La ausencia de Sebastián Varas en el equipo titular fue una sorpresa en el duelo ante Copiapó.

En Chillán se conoce de la capacidad del delantero, sin embargo, los nueves meses que estuvo fuera de la cancha producto de una lesión en Everton mermaron su capacidad física, según reconoce el mismo Varas, quien tras el choque con los nortinos realizó un profundo análisis de su actual momento en el Rojo. "Me estoy sintiendo mejor, pero lamentablemente vengo de nueve meses sin jugar, entonces me está pasando la cuenta. Siempre he sido autocrítico, hay detalles, por ejemplo giros en los cuales estoy más lento que el resto, a veces me siento muy frustrado, también en algunos días cuando estoy entrenando y eso lo tengo que saber manejar; tanto tiempo afuera estoy como metido en un hoyo y lo ideal es tratar de salir lo antes posible, tengo la capacidad y soy el único que puede sacar la situación adelante", dijo quien apenas entró en el segundo tiempo marcó diferencias con su sola presencia en el área rival, generándose la ocasión más clara del complemento a través de un cabezazo.

"Me voy frustrado y caliente, pero esto se saca adelante con trabajo, el equipo me necesita, mis compañeros me lo han dicho, quieren que esté al cien por ciento, así que me tengo que preparar para ello. Quiero estar a la altura de mis compañeros para poder darles una mano", expresó con sentimiento.

Sobre su proceso de entrenamiento reveló que "cuando todos terminan de entrenar me quedo corriendo, estoy poniendo de mi parte, pero hay veces que las cosas se dan y en otros no".

"Volver acá es lo mejor que me pudo haber pasado, es mi casa, pero me siento con la obligación de volver todo eso cariño y eso me frustra", remató el segundo goleador histórico de Ñublense.

Ñublense quedó al debe en el estreno y sumó un pobre empate a cero ante Copiapó en Chillán.

Los dirigidos por Emiliano Astorga dejaron una grata impresión en los partidos por Copa Chile, performance que anticipa un inicio ganador en el torneo de la Primera B, pero una serie de bajas y una presentación futbolística limitada, impidió que los chillanejos se retiraran entre aplausos.

Los chillanejos comenzaron con la ambición de instalarse en campo contrario y fue así como antes de los ocho minutos tuvo una clara ocasión de gol Camilo Ponce, tras pase de José Loncón, el mismo que después entró destapado por el sector izquierdo y no pudo convertir tras lanzarle el balón a las manos al portero.

De ahí en adelante el juego cayó en un constante desorden, pelotazos y lagunas de dominio de uno u otro equipo, es decir, un duelo similar al del torneo pasado cuando la falta de experiencia le pasó la cuenta a los Rojos. Quizás la última jugada clara en favor de los Diablos en el primer tiempo fue un error defensivo que casi transforma en gol Vicente Gatica.

En contraparte Copiapó tampoco ofreció mucho y si bien su técnico indicó que hicieron ver mal a Ñublense, dicha apreciación resta mucho de la realidad, ya que los del norte intentaron, pero nunca estuvieron cerca del triunfo.

En el segundo tiempo el duelo no cambió en demasía y un largo lapso de imprecisión y aparente nerviosismo se apoderó de los jugadores.

Sin embargo, Ñublense tuvo a lo menos tres opciones certeras en los pies de Camilo Ponce, quien ingresó por el sector derecho y le pegó fuerte y abajo generando la reacción del arquero, más la de Sebastián Varas, quien entró en el segundo tiempo y casi convierte de cabeza tras centro de Sebastián Páez.

No se acaba el mundo porque Ñublense no haya jugada bien y no le haya ganado a un rival abordable, así es el fútbol, pero las expectativas sobre el plantel superaron a la realidad y quizás una de las explicaciones en el día de ayer pasa por la ausencia de tres jugadores claves que llegaron para ser refuerzos: el lateral por derecha René Bugueño, el central Hugo Bascuñán y el volante de salida Matías Arrúa, quien sufrió un esguince el viernes, lo cual lo marginó del once ideal. Son estos los jugadores llamados a marcar la diferencia cuando estén en condiciones de jugar.

Tema aparte es la falta de finiquito, ya que si bien en Ñublense no abundaron las ocasiones de gol, hubo algunas claras que deberían haber terminado en el fondo del arco, lo cual le impide a Ñublense celebrar una anotación hace ya tres fechas, considerando los choques de Copa Chile.

"Si hubiésemos convertido una de las dos ocasiones estaríamos hablando de otra manera, pero el fútbol es así", dijo el técnico Emiliano Astorga, quien reconoce que no se aprovecharon las oportunidades en el arco rival.

Sobre el resultado el volante Luciano Gaete expresó que "fue un punto malo jugando de local, nos tenemos que hacer fuertes de local".

El portero Sebastián Contreras aportó que "obviamente es un punto negativo, la expectativa era sumar de a tres, pero no murió nadie".

Diego Sepúlveda concluyó "de local los tres puntos es la prioridad".

Entradas

Largas filas se registraron en el ingreso al estadio por calle Manuel Plaza para comprar entradas, provocando esperas que bordearon la media hora.

El nuevo sistema de venta impuesto por el Plan Estadio Seguro retrasó el proceso, aunque cabe reconocer que el grueso de la gente llegó sobre la hora.

Puntos 30

Suma Ñublense en la tabla del coeficiente de rendimiento contra los 19 de Unión La Calera. 0