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Contra las estadísticas, pero con las ganas de dar la sorpresa en el clásico

ÑUBLENSE. Esta tarde desde las 20.30 horas los Rojos visitan a un encumbrado Curicó. Jugadores aseguran que es un duelo que no pueden perder y que hay que dejar el corazón en la cancha.
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Las estadísticas juegan en su contra, también el momento futbolístico, pero los jugadores de Ñublense saben que el partido de hoy es un clásico y como tal es de pronóstico reservado.

Desde las 20.30 horas de esta tarde, los Diablos Rojos serán forasteros frente a Curicó, elenco que llega como el súper líder de la Primera B, invicto y con serias posibilidades de ascender a la Primera División.

La historia indica que la rivalidad entre ambas escuadras tuvo su punto de inflexión en el 2004 cuando luchaban por el ascenso de Tercera a Segunda División, objetivo que quedó en manos de los chillanejos gracias a una final que ganó por 2 a 0, pero que estuvo condimentada por un agónico gol de Wladimir Herrera en un partido previo y que obligó a un choque extra tras el triunfo Rojo por 2 a 1.

De aquella epopeya diabla pasó más de una década, pero el recuerdo está fresco, al igual que cada encuentro en el cual se han visto las caras por la Primera B, e incluso la Primera A, siempre compartiendo momentos deportivos similares.

Lo más fresco en la memoria colectiva es el último triunfo de Curicó en La Granja por un humillante 6 a 0, sin embargo, hoy es el día de la venganza deportiva para los chillanejos, aunque tienen claro que el rival tiene muy pocos puntos débiles. "Todo pasa por la confianza y es por eso que a ellos les sale todo, pero todo equipo tiene una debilidad y estamos trabajando para encontrarla", expresó el portero Sebastián Contreras.

El último encuentro entre Diablos y Curicanos se disputó en Chillán con triunfo para los forasteros por 2 a 0, actuación que Contreras espera revertir ya que los Rojos tienen más argumentos que en aquella ocasión. "Con las incorporaciones nos potenciamos más, ahora ya sabemos su forma de jugar, conocemos a sus jugadores y esa es una ventaja para nosotros, esperamos jugar con el corazón y quedarnos con el clásico".

Curicó celebra su semana aniversario y el plato fuerte de los festejos es el partido de hoy y el técnico de Ñublense Pablo Abraham espera aguarle la fiesta. Para ello elaboró las estrategias para aprovechar los instantes de ventaja que anticipa no serán pocos ante el líder. "Más que un punto débil, todos tenemos buenos y malos momentos dentro del mismo partido, me parece que ellos aprovechan muy bien sus buenos momentos y cuando tienen una baja no les están convirtiendo, por lo tanto, si nosotros aprovechamos nuestro buen momento le podemos hacer daño y eso sería muy bueno".

"Es un equipo muy práctico, saben lo que quieren, tienen jugadores de mucha jerarquía, varios de ellos tienen muchos ascensos, nosotros tenemos que tratar de equilibrar lo que ellos están haciendo y eso sería un crecimiento muy importante", agregó.

Quien también anticipa el encuentro es el lateral por izquierda Matías Améstica, quien expresó: "es un bonito partido y vamos con la seguridad de que les vamos a ganar, es bonito saber que si les ganamos les podemos cortar una racha de 18 partidos invictos. Vamos a ir a jugar con todo".

El volante colombiano Stiven Rivera agregó que "como en todos los clásicos esperamos seguir luchando y metiendo para traernos los tres puntos".

El capitán de los Diablos, José Rojas, concluyó que "será un lindo partido, es el clásico rival, ellos vienen muy bien, pero nosotros queremos ganarlo. Ganarle a Curicó que lleva un campeonato perfecto sería muy bueno".

Gaspar Páez agregó que "en el papel es un partido que no se puede perder, la gente no quiere que lo perdamos; nosotros tampoco lo queremos perder".

Para el duelo la única duda que tiene Pablo Abraham es la presencia de Lucas Triviño por una dolencia en su tobillo, aunque todo indica que el delantero irá desde el arranque.

La carta de reemplazo sería Felipe Albornoz, quien anticipó: "Lo que tengo que hacer es encarar".

Todo parece estar en contra de Ñublense, pero es en estos momentos en los cuales debe aflorar el aspecto emotivo y tal como dijo el delantero Gaspar Páez, "tenemos que jugar con el corazón".

Tras los 90 minutos de juego se podrá analizar qué tanto corazón puso Ñublense en la cancha.

Marcador 6-0

Que favoreció a Curicó sobre Ñublense la última vez que se vieron las caras en el estadio La Granja. 2-0