Indignación existe entre los apoderados del colegio La Purísima Concepción por una acción ocurrida la semana pasada en donde aseguran, existió maltrato y vulneración de derechos a niñas que cursan tercer año básico en el establecimiento.

Los hechos, según relató Claudia Barrantes, madre de una de las pequeñas afectadas por lo ocurrido, se desencadenaron tras extraviarse diez mil pesos al interior del Tercer Año B del colegio, ante lo cual las inspectoras habrían tomado duras medidas para dar con el dinero perdido.

"Las encerraron en la sala y hasta les prohibieron ir al baño. Frente a eso mi hija tuvo que recurrir a una estrategia poco digna para no orinarse en la ropa. Otra niña tiene un sólo riñón y tampoco fue autorizada. Hubo niñas que suplicaban poder ir al baño. Incluso, y de una manera bien simpática por lo demás, las amenazaron con llamar a Carabineros y a la PDI si el dinero no aparecía, lo que para el caso de niñas de 8 o 9 años, causa que se retraigan", comentó.

Barrantes indicó que las menores fueron registradas hasta en los zapatos, por lo cual debieron sacarse el calzado y las inspectoras les dijeron que se quedarían en el colegio hasta que el dinero apareciera.

"Una niña estaba muy desvanecida y no hubo preocupación alguna por ella ante un eventual desmayo. Fueron maltratadas y humilladas, las revisaron por completo, cuestión que no debería suceder si al menos, el apoderado no está presente. No avalo el hecho de que se hayan perdido diez mil pesos, pero tampoco que los adultos que trabajan en el colegio consignen como un robo una situación que puede haber sido una simple pérdida", sentenció.

Barrantes, quien es asistente social de profesión, tiene dolor respecto a la situación, pues aparte de ser apoderada del establecimiento en cuestión, también es ex alumna del mismo. "Le manifesté a las autoridades del colegio que esperaba que la educación integral que tuve, sea la misma que reciban los niños ahora", reflexionó con un dejo de resignación Claudia Barrantes.

Más testimonios

Tras lo sucedido, y luego de conversar con el orientador del colegio, Barrantes publicó lo acontecido en facebook, lo que junto con generar reacciones, trajo consigo nuevos testimonios respecto a otras situaciones ocurridas en la unidad educativa.

"Las dejaban sin ir al baño, las ignoraban. También supe de otra apoderada que su hija llegaba con las manos marcadas en sus manitos porque la profesora se las apretaba. Por eso no me extraña para nada lo sucedido en ese colegio", dijo Carla Echeverría, quien optó por retirar a su hija del recinto educativo.

Echeverría agregó que jamás la dejaron hablar con el director del establecimiento, sólo con la orientadora. Ello lo avalaban diciendo que "tenía que seguir los protocolos y conversar con ella primero", detalló.

La situación ya está en conocimiento de la Superintendencia de Educación del Bío Bío, quienes solicitaron los antecedentes respectivos al colegio para investigar los hechos a fondo, los que hasta el cierre de esta edición, no habían sido remitidos a la entidad fiscalizadora.

Diario Crónica Chillán, intentó comunicarse en reiteradas oportunidades con Milton Brevis, director del recinto educacional, no obstante, éste no contestó, por lo que fue imposible obtener su versión en relación a los sucesos.

Los miembros del sindicato de trabajadores de Núcleo Paisajismo denunciaron una serie de irregularidades que habrían sido cometidos por su empleador.

Entre los temas que denuncian, está el incumplimiento del pago total según el acuerdo llegado en la última negociación colectiva.

"Nosotros hicimos una negociación colectiva con la empresa el año pasado y desde enero a nosotros no nos pagan lo que ganamos con la negociación. Nosotros necesitamos que nos den la plata y un mejor trato", indicó el presidente del sindicato, Marcos Oses

Según Oses, la diferencia entre lo establecido por el convenio y lo que cobran está entre los $20.000 o $25.000.

Otro de los hechos denunciados por los trabajadores es que son obligados a trabajar el doble, porque Núcleo Paisajismo no cuenta con la cantidad de personal para cubrir todas las áreas de acción.

"Por ejemplo, si yo salgo de vacaciones la empresa no coloca reemplazo. En vez de haber 10 personas en terreno, andan 6 o 4. A los chiquillos le sacan el jugo, tenemos como 18.000 m2 por persona", lanzó Oses.

Asegura además que cumplen con las responsabilidades porque son amenazados con ser despedidos si se niegan a trabajar.

"A la gente la amenazan con ir a trabajar porque si no lo despiden. Somos amenazados constantemente por la jefatura de la empresa", agregó.

Además indican que trabajan con implementos de mala calidad y que en muchos casos ellos deben poner sus herramientas para poder cumplir con su labor.

De paso, hicieron un llamado a la municipalidad para que averigüe las irregularidades que comente su empleador.

De parte de la empresa Núcleo Paisajismo indicaron escuetamente que "nosotros cumplimos con todo lo que está en las bases y sus sueldos están al día".