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Con emotiva ceremonia se despidió a uno de los gráficos más queridos de Chillán

CHILLÁN. Héctor Barriga (63) falleció inesperadamente el día sábado 4 de febrero. Su cuerpo fue velado ayer en Chillán y sus funerales serán hoy en la comuna de Tomé.
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Constanza Velásquez

Cientos de personas llegaron ayer hasta la capilla El Sagrario en la ciudad de Chillán, para dar el último adiós a Héctor Barriga (63), fotógrafo de diario Crónica Chillán, quien falleció este sábado en la comuna de Tomé.

Autoridades políticas, Bomberos, Carabineros, y personas que lo conocieron en su labor, repletaron el frontis de la Catedral para despedir a quien fuera uno de los reporteros gráficos más reconocidos en Chillán.

En el velorio, su hija Claudia Barriga, contó que el día viernes su papá los fue a visitar a Tomé, donde ellos viven, pero asegura que nunca imaginaron lo que iba a pasar. "Como al medio día mi papá dijo que iba a dar una vuelta, cosa que no era extraña en él, sin embargo no volvió. Lo llamamos tanto, insistimos, hasta las 12 de la noche y nada, la llamada se cortaba. Mi mamá fue la última en hablar con él, como a la 1 y media de esa tarde y mi papá le dijo que estaba en la playa, que no nos preocupáramos, que ya se iba. Al otro día en la mañana llegó Carabineros a informar la situación", contó Claudia.

Tras conocer la noticia, y ante el deseo de sus colegas y amigos de poder despedirse de Don Héctor, sus familiares tomaron la decisión de velarlo todo el día domingo en Chillán, permitiendo así que todos aquellos que lo querían, pudieran decirle adiós.

"Si bien nosotros somos su familia, él tenía toda una vida acá en Chillán y habría sido de un egoísmo tremendo no traerlo", dijo emocionada Claudia, y agregó: "Mi papá toda la vida fue de amores compartidos y ahora no fue la excepción, entre Tomé y Chillán, ese era mi papá".

Humilde y dedicado

El mayor de 5 hermanos y padre de 4 hijos, Héctor Barriga se caracterizó por su alegría y dedicación en su trabajo. Jornadas maratónicas con pautas policiales a las 6 de la mañana, o incendios que se extendían hasta altas horas de la noche, siempre se le vio contento y feliz de poder hacer lo que más le gustaba: la fotografía.

Su amiga, Maria Eugenia Uribe, aseguró que Héctor no solo era un buen profesional, sino también una gran persona, muy humana y siempre preocupada por los demás.

"Me acuerdo que sufrió tanto cuando el año pasado se le echó a perder su cámara, la negra como le decía. Creo que toda la cantidad de gente que llegó a recibirlo hoy (ayer) demuestra la cantidad amigos que tenía, amistades que él forjó en esta ciudad", comentó.

El alcalde de Chillán, Sergio Zarzar, quien también estuvo presente en el velorio, aseguró que "más que un colega se nos va un amigo. Lo voy a recordar con gran cariño, como una gran persona. Más de una vez tuvimos la oportunidad de conversar largamente, por lo tanto aprendí a conocerlo y a quererlo", dijo el edil.

Instituciones amigas

A la llegada del féretro de Don Héctor a Chillán, una escolta de Carabineros acompañó el trayecto del fallecido fotógrafo. El Capitán Cristian Morales, quien era uno de sus más cercanos, aseguró que la perdida es irreparable y que el recuerdo siempre será el de un hombre responsable y humilde.

"La verdad que cuando supimos la noticia afectó a muchos, ninguno quedó indiferente. Nosotros le decíamos el acreditado (ríe), porque él tenía pase libre para cualquier cuartel de Carabineros en la provincia. Lo queríamos harto", dijo visiblemente emocionado el Capitán y agregó: "Él era mi amigo, amigo de Carabineros, de la gente de prensa él era el más leal que hemos tenido".

Durante la tarde un grupo de Bomberos, encabezado por el superintendente José Luis Valderrama, también llegó a despedir a Héctor. Completamente uniformados, cuatro bomberos hicieron guardia en la capilla El Sagrario, como una forma de demostrar el cariño que existía por parte de la institución.

"Él siempre trabajando, siempre a la siga de los incendios, de la noticia, apasionado por la fotografía. Además ahora un hijo suyo es miembro de la quinta compañía de Bomberos, lo que para él era un orgullo. Siempre tenía una palabra amable, una palabra de aliento", señaló Valderrama, y agregó: "Lo perdimos, nuestra institución perdió a esa persona que nos apoyaba en todo".

Su hija Claudia contó además que a pesar de que su pasión era la fotografía, a Héctor le gustaba también la vida sencilla, simple, poder descansar en una playa, leyendo un libro tal vez, o comiendo algo rico, "una cosa poca", como decía siempre. "Mi papá también era fanático de la pesca, medallero de pesca. Era amante de la buena música, le gustaba mucho bailar, siempre riendo, siempre feliz", recordó Claudia.

Su cuerpo estuvo hasta las 20 horas de ayer en Chillán y posteriormente fue trasladado hasta Tomé donde será velado hoy en la capilla Bellavista de la misma comuna. Sus funerales se realizarán hoy en la tarde, para luego dirigirse al cementerio número dos. Don Héctor, buen viaje, un abrazo al cielo.

años tenía el reportero gráfico Héctor Barriga. Su última pauta fue el miércoles 1 de febrero en Portezuelo, en la visita de Bachelet. 63

años llevaba trabajando en el diario Crónica Chillán lugar donde forjó no solo relaciones de trabajo, sino que también de amistad. 8