Si a nivel nacional se estableció que la cifra de abstención llegó al 64%, siendo la más alta desde el retorno a la democracia, el caso de Chillán es aún más preocupante, dado que 49.514 electores asistieron a las urnas, de un padrón que asciende a 146.514 personas habilitadas para sufragar, transformándose en la menor participación de ciudadanos de la provincia.

Otra de las cifras que causó preocupación fue el hecho de haber reducido la cifra de votantes en la capital provincial. De hecho, en los comicios del 28 de octubre de 2012 se registraron 63.033 sufragios, que este año se redujo en 21,4%.

De los votos que fueron válidamente escrutados en las elecciones pasadas, que ascendieron a 60.606 votos, en esta oportunidad el Servicio Electoral (Servel) registró (en las 432 mesas dispuestas) 47.725 votos válidamente emitidos.

Cabe destacar además que la cifra de votos nulos ascendió en esta oportunidad a los 1.222 sufragios, mientras que otras 567 papeletas fueron depositadas en blanco por los electores.

Ñuble

En la provincia de Ñuble, existiendo un padrón electoral de 406.412 electores, el total de personas que llegó a votar durante la jornada de ayer se elevó hasta los 193.112; de esta forma, la tasa de abstención llegó al 53%, cifra que es inferior al promedio de abstención del país.

Hasta el momento de su voto, las autoridades y candidatos realizaban un llamado a través de los medios para que las personas asistieran a votar; sin embargo, hubo tres casos de abstención por sobre el 50%.

Así ocurrió en Chillán Viejo, donde la cifra de abstención llegó al 54%, con un total de 8.971 votos, de un padrón electoral de 19.485 votantes.

En San Carlos votaron 19.074 personas, de un padrón electoral que asciende a los 45.668 votantes, lo que se traduce en una abstención del 58%, siendo la segunda mayor de la provincia de Ñuble.

En tercer lugar, en tanto, se registró la abstención de Yungay, de un 52%, ya que de un universo de 15.353 electores, llegaron a las urnas a votar 7.245 personas.

Casos destacados

En la provincia de Ñuble, con el 100% de las mesas escrutadas, hubo tres comunas que tuvieron una destacada participación por parte de los electores, con una abstención igual o menor al 30%.

El registro de mayor participación en una comuna por parte de la ciudadanía se dio en Trehuaco, donde tienen un padrón electoral de 6.182 personas, de las cuales sólo se ausentaron 1.505, lo que representa un 24% del total.

Asimismo, en Ninhue, en una estrecha competencia por elegir al alcalde, faltaron 1.806 personas, de un total de 6.157 electores.

En Portezuelo, votaron 4.090 personas, de un total de 5.878 electores, lo que representa una abstención del 30% en esta comuna.

Preparó sus guantes, echó dentro de una bolsa plástica un sándwich y una botella con agua. Se puso un chaleco reflectante, además de certificar que en el bolsillo de su pantalón llevaba el carnet de identidad que le permitiría votar. Finalmente, certificó que la silla de ruedas tuviera aceite y las ruedas a punto. Así fue como Pedro Ilabarra inició su viaje desde Chillán Viejo hasta Coihueco, a las 10 horas de ayer.

El hombre de 56 años llamó la atención en las redes sociales y los medios de comunicación que replicaron su historia, interpretada como una valiosa travesía: Realizó un viaje de 40,1 kilómetros, empujado sólo con la fuerza de sus brazos y la motivación de cumplir su deber cívico.

"Me demoré poco más de cuatro horas. En realidad pensé en viajar de Concepción si era necesario, quería votar en mi tierra, como siempre lo he hecho", señaló el hombre, que hace casi seis años perdió sus piernas, tras ser atropellado por el tren.

"Pocos meses antes había perdido a mi esposa, porque le dio cáncer. Ella murió y me dio depresión. Trabajaba sin motivación y una mañana mi hija me pidió que la fuera a dejar al paradero con mis dos nietos", relató Pedro Ilabarra.

"Después de ir a dejar a mi hija volví a mi casa y pasó el biotrén a las 7 y media, pero no lo sentí. Una señora me avisó que venía y me eché hacia atrás, pero me agarró las piernas", señaló el hombre, quien tras el episodio, lejos de echarse a morir, decidió vivir mejor.

"Se me pasó la depresión. Un maestro me cobró $200 mil para arreglar la silla de rueda y así es como me movilizo ahora", señaló.

Sobre su ejemplo, dijo que es "triste que los jóvenes no vayan a votar. Uno cumple con el deber cívico, pero es porque se quiere a sí mismo, quiere pedir cosas y para eso, lo mínimo, es ir a votar".

El hombre, oriundo de Coihueco, vive ahora en Concepción, y un trámite que allá realizó le jugó la mala pasada, como a otros 10 mil ñublensinos: El registro civil cambió arbitrariamente su domicilio electoral a la capital del Bío Bío. Personal del Servel se acercó a Pedro Ilabarra. Le explicaron que no podría votar. "Pero volveré. Nadie me va a sacar de acá. No tengo las piernas, pero tengo harta fuerza en los brazos", dijo Ilabarra, quien agradeció a Bernarda Sepúlveda, quien junto a su esposo y su hijo lo ayudaron a completar los últimos 3 kilómetros en auto. Sobre su fecha de regreso, dijo que será esta jornada.

