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Vecinos están complicados por fallas que presenta el relleno sanitario

CHILLÁN VIEJO. Comité ambiental de Llollinco revisó los cargos hechos por la Superintendencia de Medio Ambiente y esperan que autoridades se reúnan con la comunidad para entregar los alcances de las infracciones detectadas.
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Ingrid Acuña Caballero

Como preocupante fue tildada por la comunidad cercana al relleno sanitario e industrial, la información que aparece consignada en el expediente abrió la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) a raíz de las fallas detectadas al interior de este centro de acopio que está en manos de la empresa Ecobio.

La noticia, que fue entregada en detalle por Crónica Chillán, fue el modo de como los vecinos se enteraron de los hechos que se establecen como infracciones y que ocurrieron dentro del relleno que se ubica en la localidad de Llollinco, perteneciente a la comuna de Chillán Viejo.

En la carpeta en la cual se formulan los cargos, aparecen informes de fiscalización que indican la presencia de metales que estarían con altos índices de concentración en las aguas subterráneas, por lo que deducen que los pozos del sector estarían en iguales condiciones.

"Cuantas veces dijimos que estaba pasando este tipo de cosas, son años entregando antecedentes o haciendo denuncias sobre derrames o que las napas están contaminadas. Nunca nos escuchaban, porque pensaban que como uno vive en un sector rural no sabe de lo que habla. Este informe nos da la razón y creo que viene a decir que deben escuchar lo que decimos porque nosotros sabemos lo que pasa porque vive en el centro del problema, a metros de esta montaña de basura y suciedad", reclamó Lilian Sandoval, presidenta del comité ambiental de Llollinco.

Es así como en la página 9 del expediente, detalla que en las inspecciones hechas al plan monitoreo de aguas subterráneas, que fue establecido para el proyecto, se observaron omisiones en el control de algunos metales o que en otros casos la superación, al límite que indica la norma, tenían registros gigantescos, tal como sucedió en el 2014, 2015 y 2016.

"Ojalá que esto sirva para que sigan fiscalizando, porque uno presenta reclamos y no son tomados en cuenta y nosotros merecemos vivir en una ambiente libre de contaminación, como todo el mundo. Esperamos que esto sea una ayuda para controlar que las cosa se hagan bien", dijo Luis Bastías, vecino que vive a metros del relleno sanitario.

Más fiscalización

Con los datos que aporta la SMA, los vecinos del sector piden que se sume a este informe, monitoreos de aguas de laboratorios externos a la empresa, tal como sucedió en el 2014 cuando el colegio médico tomó muestras de aguas en pozos cercanos al relleno, las que revelaron alta concentración en arsénico y manganeso, metal que se encuentra sobrepasado en los registros que se presentan en el expediente de formulación de cargos.

"Sé qué hace años que se investiga a la empresa y la gente nos dice que como dirigentes no hacemos nada, pero qué podemos hacer si no disponemos de recursos y si ellos están haciendo esas pesquisas deberían aparecer todo lo que hay en el interior del relleno. Hay preocupación de lo que puede suceder, aunque la angustia más grande es por las aguas que tenemos, ya que no queremos a que se nos contamine. Nosotros confiamos en la Seremi de Salud y si ellos dicen que los resultados están buenos, debemos quedarnos con eso, aunque ahora ya no hay tanta seguridad", confirmó Clara Bastías, dirigenta de la junta de vecinos y del comité ambiental de Llollinco.

Si bien el comité medioambiental se reunió ayer en la tarde, la idea de los dirigentes es que la autoridad a cargo del tema realice una asamblea en la que se explique lo que significa el expediente que abrió la SMA.

"Es bueno que se realicen estas fiscalizaciones, porque acá nos dicen que está todo bien y nos quedamos con eso. Sería bueno que viniera gente del ministerio de salud o medioambiente a informarnos lo que está sucediendo", solicitó Nelson Zapata, quien ha vivido toda su vida en Llollinco.

La deficiencia en el manejo de los líquidos lixiviados, donde se observó ductos en mal estado o trasvasije de éstos en zonas húmedas, expuestas a derrames y pérdidas en suelo sin impermeabilización, además de encontrar líquidos en los alrededores de los estanques de acumulación, son las irregularidades que molesta a los vecinos y las que, a juicio de ellos, dan pie para solicitar la clausurar el relleno.

"Somos una provincia, futura región, cuya característica principal es su vocación y aptitud agrícola, ganadera y forestal, en donde actualmente ganan terreno los frutales. ¿Qué hace aquí un relleno industrial, cómo se llegó a esto, cómo hubo tan poca visión de futuro de las autoridades de la época, por qué hay déficit de fiscalizaciones a una actividad peligrosa que sabemos pone en riesgo la salud de los habitantes de la comuna, especialmente de sus habitantes rurales? La gente de Chillán no está consciente de lo que sucede en su patio. Le preocupa sólo la contaminación invernal generada por la combustión de leña, pero como no ve los rellenos industrial y sanitario, es como si no existieran. Ojos que no ven, corazón que no siente", se cuestionó Ulises Lari, quien vive en Quilmo Bajo sector que también está cercano al relleno.

En observación

De los cargos que formuló, la semana pasada la SMA, cuatro de ellos son considerados graves, los cuales ameritan sanciones que van desde la clausura del relleno, la revocación de la Resolución de Calificación Ambiental, hasta multas superiores a los dos mil millones de pesos. Una de ellas es contar con instalaciones para secado de lodos no autorizados, o el no informar a las autoridades cuando tienen emergencias, tal como sucedió el amago de incendio el 12 de septiembre de 2016 en el relleno industrial.

"Están los antecedentes que permiten la formulación de cargo, pero no me voy a pronunciar acerca de qué me parecen. Vamos a esperar los descargos de la empresa o si ingresa un programa de cumplimiento y esperamos, por lo rápido de la acción, que ingrese el programa de cumplimiento y si no es así, tenemos los antecedentes fundados en los sectores revisados por la SMA, para proceder con las sanciones que corresponda", sostuvo el seremi de Medio Ambiente, Richard Vargas.

La empresa, que fue notificada el viernes pasado en Concepción, dispone de 10 días hábiles para ingresar un programa de cumplimiento y 15 días hábiles para formular sus descargos.

"Vamos a esperar cuál es la respuesta de la empresa a este respecto y esperamos por el bien de los vecinos de la comunidad de Chillán Viejo, que los problemas sean subsanados a la brevedad posible. Primero tenemos la constatación real que ahí habían dificultades y que las quejas de los vecinos eran fundadas y eso es lo que ha constatado en el expediente sancionatorio abierto por la SMA", subrayó el secretario regional del ramo.

"¿Por qué hay déficit de fiscalizaciones a una actividad peligrosa que sabemos pone en riesgo la salud de los habitantes de la comuna, especialmente de sus habitantes rurales? La gente de Chillán no está consciente de lo que sucede en su patio".

Ulises Lari, vecino de Quilmo Bajo"

Aguas contaminadas

Para el alcalde de Chillán Viejo Felipe Aylwin, el informe corrobora que las aguas subterráneas estarían contaminadas. "Cuando hicimos el estudio de las aguas, fue a un kilómetro del relleno, estamos hablando que es lo suficientemente lejos para que esa agua no esté contaminada. Esas aguas se vierten río abajo y van a parar a Bulnes y el Quillay, y muchas de las hortalizas que se riegan con esas aguas, llegan al mercado. El relleno ha vertido parte de sus productos a las napas subterráneas, razón por la cual no sabemos cuán complejo es para el medioambiente, y cuanto impacto ha tenido eso".