Por estos días todo marcha como miel sobre hojuelas para los Diablos Rojos tras la victoria ante Cobreloa.
A las huestes de Paso Alejo regresó la calma, la confianza, pero aún hay algunos problemas que superar como la disponibilidad total del plantel de cara al pleito ante Copiapó de este domingo a las 16.00 horas en condición de visitante.
Por ejemplo, el volante Matías Arrúa presenta un esguince en la rodilla tras el duelo ante Fernández Vial por Copa Chile.
Sin embargo, uno que era pieza clave en el esquema del técnico Emiliano Astorga es Hugo Bascuñán, defensa central apodado "He Man" que aún no supera sus lesiones, proceso que ha durado más de lo presupuestado. "Me falta de una a dos semanas más para ya poder comenzar a entrenar con normalidad, la lesión no era tan débil como se imaginaba, finalmente fue bastante complicada por la zona afectada principalmente, la lesión está muy escondida, es en la zona del tendón donde hay pequeños desgarros", dijo Bascuñán.
Cabe recordar que Bascuñán, presentó hace casi un mes atrás una lesión en el tendón del tobillo izquierdo y una inflamación en la planta y luego una lesión en la inserción de los isquiotibiales, la cual es la que aún no ha podido superar. "Ya hice un tratamiento específico de plaquetas, pero a pesar de eso ha sido bastante demoroso, hay que tener paciencia, no queda otra", dijo sobre sus lesiones.
Sobre los tiempos para volver al campo de juego remató que "creo que podría estar a disposición para jugar contra Magallanes posiblemente y sino ya pensar en Copa Chile directamente".
Astorga aún no puede contar con Bascuñán, sin embargo, si tendrá a su disposición a también defensa Diego Opazo, quien superó la fecha de castigo, tras ser expulsado en el partido ante San Marcos de Arica en el norte. "Creo que el árbitro exageró en la expulsión, creo que se apuró, fui a apelar con el video en mano y se vio que no le pegué la patada, pero no me pude sacar la roja y me dieron un partido de suspensión, quizás sino no iba hubiesen sido muchas fechas más", dijo el ex jugador de Iberia.
"El próximo partido estaré disponible si el técnico así lo decide", expresó el defensa central y también lateral por derecha que perfectamente podría utilizar ese sector del campo de juego si Astorga lo determina, aunque también está la opción de mantener a René Bugueño por el lado diestro, jugar con Opazo y Pedreira por el medio y enviar a Juan Pablo Andrade por izquierda, aunque este mismo jugador mostró liderazgo y eficiencia como por el medio del bloque defensivo ante Cobreloa.
"Estamos convencidos que tenemos que estar arriba, nos juramentamos pelear por ascender, todos estamos comprometidos, no se han dado los resultados, pero la tabla está apretada, sólo depende de nosotros", sentenció Opazo sobre los desafíos deportivos de Ñublense.
Más allá de los intérpretes del entrenador de Ñublense, el discurso de los Diablos Rojos es transversal, ya que todos opinan que el principal desafío es mantener el buen nivel del domingo pasado, independiente del rival que esté al frente en cada fecha y no caer en las lagunas futbolísticas.
Ñublense y Copiapó en la tabla
El campeonato de la Primera B es extremadamente irregular, los elencos ganan y pierden con una facilidad increíble y todos le roban puntos a todos. Es por eso que la tabla es muy estrecha y así lo ejemplifican Ñublense y Copiapó que este domingo se verán las caras desde las 16.00 horas en el estadio Luis Valenzuela Hermosilla. Los chillanejos se ubican en el cuarto lugar con 19 unidades y si bien Copiapó lo hace un aparentemente distante décimo lugar, los 16 puntos que suman los invitan a ilusionarse en acortar distancias. Copiapó empató a cero de visita en la última fecha ante San Felipe.