Secciones

El insospechado "potencial" minero de la futura región

ÑUBLE. La provincia registra la mayor tasa de exploración a nivel regional en minerales como oro, cuarzo, sílice y "tierras raras", con alta demanda en la nanotecnología, drones, telefonía y la aplicación de energías limpias.
E-mail Compartir

Marcelo Arroyo L.

La creación del primer celular chileno es un ejemplo de la capacidad de desarrollo tecnológico que puede adquirir el país y cuyo umbral podría variar al incorporar el equipamiento interno de ese dispositivo producido con elementos que podrían surgir de las llamadas "tierras raras", en las que hay un interés creciente en la región y, principalmente en la futura región de Ñuble, que en la actualidad concentra la mayor cantidad de exploraciones en el Biobío.

Así lo ratifican cifras del Sernageomin y un estudio elaborado por la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), en la que se ratifica a la octava región con la mayor cantidad de áreas de concesiones de exploración en la zona sur a marzo de 2015 con 288.100 hectáreas para prospección.

De acuerdo a cifras de Sernageomin y la Seremi de Minería, en Ñuble se registran 192 exploraciones constituidas en la provincia, mientras que en trámite llegan a 517. Por su parte, en concesiones de explotación hay un total de 164 constituidas y en trámite llegan a 94 solicitudes.

En cuanto al desglose por comunas, Coihueco es la que registra la mayor cantidad de exploraciones constituidos (51) seguida de San Fabián (42) y Yungay (35).

Sin embargo, es Coelemu la comuna con mayor cantidad de exploraciones en trámite (134). Le siguen de cerca Trehuaco (84), además de Ninhue (70), Ránquil (63) y Quillón (52), todas ellas emplazadas en el Valle del Itata.

A la inversa, las comunas con menor perfil minero son Chillán, Chillán Viejo, El Carmen, Ñiquén, San Nicolás, Quirihue y San Carlos.

Potencial minero

Si centenariamente las actividades de explotación de la minería se concentraron en la zona norte, las nuevas exploraciones registradas en la zona centro sur del país durante el último quinquenio podrían, en un futuro cercano, cambiar el panorama del sector.

"El crecimiento hacia el sur que ha experimentado la producción del principal producto minero de Chile permite preguntarse sobre el desarrollo de recursos y reservas hacia las regiones entre Maule y Magallanes, lo que significarían una palanca para el desarrollo local y regional, con características distintas al cómo se realiza la explotación y exploración de minerales en la zona norte del país", señala en el informe Jorge Cantallopts Araya, director de Estudios y Políticas Públicas de Cochilco.

Un cambio que también se aprecia al interior de la actual región del Biobío, que variaría de los históricos yacimientos de carbón en Lota y Coronel, a la primera planta de lantánidos en los cerros de Penco. Incluso, proyección que podría extenderse en el mediano plazo al secano interior de Ñuble.

"El carbón fue hasta hace 25 años parte de la historia minera de la región y ahora hay otros recursos disponibles con la posibilidad de ser explotados por parte del sector privado", sostuvo el seremi de Minería, Lautaro Benítez.

Una de esas concesiones se ubica precisamente en la comuna de Trehuaco, a 94 kms al poniente de Chillán, en el Valle del Itata, con 60.100 hectáreas, y cuyo titular de exploración está a cargo de Daniel Eyzaguirre, según los antecedentes de Cochilco.

Uso promisorio

La investigadora del Departamento de Ciencias de la Tierra de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad de Concepción, Dra. Verónica Oliveros Clavijo, explicó que en el caso de la comuna de Trehuaco las exploraciones corresponderían a prospectos mineros.

"En zona indicada corresponderían a rocas graníticas (granitos) y algunos depósitos de arcilla asociados a la meteorización de esos granitos, es decir, interperismo, proceso de degradación de una roca por acción del ambiente (agua, vegetación, temperatura) para dar origen al suelo, el cual se compone en una alta proporción de minerales llamados arcillas", precisó la académica.

Al respecto, el Seremi de Minería indicó que se trataría de exploraciones de cuarzo, arenas ferrosas y oro, entre otros minerales que comprenden la zona norponiente de Ñuble.

Nanotecnología

Para la Doctora en Ciencias, Verónica Oliveros indicó que en general los metales que se buscan en esas áreas son la denominadas "tierras raras", que corresponden a elementos químicos del grupo de los lantánidos y tienen hoy un uso promisorio en áreas demandantes.

"Las tierras raras son importantes, pues se utilizan mucho para materiales de alta tecnología y en la aplicación de energías limpias. Están catalogados como elementos críticos por su importancia económica y tecnológica", explicó la docente de la UdeC.

Según indicó el Seremi de Minería, los lantáridos (tierras raras) están compuestas por cerca de 17 elementos que han permitido la miniaturización de los magnetos y el desarrollo de la "nanotecnología".

"En un iphone se pueden encontrar desde 9 magnetos. Por eso su importancia en las tecnologías de la información, la industria aeroespacial, e incluso, en el armamento bélico", señaló en cuanto a sus potenciales usos que también se extienden a turbinas eólicas, vehículos híbridos, drones, dispositivos para identificar billetes falsos y fibra óptica, la misma que trasmite internet a alta velocidad o las señales HD de la televisión por cable.

Medioambiente

"El establecimiento de la industria de tierras raras, otorgaría a Chile la oportunidad de diversificar su oferta de exportación, posicionarlo como un mercado competitivo dentro de este mercado y atraer nuevas innovaciones e inversión efectiva", sostuvo la ministra de Minería, Aurora Williams al conocer el proyecto penquista.

El desarrollo de esta industria a nivel nacional ha estado asociado 100% a I+D, pero deben ir de la mano con el respeto al medioambiente.

"No hay ninguna iniciativa de este tipo en la región que hoy no sea sometida a un estudio de impacto ambiental, sea por declaración o estudio", afirmó el Seremi de Minería.

"El carbón fue hasta hace 25 años parte de la historia minera de la región y ahora hay otros recursos disponibles con la posibilidad de ser explotados por parte del sector privado".

Lautaro Benítez, Seremi de Minería"

Un nuevo impulso económico

El desarrollo de la minería, por ejemplo con la industria de lantánidos, generaría un impulso incalculable para la nueva región de Ñuble. "Se convertiría en una potencia en la medida que cada uno de estos proyectos sean sometidos a evaluación de impacto ambiental", dijo Seremi de Minería. Benítez agregó que el Biobío tiene el desafío de desarrollar una minería a menor escala, más moderna y sustentable, considerando que en 2015, el sector aportó 16 mil puestos de trabajo en la región. Por eso, el Gore Biobío y la Enami establecieron un acuerdo para Desarrollo de Minería Metálica y No Metálica en la Región del Biobío", que permitirá realizar estudios de prospección para detectar minerales.