Andrés Mass Olate
"Germán no nos había dicho nada respecto a querer ser donante de órganos, sin embargo, en su funeral unas amigas nos comentaron que quería hacerlo, lo que finalmente nos convenció. Fue una decisión dura, pero reconfortante ya que con ello prolongamos su vida".
Estas palabras corresponden a Carol Matamala, hermana de Germán, joven de 27 años fallecido el pasado 15 de septiembre en un accidente de tránsito en San Ignacio, materializando de esa manera una de las cinco procuraciones multiorgánicas que se han llevado a cabo en el hospital Herminda Martín durante este año, colocando a Chillán entre las ciudades más solidarias a nivel país, con una tasa de procuración, al 22 de septiembre, de 10.8 procuraciones, versus el promedio nacional que llega a 8 por cada millón de habitantes.
Acogida
Germán Matamala era el menor de cinco hermanos, y el único varón, por lo que su partida fue un duro golpe para su familia. Pese a lo complejo del escenario, sus seres queridos demostraron entereza y solidaridad, lo que permitió obtener corazón, hígado, riñones y córneas, beneficiando a seis pacientes de distintas zonas del país.
"Luego de confirmarse su fallecimiento, se nos acercaron médicos informándonos que mi hermano cumplía con los requisitos para ser donante de órganos. En un principio fue complicado, pero nos sentimos acogidos en todo momento por el equipo del hospital, en ningún caso se nos presionó, por lo que finalmente optamos por autorizar la donación", recordó Carol Matamala.
Aunque su familia decidió dar vida con su decisión, la hermana de Germán sabe que es un tema sobre el que falta una mayor consciencia por parte de la comunidad, por lo que hace un llamado a que se debata y se privilegie el poder dar esperanza a las personas que requieren de un nuevo órgano para seguir en este mundo. "Antes de la muerte de mi hermano no era partidaria de donar, sin embargo, ahora siento que fue la mejor decisión que se pudo haber tomado. Es un tema que debe conversarse y así evitar que familias pasen por la incertidumbre de seguir teniendo a su lado a sus seres queridos", sentenció Carol Matamala.
Cabe recordar que de acuerdo a la Ley de Donante Universal, todas las personas son donantes, estableciéndose como el único mecanismo para eximirse de ello, el dejarlo expresado ante notario. En caso de duda razonable, la normativa señala que el equipo médico debe conversar con la familia, que será quien finalmente decida. Es importantísimo que se dialogue sobre el tema al interior de la familia, para que se respete la voluntad de ser donantes por parte de las personas.
Gran aporte
Desde su creación en el 2009 hasta la fecha, la unidad de Procuramiento de Órganos y Tejidos del hospital Herminda Martín ha realizado 40 procuraciones, lo que se ha traducido en la obtención de 123 órganos y 18 tejidos (córneas), procedimiento que se efectúa desde el año pasado.
"Estamos muy agradecidos de la comunidad, que nos ha permitido transformarnos en un centro de referencia en cuanto a la donación de órganos y tejidos se refiere, puesto que al igual que otros años, estamos por sobre el promedio de donación nacional", puntualizó Rodrigo Avendaño, director del hospital Herminda Martín.
Compuesta por tres profesionales, un médico y dos enfermeras; uno de los pilares de su exitosa existencia ha sido el trabajo mancomunado entre los distintos estamentos del principal centro de salud de la región de Ñuble. "Si bien somos tres personas las que la conformamos, nuestra labor cuenta con el apoyo de un equipo multidisciplinario, que ha sido clave para mantenernos en el tiempo", destacó Beatriz San Martín, una de las enfermeras coordinadoras.
Junto con el trabajo operativo, una de las principales tareas a la que se ha enfocado la unidad, tiene relación con visibilizar la importancia de la donación de órganos entre los distintos actores sociales. En ese sentido, destaca el acercamiento a los distintos establecimientos educacionales, siendo elegida para el 2017 la escuela Los Héroes. "Se requiere un cambio de mentalidad respecto a la relevancia que tiene donar órganos, y para ello el aporte de las nuevas generaciones es clave. Los niños son muy generosos, lo que eso hace que los adultos cambien el enfoque y tomen conciencia al respecto", sentenció Beatriz San Martín.
