Fue una semana proactiva para Loreto Carvajal. La diputada por el Distrito 42 asumió el martes pasado la presidencia de la Comisión de Agricultura, Silvicultura y Desarrollo Rural de la Cámara Baja, con primera sesión incluida; almorzó con el nuevo Embajador de Taiwán en Chile, Jaime H.T. Chen, y al igual que sus colegas, votó las indicaciones de la Comisión Mixta del Congreso que finalmente llevó a la aprobación del proyecto de Reforma Laboral, a la espera de su promulgación.
Hoy, al mediodía, almorzará con el ministro de Agricultura, Carlos Furche, para analizar el avance en las soluciones para los productores viñateros del Valle del Itata. En la cita también conversará, probablemente, sobre el oficio que le envió la semana pasada para que el Ejecutivo ponga urgencia al proyecto de ley que establece normas sobre la actividad apícola y protege su desarrollo sustentable.
- ¿Qué representa asumir este cargo para una parlamentaria que proviene de una zona agrícola?
Es un gran desafío y una tremenda responsabilidad. Durante este periodo trabajaré para atender las necesidades y propiedades, y darle un enfoque público a este gran sector que es la agricultura; y por supuesto, que tiene una gran connotación, porque represento a trece comunas de Ñuble y dos de Bio-Bio, con una esencia marcadamente rural.
- Una zona con grandes demandas…
Sin duda. Los temas prioritarios son el agua y el impacto que tendrá la implementación de la ley de servicios sanitarios rurales acompañado a la modificación al Código de Aguas.
-Ese tema precisamente es parte del debate de la comisión.
El primer punto de la tabla fue iniciar la discusión de las indicaciones del proyecto de reforma al Código de Aguas, que va a implicar un antes y un después respecto a lo que significaba la normativa del agua como recurso y que debe estar destinado al consumo humano como como derecho esencial.
- Otra preocupación es lo que sucede con los vinateros…
Sabemos lo que está pasando con ellos, y también lo que pasa con el trigo, el maíz, la remolacha y el ganado, que son rubros que para nuestra provincia son de verdad vitales. Y esa será mi preocupación como presidenta: defender a la agricultura y sentar las bases que garanticen normativas que vayan en beneficio de nuestros pequeños y medianos productores.
-Esta comisión está integrada por agricultores, médicos veterinarios, técnicos forestales y agrícolas, ¿eso le ayudará a un trabajo más acucioso en la tramitación legislativa?
Tenemos una comisión técnica que va en directa relación con nuestros territorios y representantes desde la sexta hacia el sur y eso es sumamente importante. Es una comisión que no es fácil, porque también está integrada por grandes agricultores como el diputado (Ignacio) Urrutia.
- E Iván Flores, que fue el delegado presidencial de la región de Los Ríos…
Iván ya no está, porque fue reemplazado por Iván Fuentes, diputado por Aysén. Pero lo más destacable es que todos estamos por mejorar el agro en cada uno de nuestros territorios.
- ¿Existirá una posibilidad que esta comisión sesione en Ñuble, como lo hicieron dos comisiones del Senado?
Sí. A la anterior presidenta (Denisse Pascal) le había planteado que sesionáramos allá. Y por supuesto que sería una buena idea hacerlo, ojalá en el mismo sector viñatero pensando en la nueva región que necesita de todo nuestro respaldo.
-En esta reunión que sostendrá (hoy) con el ministro Furche, ¿saldrá "humo blanco", considerando que existen otras gestiones similares que realizó el senador Felipe Harboe?
En esto estamos todos. Hace 15 días atrás me reuní con el ministro, hemos estado dando seguimiento a lo que pasa con las distintas comunidades y estuve con el director nacional de Indap. La situación de los viñateros se tiene que resolver con respaldos, insumos, incentivos, inversión y centros de acopio. También tenemos que trabajar más a largo plazo y por eso el año pasado presenté un proyecto de ley de fomento a la actividad vitivinícola de carácter permanente. El asesor del ministro de Agricultura me comentó que se podría modificar la indicación para que a los vinos se les quite el porcentaje de agua y tengan más uva, lo que significa millones de kilos de uva más y sería una buena medida. Sin embargo, tenemos que avanzar en el tema de la comercialización, la infraestructura como bodegas donde puedan procesar sus vinos. Habrá más posibilidades en la medida que estén organizados.