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Déficit hídrico podría afectar la superficie de siembra

ÑUBLE. A un 64% asciende, en promedio, el déficit los caudales en las tres cuencas hidrográficas de la provincia, lo que genera preocupación entre los agricultores para los próximos meses.
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Marcelo Arroyo L.

¿Qué, cuánto y cómo sembrar? La trilogía clásica de la economía es la que viven los agricultores por estos días por uno de los insumos esenciales de la producción agrícola: el agua.

El déficit de precipitaciones de nieve y lluvia en las tres principales cuencas hidrográficas de Ñuble -de un 63,8% en un promedio- genera preocupación e incertidumbre por una situación que no se repetía en décadas y es muy similar a la "gran sequía" que afectó a la desde Atacama hasta Biobío hace casi 50 años.

"Estamos enfrentados a la peor sequía de la que se tiene recuerdo hasta el momento. Nadie puede hacer proyecciones de lo que pasará, por eso debemos ser muy cautos con nuestros cultivos", comentó la presidenta de la Junta de Vigilancia del Río Ñuble, Margarita Letelier.

Desde el punto de vista de las lluvias, a la fecha han precipitado 327.2 mm en la zona, lo que deja todavía un déficit del 53% de agua caída, pero casi un tercio menos que el año pasado y muy distante de 698.5 mm de un promedio de año normal, según datos de la base del Aeródromo Bernardo O'Higgins de la Dirección de Meteorología de Chile (DMC).

El año pasado, julio fue el mes en que más precipitó, con 268.2 mm, muy distinto a lo que sucedió este año, en que solo ha caído 159.2 mm de agua.

De todas formas, junio fue factor primordial para la presente sequía, dado que en el mes pasado, la DMC solo registró 4.2 mm en 30 días, lo que llevó, entre otros hechos, a suspender el tradicional inicio de la temporada de nieve en la Termas de Chillán y aumentar los días en Emergencia ambiental en la intercomuna.

¿Caudales o estiajes?

En el caso del cuenca del Ñuble, en la actualidad en este río existe un déficit del 71.3% en su caudal, respecto a los promedios históricos medidos sobre el mismo río del cual dependen 53 canales y cerca de 5 mil regantes y productores.

El déficit se ha ido agudizando al paso del tiempo, producto de la escasa y nula precipitación caída. Mayo-junio, y lo que va de Julio del presente año, incluso ha presentado valores de caudales significativamente menores a la temporada 1998-1999, siendo esa una de las temporadas más críticas en materia de disponibilidad de recursos hídricos, con consecuencias nefastas para la agricultura.

"Lo anterior pone en alerta al mundo rural, sobre todo considerando que nos encontrábamos saliendo de un fenómeno de El Niño y entrando a una fase neutra, en consecuencia que aún no debiera hacerse presente los efectos de La Niña, que según los informes agroclimáticos la tendremos presente en primavera, con una disminución importante de la precipitación y el aumento de heladas primaverales", señaló el ingeniero civil Agrícola de la Junta de Vigilancia del Ñuble, Salvador Salgado.

Según cifras de la Junta de Vigilancia del Río Chillán, hasta ayer el déficit de precipitación combinado entre las dos estaciones (Aeródromo y Chillán Viejo) para la ciudad de Chillán, alcanza el 50%.

De mantenerse sin precipitaciones hasta fin de mes, el déficit subiría a 52%, precisó el administrador de la Junta, el ingeniero Carlos Leiva.

En cuanto al caudal del río Chillán, las lluvias provocaron una crecida que alcanzó su peak el pasado lunes 25, a las 0:30 horas, con un caudal de 38,07 metros cúbicos/segundo.

"Este caudal ha ido bajando, y a esta hora, 14:30, tenemos un caudal de 15,714 metros cúbicos/segundo. Estamos en el descenso de la crecida, y va a seguir bajando. Y debería estabilizarse en aproximadamente entre 9,0 y 10,0 metros cúbicos/segundo", dijo Leiva.

Por su parte, los caudales del Río Diguillín bordean el 70% de déficit.

"Es la primera lluvia fuerte del año y falta mucho para poder tener algún tipo de inundación en el río como la teníamos antes", dijo Francisco Saldías, juez de Agua de la Junta de Vigilancia del Río Diguillín.

