Flor Arbulú
"No me deja de impactar que sea en el Teatro Colón la celebración más importante de los cien años de Violeta", reconoció este pasado miércoles Javiera Parra, horas antes del concierto sinfónico que se realizó en el recinto bonaerense, uno de los más relevantes de América Latina.
Un imponente escenario que la gran mayoría de los artistas chilenos y argentinos que se dieron cita para interpretar una selección de temas de la cantautora, sólo soñaban con visitar.
Presidenta fue ovacionada
La puesta en escena fue un lujo, del que pocas veces se puede ser testigo. Incluso, la Presidenta Michelle Bachelet, que recibió una ovación de parte de los asistentes al teatro, fue la que encabezó el recital. Acompañados por la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires, bajo la dirección de Guillermo Rifo, Beto Cuevas, Camila Moreno, Gepe, Patricio Manns, Roberto Márquez de Illapu, Soledad Pastorutti, Kevin Johansen, Sandra Mihanovich y Los Tekis, por nombrar algunos, rindieron tributo a la arista.
El magno concierto comenzó con una semblanza poética realizada por el actor chileno Patricio Contreras, de larga trayectoria en Argentina, cuya intervención finalizó con un "gracias a la vida por Violeta Parra". El cierre, en tanto, unió sobre el escenario a los artistas chilenos y trasandinos participantes, que interpretaron "Gracias a la vida" en formato sinfónico.
Fue, tal como había adelantado Ángel Parra, "una maravilla, una sucesión de momentos históricos en la música y que efectivamente los 100 años no van a ser olvidados fácilmente".
Un ángel Presente
El espectáculo, que se dividió en tres partes, dos sinfónicas y una folclórica acústica, demoró entre dos y tres años en prepararse, comenzando todo con una visita que hizo Ángel Parra Orrego al recinto y quien asumió la dirección artística del evento. "La verdad es que como director partí como tímido, como un poco buscando el camino, y me di cuenta que la gente está al servicio de Violeta Parra y eso es lo que hicimos: cantar en forma humilde, sin vanidad, porque la Violeta nos obliga a desenmascararnos y hacer de su música lo que es: la pureza máxima y la honestidad", comentó.
En la conferencia de prensa que ofreció a la prensa chilena y argentina junto a su hermana Javiera, el embajador de Chile en Argentina, José Antonio Viera- Gallo, el ministro de Cultura, Ernesto Ottone, y algunos de los artistas participantes, Ángel recordó parte del proceso que se llevó a cabo y destacó la importancia de su padre, quien falleció en marzo pasado.
Es así como contó que fue éste quien le entregó hace muchos años las partituras de los arreglos sinfónicos que hizo el maestro Guillermo Rifo de las composiciones de la maestra.
"Me impresioné mucho, me emocioné mucho al escuchar la ternura, la sinceridad y la humildad con que un maestro que viene del mundo docto, pero también del popular, toma las canciones de Violeta Parra y las transforma en algo majestuoso, utilizando el sonido de la orquesta en todo su esplendor y respetando las letras, las métricas y lo difícil que debe haber sido eso... creo que Guillermo Rifo lo cumplió con una ternura, como digo, que hace que finalmente este sinfónico llegue a puerto con el mejor equipo".
Otro de los aspectos que destacó fue conseguir juntar a Argentina y Chile "en torno a un homenaje complicado", detallando que lo fue por "juntar las voces en cada canción y hacerlos cantar juntos". Al respecto, Beto Cuevas confesó las dificultades que tuvo para interpretar "Santiago penando estás" y las horas de ensayo que le significó.
Por otra parte, Ángel Parra comentó que "como director artístico me siento agradecido y privilegiado de todos estos estamentos que tienen que ver con la gente que financió e hizo posible esto. También con un amor de una cadena de personas, en las cuales mi padre estaba involucrado también; y al no estar él hoy día presente son muchas las emociones que se juntan", aunque siente que Ángel Cereceda Parra estará "ayudándonos a organizar este tremendo cumpleaños".
Reconocimiento
"Yo siento que el pueblo argentino tiene una cercanía con la obra de Violeta", comentó también Ángel.
La artista se radicó por algunos meses en la ciudad pampina de General Pico y luego en Buenos Aires, donde hasta alcanzó a grabar un disco. "Por lo tanto, también es un reconocimiento a un país que acogió a Violeta. De hecho, en sus cartas sale mencionado varias veces el cariño que le tenía al pueblo argentino y el recibimiento que tuvo, que siempre era en momentos de crisis", cerró Ernesto Ottone.
"Sin duda, es una de (las actividades) más significativas. No solamente porque ha significado un nivel de preparación y de producción muy grande, sino porque también se llegó a uno de los escenarios más importantes del Cono Sur"
Ernesto Ottone, Ministro de Cultura"