Calidad en educación inicial
Multitudinaria marcha contra las A.F.P. Rezan los titulares de todos diarios de cada ciudad del país.
El rechazo a la gestión de las Administradoras de Fondos de Pensiones es general, sin lugar a dudas, pero constatada tan nítidamente la realidad, traducida y expresada, ante este profundo rechazo el diagnóstico es claro.
El tema es qué hacemos ahora, después de marcha tras marcha. Lo primero es intentar auscultar cuáles son las reales y posibles alternativas de solución y, lo segundo, en este marco de tan profunda desconfianza y reblandecimiento de las instituciones, es dónde encontrar interlocutores válidos para presentar las demandas y analizar soluciones.
En este desértico panorama desprovisto de líderes, esta es una de las más grandes tareas del momento para enfrentar los problemas políticos y sociales en general y este movimiento en particular.
Juan Luis Castillo Moraga.
AFP de Canadá
Señor Director: Los fondos de pensiones de los 270 mil profesores canadienses compraron las sanitarias de las V y VIII región, Esval y Essbio, cuando a un presidente chileno se le ocurrió venderlas para mejorarles los sueldos a los parlamentarios chilenos y a él.
Los profesores canadienses, a través de sus empleados, aumentaron el precio del agua a los usuarios chilenos, en 6 veces su valor desde el año 2000, con lo que en promedio cada familia aumento su gasto por concepto de agua y agregados en unos 20 mil pesos al mes al menos en los últimos 15 años.
Con este, absolutamente absurdo aumento de precio del agua, a los consumidores chilenos, la inversión canadiense en Chile le renta al menos un 100% anual a la AFP referida. Así funciona una AFP administrada por personas pensantes, especialmente cuando hay un país donde toda la Elite tanto política como económica le entrega en bandeja a estas instituciones extranjeras, el presente y el futuro del pueblo chileno.
Da pena escuchar como divagan todas las autoridades, desde las más altas, opinando sobre el mejoramiento a las rentas de los jubilados. El ejemplo aquí expuesto es un caso marginal e ínfimo, comparado con las carreteras, la energía, la creación de ciudades inteligentes y otros, donde estaría, sin lugar a dudas, no solo la solución a las jubilaciones, si no que la absoluta recuperación de los monopolios estratégicos de Chile, para los chilenos.
Fernanda Arelmann Steinbrecher.
Pensiones
Señor Director: Todos sabemos que las pensiones AFP son malísimas e injustas con quien ha trabajado toda una vida, pero lamentablemente se habla de las pensiones de las FF.AA y de Orden y se critica sin sentido a las personas que hicieron una opción de vida optando a profesiones difíciles y mayormente incomprendidas.
A modo de ejemplo, Detectives y Carabineros tienen jornadas laborales de más de 14 horas por día, servicios de guardia de 24 horas, trabajo durante fines de semana y festivos, y en cuanto a horas su jornada semanal a veces supera las 80 horas sin considerar recargos legales por fines de semana.
Por lo mismo a todos quienes critican y generalmente sin fundamento, los invito a sumar horas y establecer cuántas horas trabaja un policía al año y compararlo con otro trabajador, y creo que ahí se dará cuenta del por qué son regidos por sistemas de previsión distintos y que 30 años de servicio equivale a 45 años de cualquier otro trabajador del Estado o particular.
Los que critican , no saben o no quieren saber si un policía trabajase las horas legales, debería dejar lo que está haciendo y retomar su labor al día siguiente. Pero a nadie le gustaría y especialmente a los críticos que un cuerpo humano quedase abandonado en la vía pública por término de jornada laboral, pero pareciese que muchos desean ello y por lo mismo se empecinan en criticar y nunca reconocer que son labores totalmente distintas.
Alberto Contreras Silva.
Paradoja
Resulta paradójico que, ante las últimas informaciones relativas a los procedimientos financieros de la red Laureate, algunas autoridades políticas exijan abrir investigaciones a cargo de organismos como el SII y el Ministerio Público. Recientemente, las investigaciones cursadas por las mismas entidades arrojaron que dicha institución cumple con la normativa vigente y las exigencias de la ley. ¿Qué sentido tiene, entonces, pedir nuevas investigaciones a los mismos organismos, si los resultados de sus últimos trabajos son desestimados por la misma autoridad? Una actitud así sólo demuestra que tales autoridades ya han establecidos sentencias a priori, y que la realidad estará equivocada en la medida en que no concuerde con dichos juicios.
María Gabriela Huidobro, Decano Facultad Educación; Carmen Gloria Garrido; Silvina Zapata e Ignacio Muñoz, todos ellos miembros del Consejo de la Facultad de Educación de la Universidad Andrés Bello.