Puga: "Heridas impiden pensar en un perdón sincero"
ACTO EN PUNTA PEUCO. El sacerdote dijo comprender a familiares de víctimas que lo critican por haberse sumado al evento.
El sacerdote Mariano Puga, cuya participación en el acto ecuménico para pedir perdón de una decena de reos de Punta Peuco causó indignación en círculos ligados a los DD.HH., dijo ayer que "estamos tan heridos que ni siquiera podemos pensar en un perdón sincero"
El sacerdote manifestó a radio Cooperativa que muchas de las familias de las víctimas de detenidos desaparecidos cuestionaron su participación en el acto.
"Me han llamado traidor, que me olvidé de ellos, que voy a transar, que me van a convertir y todo eso. Yo comprendo, pero mientras tanto yo oía de esos hermanos que decían delante de Jesús, de sus familias y víctimas, 'perdón'", afirmó el sacerdote.
"A mi me duele, pero lo comprendo, que a miles de los que estuvimos ahí que nos hayan tratados de traidores, de que nos olvidamos de los familiares y que transamos frente a los asesinos que han asesinado a nuestros familiares", señaló el representante eclesiástico, quien sufrió detenciones y torturas en los años del régimen militar.
"Lo comprendo, porque estamos tan heridos que ni siquiera podemos pensar en un perdón sincero", agregó Puga.
La tarde del viernes, en medio de la celebración ecuménica que se celebra todos los años en Punta Peuco, un grupo de diez condenados por violación a los derechos humanos perpetrados durante el régimen militar pidieron perdón.
En la lista destacaron las palabras de Claudio Salazar Fuentes, José Zara Holger, Pedro Hormazábal Fuentes, Carlos Herrera Jiménez y Miguel Estay Reyna, entre otros ex agentes de organismos del Estado que cumplen pena por diversos delitos de este tipo.
Representantes de varias agrupaciones de familiares de víctimas de los crímenes llegaron hasta el penal para manifestar su rechazo al primer acto de perdón de un grupo de condenados por crímenes de lesa humanidad. También criticaron con fuerza la participación de los sacerdotes Fernando Montes y Mariano Puga.
Postura de reos
Frente a la sinceridad de los reos que pidieron perdón, el sacerdote sostuvo que "no tengo ningún derecho a juzgar la sinceridad con que lo hicieron los que lo hicieron".
"Me quedo con la esperanza que este gesto de estos 10 hermanos de ayer (viernes), toquen el corazón de esos hermanos que han cometido delitos atroces", añadió. Según Puga, "tenemos que valorar el gesto, que nunca olvide que hay otros miles, unos están presos y otros sueltos, que han matado y que manejan información y que no dicen nada. Hay que valorar el gesto de esos 10 de ayer (viernes)".
Diputado Jiménez apunta a sinceridad
El diputado Tucapel Jiménez, quien perdió a su padre - el dirigente de la ANEF del mismo nombre- en 1982 a manos de agentes del Estado, dijo que "no le sorprendía" la participación en el acto de Carlos Herrera Jiménez, uno de los asesinos de su progenitor. El parlamentario agregó a La Tercera que si el acto buscaba beneficiar a los reos, ese perdón "no sería sincero". Según él, Herrera Jiménez "pidió perdón desde el comienzo, cuando no estaba el debate" por los beneficios.