Si a nivel nacional se estableció que la cifra de abstención llegó al 64%, siendo la más alta desde el retorno a la democracia, el caso de Chillán es aún más preocupante, dado que 49.514 electores asistieron a las urnas, de un padrón que asciende a 146.514 personas habilitadas para sufragar, transformándose en la menor participación de ciudadanos de la provincia.

Otra de las cifras que causó preocupación fue el hecho de haber reducido la cifra de votantes en la capital provincial. De hecho, en los comicios del 28 de octubre de 2012 se registraron 63.033 sufragios, que este año se redujo en 21,4%.

De los votos que fueron válidamente escrutados en las elecciones pasadas, que ascendieron a 60.606 votos, en esta oportunidad el Servicio Electoral (Servel) registró (en las 432 mesas dispuestas) 47.725 votos válidamente emitidos.

Cabe destacar además que la cifra de votos nulos ascendió en esta oportunidad a los 1.222 sufragios, mientras que otras 567 papeletas fueron depositadas en blanco por los electores.

Ñuble

En la provincia de Ñuble, existiendo un padrón electoral de 406.412 electores, el total de personas que llegó a votar durante la jornada de ayer se elevó hasta los 193.112; de esta forma, la tasa de abstención llegó al 53%, cifra que es inferior al promedio de abstención del país.

Hasta el momento de su voto, las autoridades y candidatos realizaban un llamado a través de los medios para que las personas asistieran a votar; sin embargo, hubo tres casos de abstención por sobre el 50%.

Así ocurrió en Chillán Viejo, donde la cifra de abstención llegó al 54%, con un total de 8.971 votos, de un padrón electoral de 19.485 votantes.

En San Carlos votaron 19.074 personas, de un padrón electoral que asciende a los 45.668 votantes, lo que se traduce en una abstención del 58%, siendo la segunda mayor de la provincia de Ñuble.

En tercer lugar, en tanto, se registró la abstención de Yungay, de un 52%, ya que de un universo de 15.353 electores, llegaron a las urnas a votar 7.245 personas.

Casos destacados

En la provincia de Ñuble, con el 100% de las mesas escrutadas, hubo tres comunas que tuvieron una destacada participación por parte de los electores, con una abstención igual o menor al 30%.

El registro de mayor participación en una comuna por parte de la ciudadanía se dio en Trehuaco, donde tienen un padrón electoral de 6.182 personas, de las cuales sólo se ausentaron 1.505, lo que representa un 24% del total.

Asimismo, en Ninhue, en una estrecha competencia por elegir al alcalde, faltaron 1.806 personas, de un total de 6.157 electores.

En Portezuelo, votaron 4.090 personas, de un total de 5.878 electores, lo que representa una abstención del 30% en esta comuna.

Preparó sus guantes, echó dentro de una bolsa plástica un sándwich y una botella con agua. Se puso un chaleco reflectante, además de certificar que en el bolsillo de su pantalón llevaba el carnet de identidad que le permitiría votar. Finalmente, certificó que la silla de ruedas tuviera aceite y las ruedas a punto. Así fue como Pedro Ilabarra inició su viaje desde Chillán Viejo hasta Coihueco, a las 10 horas de ayer.

El hombre de 56 años llamó la atención en las redes sociales y los medios de comunicación que replicaron su historia, interpretada como una valiosa travesía: Realizó un viaje de 40,1 kilómetros, empujado sólo con la fuerza de sus brazos y la motivación de cumplir su deber cívico.

"Me demoré poco más de cuatro horas. En realidad pensé en viajar de Concepción si era necesario, quería votar en mi tierra, como siempre lo he hecho", señaló el hombre, que hace casi seis años perdió sus piernas, tras ser atropellado por el tren.

"Pocos meses antes había perdido a mi esposa, porque le dio cáncer. Ella murió y me dio depresión. Trabajaba sin motivación y una mañana mi hija me pidió que la fuera a dejar al paradero con mis dos nietos", relató Pedro Ilabarra.

"Después de ir a dejar a mi hija volví a mi casa y pasó el biotrén a las 7 y media, pero no lo sentí. Una señora me avisó que venía y me eché hacia atrás, pero me agarró las piernas", señaló el hombre, quien tras el episodio, lejos de echarse a morir, decidió vivir mejor.

"Se me pasó la depresión. Un maestro me cobró $200 mil para arreglar la silla de rueda y así es como me movilizo ahora", señaló.

Sobre su ejemplo, dijo que es "triste que los jóvenes no vayan a votar. Uno cumple con el deber cívico, pero es porque se quiere a sí mismo, quiere pedir cosas y para eso, lo mínimo, es ir a votar".

El hombre, oriundo de Coihueco, vive ahora en Concepción, y un trámite que allá realizó le jugó la mala pasada, como a otros 10 mil ñublensinos: El registro civil cambió arbitrariamente su domicilio electoral a la capital del Bío Bío. Personal del Servel se acercó a Pedro Ilabarra. Le explicaron que no podría votar. "Pero volveré. Nadie me va a sacar de acá. No tengo las piernas, pero tengo harta fuerza en los brazos", dijo Ilabarra, quien agradeció a Bernarda Sepúlveda, quien junto a su esposo y su hijo lo ayudaron a completar los últimos 3 kilómetros en auto. Sobre su fecha de regreso, dijo que será esta jornada.