Si bien el déficit bajó un 10%, de 80% a 70%, de llover y nevar en las próximas semanas solo aminoraría el porcentaje, pero no sus efectos en el área agrícolas, en una zona de influencia de poco más de 20 mil hectáreas y alrededor de 4.500 productores agricultores de seis comunas de la zona sur de Ñuble.

"Es más sensible para Yungay, Pemuco y El Carmen que depende casi exclusivamente del canal Laja Diguillín", dijo.

En el caso de la Laguna del Laja se encuentra con 790 millones de m3, una poco más que el año pasado, pero muy por debajo del promedio histórico anual.

"Las proyecciones de nieve son aún muy precarias para los meses que vienen y será muy dramática si no hay precipitaciones", sostuvo.

Menos superficie

El Seremi de Agricultura dijo que por el momento no existen condiciones de déficit hídrico agrícola, aunque persiste la preocupación.

"Seguimos monitoreando esta situación para implementar medidas", comentó Rodrigo García.

La autoridad regional indicó que las lluvias del fin de semana han permitido las plantaciones como el abastecimiento de agua para animales.

Margarita Letelier dijo que existe doble preocupación, una por la falta de precipitaciones (nieve en el caso del río Ñuble); y por otro lado, saber cuánto y cómo sembrar. La mayor incertidumbre se da en los cultivos rentables como trigo, remolacha, arroz y achicoria en lo que podría disminuir la superficie de siembra.

"Venimos sabiendo de dos temporadas malas en precios y clima", acotó.

La dirigente de los regantes dijo que los trigos de invierno sufrieron la falta de agua y las "heladas", en especial en la precordillera.

La excepción fueron los trigos regados con pivotes, pero son los menos.

"Hubo mucho descalce y los rendimientos no van a ser buenos", dijo Letelier.

Por su parte, Francisco Saldías agregó que en esta planificación los agricultores optarán por aquellos productos que requieren menos agua y riego, y sean rentables a la vez, lo que de acuerdo a la experiencia llevará a un sobreoferta. Y de mantenerse la demanda, los precios tenderán a bajar.

"Frente a la pérdida, es difícil la decisión que tienen los agricultores en este minuto", sostuvo Saldías.

"Estamos enfrentados a la peor sequía de que se tiene recuerdo, hasta el momento. Nadie puede hacer proyecciones de lo que pasará, por eso debemos ser muy cautos con nuestros cultivos".

Margarita Letelier, Pdta. Junta Vigilancia Río Ñuble"

Agosto podría salvar el año

Este viernes se reunirá, probablemente en Concepción, el Comité Regional de Emergencia Agrícola para analizar las últimas cifras sobre caudales y precipitaciones en la región. El coordinador de la macrozona de la Comisión Regional de Riego, Paulo de la Fuente espera que en agosto el déficit de lluvia y nieve pueda disminuir. "Frente a este escenario, la CNR está fortaleciendo la tecnificación con un convenio con el Gore Biobío por $5 mil millones, que también permitirán recuperar algunos embalses CORA. Estas acciones ayudarán a paliar los efectos de la sequía, cuya señales de escasez hídrica ya vienen de hace años y en la que la adaptación de la normativa y las prácticas son necesarias", dijo.

Estado actual

Gran sequía

El fenómeno actual es parecido a la Gran Sequía de 1968 y similar a lo vivido en las temporadas 1998-99.

Déficit

53% en lluvias y 64% en los caudales de los ríos de la provincia a la fecha.

Incertidumbre

La situación preocupa a regantes y agricultores para la próxima temporada.

Menor superficie

De proseguir el déficit, se podría reducir la superficie de siembra.

Cultivos y agua

La falta de agua podría genera en concentrase en cultivos rentables que requieren menor agua y riego.

Monitoreo

El Comité Regional de Emergencia Agrícola sigue monitoreando la situación.

Medidas y soluciones

La CNR y el Gore Biobío entregarán 5 mil millones para tecnificación del riego y recuperación de embalses CORA en la zona.

327.2 mm. han precipitado a la fecha en la zona, poco menos de la mitad del promedio ala fecha en una año normal, que debería bordear los 700 mm. y a lo que 5 días con mínimas bajo cero y 3 iguales a 0.

790 millones de m3 tiene la laguna del Laja ala fecha, un poco más que el año pasado en igual periodo, pero muy por debajo del promedio histórico anual, según la Junta Vigilancia del Río Diguillín.