"Chile tiene una lista promedio de 1.800 pacientes esperando un órgano y una tasa de donación de entre 120 y 125 donantes al año. Llegar al promedio de Latinoamérica sería histórico: unas 170 donaciones anuales. La gran barrera que frena se debe a que la mitad de las familias no aceptan donar los órganos de sus familiares en casos de muerte cerebral. Cuando las familias reconocen haber conversado, la donación se eleva considerablemente sobre un 80%", afirmó el doctor Pablo Pizzi, coordinador de la unidad de urología de la clínica Tabancura, y ex procurador.
Volvió a nacer
Hace 15 años, a Juan Carlos Aqueveque (59) le instalaron tres baipás en su corazón producto de tres infartos, sin embargo, ocho años transcurrieron para que nuevamente su organismo comenzara con problemas, lo que significó que prácticamente no pudiera moverse ya que se cansaba.
Luego de meses hospitalizados en Concepción, el diagnóstico de los médicos fue enfático: su única solución era recibir un nuevo corazón. Se le inscribió en la lista regional, y en julio de este año paso como prioridad al registro nacional, permaneciendo en espera poco más de un mes, hasta que finalmente apareció el tan esperado donante.
El 12 de agosto, los pabellones del hospital Guillermo Grantt Benavente, luego de ocho largas horas de operación, fueron testigos de cómo el vecino de la población Santa Elvira, volvía a nacer.
"Fue un proceso complejo. No podía caminar ni media cuadra y me cansaba, sin embargo, siempre mantuve la esperanza, y apareció el donante en el momento preciso, cuando mi corazón no daba más", recordó Juan Carlos.
Ha pasado un mes y medio desde la intervención, y Aqueveque no ha presentado problemas, retomando lentamente la normalidad de su vida. Por lo anterior, hace un sentido llamado para sensibilizar a la comunidad. "Tuve suerte, pero la mayoría de las personas no la tienen. Todos podemos necesitar un órgano, por lo que hay que ser solidario. Aunque sea doloroso, es un acto de solidaridad muy grande, ya que con eso se está dando vida", cerró Aqueveque.
"En un principio fue complicado, pero nos sentimos acogidos en todo momento por el equipo del hospital, en ningún caso se nos presionó, por lo que finalmente optamos por autorizar la donación".
Carol Matamala
Hermana de un donante de, órganos."
Ausencia de funciones cerebrales
Para que se determine que una persona puede donar sus órganos, el doctor Pablo Pizzi, coordinador de la Unidad de Urología en Clínica Tabancura y anteriormente procurador, es claro al señalar que "si se demuestra la ausencia total e irreversible de todas las funciones cerebrales, producto de accidente cerebro vascular o traumatismo, se procede a la realización de exámenes clínicos y de laboratorio que establecen la certeza diagnóstica absoluta". Lo anterior, debe ser acreditado por un equipo de médicos que no pueden formar parte del equipo que va a efectuar el trasplante y donde al menos uno de sus integrantes debe ser Neurólogo o Neurocirujano.
Antecedentes
Ley del donante
De acuerdo a la normativa, todas las personas son donantes, salvo que expresen lo contrario a través de una declaración notarial.
Conversación
Independiente que la persona haya manifestado su disposición a ser donante, la familia es quien autoriza que se realice el procedimiento. Por lo mismo, es fundamental que el entorno cercano sepa y respete la voluntad del fallecido.
Cambio de mentalidad
Precisamente para evitar la negativa de la familia y crear conciencia sobre la importancia de la donación, es que la unidad de procuramiento de órganos y tejidos del hospital de Chillán, realiza un trabajo con establecimientos educacionales. Este año lo hace con la escuela Los Héroes.
Sin funciones cerebrales
Dicho diagnóstico debe ser corroborado por dos médicos (neurólogo-neurocirujano), y un internista, que no sea parte del equipo que vaya a realizar el trasplante.
40 procuraciones Multiorgánicas se han realizado desde el 2009 a la fecha en el hospital Herminda Martín de Chillán. Lo anterior, ha significado obtener 123 órganos y 18 tejidos.
1.800 pacientes en promedio Esperan anualmente por un órgano en nuestro país, llegando la tasa de donación entre los 120 a 125 donantes al año, lejos de las 170 donaciones que en promedio se producen en Latinoamérica.