Son 39 fiscalizaciones las que ha realizado la Secretaría Regional Ministerial del Biobío al 10 de noviembre del presente en la provincia de Ñuble, en el marco de la vigilancia del cumplimiento de la Ley 20.606 de Composición Nutricional de Alimentos, que regula el etiquetado, venta en kioscos escolares y la publicidad dirigida a menores de 14 años de edad. De ellas, 16 han derivado en el inicio de sumario sanitario, lo que implica un 41%.

"En la provincia de Ñuble se han realizado un total de 22 fiscalizaciones a supermercados, que han derivado en el inicio de 13 sumarios; así como 17 inspecciones a kioscos escolares, que han dado inicio a 3 sumarios", declaró el seremi de Salud del Biobío, Mauricio Careaga.

En el caso de los supermercados se ha iniciado sumario a un 59,1% de los locales inspeccionados, y en el caso de los quioscos escolares, a un 17,6%", agregó la autoridad sanitaria.

Los locales en los cuales se ha iniciado sumario sanitario arriesgan sanciones que van desde amonestaciones, además de pecuniarias, desde 0,1 UTM hasta las 1.000 UTM, de acuerdo a lo que indica el Código Sanitario.

Ñuble, en total, agrupa el 17,8% de las inspecciones de la región y el 19,3% de los sumarios.

Situación regional

En la región las fiscalizaciones son lideradas por Concepción (81), seguido por Biobío (71), Ñuble (39) y Arauco (28). En materia de sumarios, en tanto, Concepción registra 42, Biobío 18, Ñuble 16 y Arauco 7.

A través de esta normativa se está permitiendo una mejor elección de los alimentos por parte del consumidor, y de paso, pretendemos incidir en la reducción del consumo de productos altos en nutrientes críticos, que conlleve a una disminución gradual de la obesidad y la carga de enfermedad asociada", recalcó Careaga.

Una compleja situación es la que se avizora en el hospital Herminda Martín de Chillán, tras los 22 días de paralización producto de la movilización del sector público y la negociación fallida con el gobierno por un mayor incremento salarial. Lo anterior, ya que en dicho lapso se suspendieron 7.092 consultas de especialidades médicas y 287 intervenciones quirúrgicas, generando una sobrecarga aún mayor en las listas de espera.

Crónica Chillán consultó a Comunicaciones del Herminda Martín el tiempo en que se incrementarían esas listas de espera y los tiempos de resolución de las mismas, tomando en consideración el nuevo escenario pos movilización. Sin embargo, no hubo respuesta por parte del principal establecimiento de salud de la provincia de Ñuble.

Retraso

"No hay más médicos ni más pabellones, así que todas las cirugías que se dejaron de hacer se van a tener que reprogramar o el Ministerio de Salud, comprar servicios para que esos pacientes se puedan operar. Este es el costo que la salud en Ñuble va a tener que pagar" puntualizó Carlos Rojas, presidente del Colegio Médico Capítulo Ñuble.

Respecto a la posibilidad de trabajar fines de semana o en horario extraordinario, Rojas es enfático. "Nadie está obligado a trabajar fuera del horario por el que está contratado, por lo que las autoridades en colaboración con nosotros deberán buscar la mejor fórmula con la finalidad de mejorar la eficiencia con las horas de pabellón y los médicos", sentenció.

Sobre el mismo punto, desde la Federación Nacional de Profesionales Universitarios de los Servicios de Salud (Fenpruss) Ñuble, su presidenta, Consuelo Villaseñor, indicó que no sé si nuestra gente va a ir a trabajar, esa va a ser una postura individual". Sin embargo, dijo, "la idea es resolver el tema con los mismos funcionarios y evitar las compras de servicios, pues lo único que se hace con eso es debilitar la salud pública. Por lo mismo esperamos que la gente apoye y se pueda cumplir con los procedimientos pendientes, previo a una conversación con los directivos", remarcó.

Reagendar

Rodrigo Avendaño, director del hospital Herminda Martín, puntualizó que pese a todos estos esfuerzos se registró un número importante de atenciones sin realizar. "Si bien estas prestaciones no eran de urgencia, de todas formas impactan en la actividad asistencial regular, sobre todo porque involucran a personas que esperaban una atención durante mucho tiempo", reconoció.

Avendaño indicó que, junto con asegurar el funcionamiento del hospital y la continuidad en áreas críticas, se está diseñando un plan de recuperación de las prestaciones suspendidas. "Es un gran desafío, ya que por un lado hay que desarrollar lo que habitualmente se realiza en un día normal y además atender a las personas cuya atención fue postergada producto del paro", aclaró.

"Por ello, se reagendarán las cirugías y consultas médicas de especialidades en horario extraordinario, después de la jornada habitual y los fines de semana. Esto nos obligará a comprar servicios, pero aún no hemos definido esa cifra ya que esperamos que la mayor recuperación sea con la capacidad institucional instalada", enfatizó el director.