Carolina Collins/EFE
Pese a que hace dos años rechazó encarnar a Cenicienta en su versión con actores reales, la actriz Emma Watson finalmente terminó convirtiéndose en princesa, al protagonizar "La bella y la bestia", que se estrenará el 30 de marzo.
Y puede ser que lo que la haya hecho asumir el desafío, es que confiesa que se "identifica mucho" con Bella, que se caracteriza por su independencia.
Princesa poderosa
El proyecto dirigido por Bill Condon, responsable de las dos últimas partes de la saga "Twilight", era diferente, porque según reveló la propia actriz a EFE, había algo del personaje que "realmente" la llamaba.
"Si consigo parecerme un poco más a ella es que algo estoy haciendo bien", dijo la británica que alcanzó la fama con sólo nueve años como Hermione Granger en "Harry Potter". Hoy, con 26 años, es embajadora de buena voluntad de ONU mujeres y por lo mismo, fue escogida para dar vida a una versión del siglo XXI de la primera princesa de Disney cuyo objetivo final no era encontrar el amor.
Distinta a la animada
Basada en el cuento de hadas del mismo nombre de la francesa Jeanne-Marie Leprince de Beaumont, la película reversiona al clásico de Disney de 1991, que ese año se convirtió en la primera cinta animada de la historia en ser nominada al Oscar a la mejor película, ya que hasta entonces no existía la categoría que hoy premia a ese tipo de producciones.
Watson considera que la nueva película va dirigida a un público "adulto" que quiere volver a sentirse "como un niño" y adelantó que la cinta -40 minutos más larga que la animada- incluye algunas novedades respecto a su antecesora.
Así, además de las inolvidables canciones de la película animada como "Be our guest" o "Something There", incluye tres nuevos temas inéditos del compositor Alan Menken, responsable también de la banda sonora del filme original -por la que ganó un premio Oscar- así como la de otros clásicos de Disney como "La Sirenita", "Pocahontas" y "Aladdin".
Y a diferencia de la película animada, esta "ahonda mucho más en la vida pasada de Bella en su pequeño pueblo y de Bestia en el castillo", según adelanta la misma actriz.
Alta tecnología
En esta versión el actor británico Dan Stevens ("Downton Abbey") da vida a la Bestia, con ayuda de la tecnología de captura del movimiento, que también fue usada para otros personajes, como Lumière (Ewan McGregor), Ding Dong (Ian McKellen) y Mrs. Potts (Emma Thompson).
Gracias a esta avanzada técnica, Stevens actuaba con un traje especial que después permitió a los productores convertirlo en Bestia de manera digital.
El actor, de 34 años, aseguró a Efe que esta tecnología nunca se había utilizado para una película "de amor de estas características" y manifestó que sí se reconoce a sí mismo en el rostro de la bestia porque es "muy detallado". "Es mágico lo que han conseguido", agregó.
Stevens contó que para él el mensaje principal que tiene la película, que considera "un cuento de hadas apto para todas las generaciones", es "el poder que tiene el amor de transformar a las personas".