en un 13,6% (261.244 m2,) durante el 2015, según reportó el INE Biobío.

Si bien esas "demandas" son compartidas en 100 ciudades del país de acuerdo a la III Encuesta de percepción de calidad de vida urbana del Ministerio de la Vivienda (Minvu), las preguntas que se escuchan con miras a las próximas elecciones municipales son decidoras: ¿De qué manera crece la futura capital regional del Ñuble? ¿Cómo se planifica urbanísticamente pensando en los años venideros? ¿Cómo enfrentarán los latentes problemas viales?

Los instrumentos que resuelven esas preguntas todavía están en vía de actualización y proyección, pese a los "esfuerzos" de las autoridades por actualizarlos.

Desregulado

En el caso del (PRC) aguarda desde diciembre de 2008, fecha en que se comenzó a elaborar su actualización a cargo del staff del arquitecto Manuel Durán y que también coincidió con la llegada de la actual administración comunal.

La historia de este instrumento tiene larga data. Fue desarrollado en 1987, puesto en marcha el 20 de abril de 1989, y ampliado a "intercomunal" en 1996, cuando nació la nueva comuna de Chillán Viejo.

Originariamente este proceso de actualización se estructuró en cinco etapas que se desarrollarían en 14 meses. La metodología estuvo pre-definida de acuerdo a lo establecido en las Bases Técnicas de la Licitación y en la Oferta Técnica del Consultor.

Pese al avance, solo el Plan Regulador de Chillán Viejo se logró concretar el 20 de julio de 2012.

No obstante, desde Secpla se informó que la modificación del PRC chillanejo está en su última etapa.

El Concejo Municipal aprobó por una unanimidad el proyecto de plan y se notificó a la comunidad que realizó observaciones al estudio de los acuerdos tomados por el municipio.

"Hoy se encuentra en revisión final y de visación por parte de la Seremi de Vivienda y Urbanismo", indicó la secretaría técnica de planificación.

Para el delegado provincial del Serviu, Óscar Crisóstomo, tanto el Plan Regulador Comunal como el Pladeco son instrumentos obligatorios para cada comuna.

"En el caso del PRC, permite el diseño de una regulación con el objetivo de conformar la imagen de ciudad que se busca, además de la definición de un ordenamiento coherente acorde a las necesidades de la urbe", explicó.

Además promueve el desarrollo armónico de los barrios, establece condiciones para el desarrollo sustentable de la comuna, establece zonificación y conectividad entre las diversas zonas, además de proteger el patrimonio y espacios urbanos de la ciudad.

Efectos colaterales

Y ahí radica la preocupación, en una ciudad que vivió un boom inmobiliario post terremoto hacia la periferia (Camino Parque Lantaño, Avenida Alonso de Ercilla y Andrés Bello) con efectos que reclaman "los nuevos vecinos": tacos en horas peak, contaminación y conexión vial.

"La tardanza en aprobarse el PRC implica que la ciudad ha seguido avanzando mientras no existe una regulación actualizada, por lo tanto, la ciudad aún sigue operando bajo un marco regulatorio del año 1989 que ha sufrido pocas modificaciones a lo largo del tiempo", afirmó Crisóstomo.

Para el presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CCHC), Ariel Larenas, hace mucho tiempo que esta entidad expresó su opinión técnica al PRC. Desde un comienzo, la preocupación de la entidad gremial apuntó a la altura y densificación al interior del perímetro céntrico, ya que el crecimiento urbano podría ser soportado al interior de las cuatro avenidas por sobre la expansión de la ciudad.

"No podemos hace proyectos sin saber lo que bien más adelante. Y para la ciudad restarían inversionistas", dijo Larenas.

El dirigente de la construcción expresó que siguen preocupados por el tema y tal parece que su propuesta quedará afuera.

Larenas coincide que, más allá de interés por edificar en altura, la propuesta apuntaba a aprovechar la infraestructura existente en las conexiones eléctricas, de agua potable, alcantarillado, teléfonos y gas, además de un menor desplazamiento vehicular de las personas hacia sus trabajos, centros educacionales y comerciales.

"En Chillán ya no hay donde estacionarse", comentó.

El concejal Carlos Hernández coincide que es una situación preocupante que los vecinos viven cada día.

"Es muy terrible iniciar a las 7 de la mañana con un grado de tensión, porque se va a llegar atrasado o a chocar", sostuvo el edil.

