Comenzó instalación de primer subsidio de aislación térmica
PDA. Medida inserta dentro del Plan de Descontaminación Ambiental de la intercomuna, busca disminuir los niveles de polución en el aire por MP 2.5
"Estoy feliz porque ahora no tendré más humedad ni tampoco mi casa se me lloverá". Esas son las palabras de Eugenia Garrido, una de las 249 personas que se han adjudicado el subsidio de aislación térmica, iniciativa que durante este año entregará 1.310 soluciones en la intercomuna (Chillán-Chillán Viejo).
De visita ayer en la capital de Ñuble, María Luz Gajardo, directora regional del Serviu Bío Bío, destacó que "el subsidio permite ayudar a personas que si bien tienen una vivienda, no han tenido los medios para hacerle las reparaciones y mantenciones que permiten tenerla en buenas condiciones", remarcó.
La medida es uno de los dos ejes estructurantes (la otra es el recambio de calefactores) del Plan de Descontaminación Ambiental (PDA), que a contar de abril de este año está vigente en la intercomuna con la finalidad de bajar en un plazo de diez años, los altos niveles de Material Particulado MP 2.5, pues una vivienda con una adecuada aislación, requiere en promedio un 50% menos de combustible para calefaccionarse.
Por lo anterior, es que la iniciativa gubernamental contempla entregar 20 mil las soluciones en 10 años, correspondiendo a contar del 2017 dos mil subsidios cada año.
Sueño cumplido
Eugenia Garrido vive en su casa con siete personas (entre las que hay un bebé de poco más de un año), razón por la cual el mantener seca y temperada la vivienda era prioridad. Sin embargo, gracias al subsidio eso será cosa del pasado.
Lo anterior, pues las paredes de su casa estarán cubiertas con polietileno expandido de 80 milímetros y en la techumbre lana mineral de 120 milímetros, lo que mejorará su eficiencia energética. "Tenía que poner toallas en las ventanas y una canal dentro para capear el agua, lo que significaba mucha humedad, por lo que gastábamos $5 mil cada dos días, ahora esperamos que esa cifra baje", comentó esperanzada.
Joaquín Cisternas, presidente de la junta de vecinos John Kennedy, donde postularon 36 residentes, mostró su conformidad con el poder acceder a esta solución habitacional. "Cuando recibimos esta oferta de postulación, no lo pensamos dos veces. En nuestro sector, la gran mayoría son adultos mayores, lo que hace muy difícil que puedan reparar por su cuenta los desperfectos", sentenció.
Valor base puede incrementarse
El subsidio base es de 120 UF, no obstante, de acuerdo a algunas variables ese valor puede subir. Por ejemplo, por complejidad técnica de familias vulnerables (dependiendo del tamaño de la construcción) 60 UF, incremento por regularización (en caso de modificaciones) y 20 UF por incremento por cambio de techumbre, siendo el promedio que se entrega de 171 Unidades de Fomento para viviendas de 140 metros cuadrados. Cabe recordar que en promedio una vivienda intervenida, demora entre una semana y diez días en estar en condiciones de ser nuevamente habitada por sus moradores.