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Hace 3 años | 19 de marzo de 2014

Gobierno forzó renuncia de gobernador de Ñuble

Luego de los duros cuestionamientos

recibidos desde el primer día en que Cristian Fernández fue designado como gobernador de Ñuble, finalmente ayer y tras una semana en el cargo luego de su nombramiento, la Presidenta Michelle Bachelet aceleró la salida de la autoridad, quien fuera ex alcalde de San Fabián de Alico.

Hace 2 años | 19 de marzo de 2015

Padres exigen acelerar las legalización de 'Cannabis'

Póngase en mis zapatos, es el slogan de la campaña de la Asociación de padres cultivadores, cuyos hijos padecen de epilepsia reflectaria, y que requieren del aceite que se extrae de la marihuana o cannabis sativa, para detener la enfermedad. Sus testimonios llegaron ayer a la gobernación, donde se entregó una carta a las autoridades.

Hace 1 año | 19 de marzo de 2016

Advierten presencia de magma cerca del cráter

Sernageomin emitió un informe especial del estado del Complejo Volcánico Nevados de Chillán que se mantiene bajo alerta amarilla, donde restringe todo el acceso a la cima. Jefe de la Red de Vigilancia Volcánica: "la posibilidad de erupción está más cerca, pero no se justifica cambiar alerta".

Francisco, cuatro años

Es probable que, como lo dijo el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, algunos empresarios "se subieran por el chorro", pero igual de impresentable es que el marco legal haya empeorado las cosas. Francisco tomó las riendas de esta institución y señaló, una vez elegido, la necesidad de ciertas reformas.
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Durante la semana, el día lunes 13 de marzo, el Papa Francisco cumplió 4 años de pontificado. Fueron muchos los que miraron sorprendidos cómo el cardenal argentino Mario Bergoglio era presentado al mundo como el sucesor de Pedro, llamaba la atención su origen, su estilo y hasta su nombre. Aquí en Chile casi como un chiste algunos decían:…"no, argentino, no; tienen a Maradona y ahora al Papa".

Francisco tomó las riendas de esta institución y señaló, una vez elegido, la necesidad de ciertas reformas en una Iglesia que se había ido encerrando en el Vaticano, con una estructura muy compleja y poco transparente en sus cuentas. Comenzó entonces una gran tarea, una verdadera "revolución" señalan algunos; el Papa debía promover cambios no exentos de polémica, tanto dentro como fuera de la curia.

En estos cuatro años, se han llevado a cabo una serie de reformas como por ejemplo la creación de un Consejo Pontificio de la Comunicación o una Secretaría de Economía que busca dar total transparencia al Banco Vaticano.

También Francisco se ha manifestado implacable, así como su antecesor, contra la pederastia en la Iglesia y la ha abordado como una realidad dura, vergonzosa, desgarradora pero cierta. Ha llamado a los cardenales, obispos y clérigos en general a ser menos príncipes y más pastores, a vivir sencillamente, a "tener olor a ovejas".

Por otra parte se ha facilitado y descentrado las causas de nulidad matrimonial y posterior al Año de la Misericordia, se ha conferido a los sacerdotes la posibilidad de que puedan absolver a las mujeres que hayan cometido el pecado del aborto y se encuentren francamente arrepentidas.

El Papa también siguiendo el pulso del tiempo nos ha maravillado con la exhortación apostólica "Amorislaetitia" que contiene las ideas trabajadas en el sínodo sobre la familia y allí nos interpela y manifiesta entre otras cosas que "..la Iglesia mira a las familias que permanecen fieles a las enseñanzas del evangelio, agradeciéndoles el testimonio que dan".

Seguramente habrán detractores de Francisco y personas que esperan aún muchos cambios más. También hay quienes miramos nuestra iglesia con esperanza y confiamos en que a pesar de la humanidad de quienes formamos parte de ella, seamos capaces de seguir caminando de la mano de Cristo.

Francisco es nuestro Santo Padre, es nuestro Papa latinoamericano.

Paulina Benavente Vargas Psicóloga, Obispado de Chillán

Nueva Ley de estacionamientos

El Congreso busca hoy un nuevo marco legal, síntoma inequívoco del enorme error cometido en prever una situación advertida.
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La ingenuidad parece haber sido el estado de ánimo de los parlamentarios que aprobaron la cuestionada Ley de Estacionamientos. Como ha sido conocido, las quejas con el cuerpo legal se vinculan al aumento en los precios que estos recintos aplicaron y que en algunos casos incluso superaron el 100%.

A casi un mes de la puesta en marcha, el presente raya en la molestia y la incredulidad. Por lo pronto, el Servicio Nacional del Consumidor, junto al Ministerio de Economía, anunciaron la presentación de 64 denuncias contra las proveedoras que no respondieron los oficios enviados por el ente fiscalizador. Además, debido a los incumplimientos de la nueva normativa que rige este tipo de servicio, se enviarán los antecedentes correspondientes a la Fiscalía Nacional Económica para que investigue el caso.

El gobierno ha dicho que la ley establecía que los estacionamientos concesionados no tenían que ajustar su modo de cobro, con motivo de la implementación de la ley.

Sin embargo, esto parece tan ingenuo, como absurdo. Las reglas efectivamente cambiaron para los operadores que vieron aumentados sus costos potenciales, riesgo que cualquier negocio traduce en reajuste de precios. Esto es básico en una economía de mercado como la nuestra; es decir, si el negocio es más complejo, el privado no reducirá sus utilidades, sino que tomará las providencias para cautelar que la posibilidad de riesgos esté bien cubierta. Esto nos sirve de ejemplo para explicitar la ingenuidad con que muchas veces las autoridades asumen el imperio de la ley. No se trata de ligar con esto con el viejo adagio: "hecha la ley, hecha la trampa", sino entender que la realidad siempre estará por sobre la aspiración del legislador.

Es probable que, como lo dijo el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, algunos empresarios "se subieran por el chorro", pero igual de impresentable es que el marco legal haya empeorado las cosas.

¿Síntoma del nivel de la clase política actual? Más de alguno pensará aquello, pero por sobre todo, sorprende la falta de oficio y la mínima capacidad de advertir escenarios que eran previsibles en medio de la discusión.