La propia encuentra del Minvu revela la necesidad de disponer también de una mayor cantidad d espacios públicos y áreas verdes.

En ese último punto, en el marco de la reciente aprobación municipal del PRC, el Serviu propuso al municipio chillanejo, reconocer al Estero Las Toscas como espacio urbano relevante, en toda su extensión, y no solo en el trayecto fundacional entre Avenida Argentina y Brasil.

"De esta forma, el Concejo Municipal acordó reconocer al afluente desde el vértice suroriente de la Villa Barcelona hasta el límite comunal con Chillán Viejo, lo que nos parece de una enorme importancia, porque de esta forma, se puede fundamentar la ejecución de futuros proyectos de espacios públicos", explicó Crisóstomo.

Desde Secpla aclararon, eso sí, que por existir un plan regulador comunal e intercomunal vigente, que definen la vialidad estructurante que se está ejecutando y por tener los actuales planos una zonificación similar a la propuesta, no han existido consecuencias negativas ni positivas en el desarrollo urbanístico de los centros poblados atribuibles al proceso de aprobación del plan.

"Respecto a la vialidad que define el tejido urbano y la conectividad de la ciudad, la actualización del plan regulador, recoge la vialidad existente en los instrumentos vigentes, definiendo a la vez nuevas vías que serán necesarias para el crecimiento futuro de la ciudad de Chillán y sus centros poblados menores", precisó la secretaría técnica.

Tarea pendiente

El Pladeco para el próximo quinquenio se encuentra en una situación similar, dado que el actual expiró el 31 de diciembre, y opera "con fecha de vencimiento" luego que el propio concejo le prolongó la vida hasta fin de año junto.

Secpla indicó que está a la espera del convenio desde el Gore Biobío para licitar, considerando que el 4 de noviembre los consejeros regionales dieron visto bueno a $51 millones para actualizar este instrumento, ocasión que el core Cristian Quiroz también manifestó su preocupación, dado que la comuna navega "sin tener prioridades".

¿Cuál es su importancia? El delegado de Serviu resaltó que el Pladeco establece la carta de navegación, misión y visión de la comuna, además de definir las pautas de desarrollo futuro y el plan de inversiones.

"La participación de la comunidad es importante al momento de definir el diagnóstico actual de la comuna y sus necesidades, esto para contextualizar la cartera de proyectos que se propondrán a futuro", Óscar Crisóstomo.

El delegado añadió que sus legítimas aspiraciones urbanas sean consideradas en ésta u otras instancias futuras.

"Ello puede generar una serie de oportunidades como es la actualización del instrumento intercomunal, la creación de planes seccionales en zonas que lo necesitan", sugirió.

El concejal Carlos Hernández agregó que es una tarea que deberán asumir las nuevas autoridades comunales.

"Esta municipalidad, con su equipo, no ha podido sacar adelante estos dos herramientas y el perjuicio ha sido directamente para las personas de todos los sectores de Chillán", sostuvo.

Hernández lamentó que los equipos que trabajan con el alcalde sufran cambios, como en Secpla y en otros servicios, donde tampoco se conoce cuáles son las funciones de cada uno de ellos.

"El mejor ejemplo es el administrador de Las Termas. Se le contrató y él nos declaró que no sabía las funciones que tenía que asumir y nosotros hemos tenido que obligar al alcalde a sentarse en el Concejo para que explique qué está haciendo", manifestó.

"La tardanza en aprobarse el PRC implica que la ciudad ha seguido avanzando mientras no existe una regulación actualizada, por lo tanto, la ciudad aún sigue operando bajo un marco regulatorio del año 1989".

Óscar Crisóstomo, Delegado Serviu Ñuble

Preocupación en el Concejo

Los efectos del crecimiento explosivo de la ciudad han sido temas discutidos al interior del Concejo Municipal. El alcalde Sergio Zarzar reconoció que las demandas expuestas en la encuesta del Minvu son comunes a muchas ciudades, pero se debe reconocer que ene Chillán "se ha avanzado en varias de estas materias". Sin embargo, el concejal Jorge Marcenaro manifestó en la última sesión su preocupación por la tardanza en la actualización del Pladeco. "Hoy se cuenta con los recursos suficientes para abordar situaciones crónicas como el arreglo de calles, cambio de baldosas o los perros vagos", dijo en relación a los $30 mil millones que dispone este año el erario municipal.