Kempes dice que las comparaciones entre Messi y Maradona son "tonterías"
ARGENTINA. El campeón del mundo con la "Albiceleste" también defendió a Sampaoli.
Mario Kempes, figura y goleador del título mundial obtenido por Argentina en 1978, aseguró ayer que las comparaciones entre Lionel Messi y Diego Armando Maradona son "tonterías", alegando que se trata de futbolistas que jugaron en épocas distintas.
"Son tonterías. Messi es bueno, pero nunca ha ganado un Mundial. Comparar a jugadores de épocas distintas es imposible", afirmó Kempes en una entrevista publicada ayer por el diario italiano "La Gazzetta dello Sport".
"Yo gané el Mundial de 1978, Maradona el de 1986 y Messi todavía nada. Esta es la realidad", agregó el "Matador", ex jugador de Rosario Central, River Plate y Valencia, entre otros clubes.
La leyenda trasandina, por otro lado, expresó su decepción por el debut de Argentina, empate a 1 contra Islandia, y opinó que la "Albiceleste" no puede encomendarse únicamente a Messi.
"Argentina solo tiene un plan A, le faltan el plan B y el plan C. El plan A prevé dar el balón a Messi, cerrar los ojos y esperar que pase algo. Pero digo yo, si Messi se resfría hace falta una solución distinta", afirmó.
Para Kempes las dificultades de Argentina se deben a que sus jugadores, pese a ser individualmente talentosos, no logran formar un equipo. "Individualmente tienen calidad, pero juntos no son un equipo. Veo a muchos 'amigos de Messi' pero no a muchos 'compañeros de Messi'. Esta es la diferencia", dijo.
A pesar de esto, el "Matador" no cree que el ex entrenador de la Selección Chilena, Jorge Sampaoli, sea el principal culpable de esta situación.
"Han cambiados a muchos entrenadores en los últimos años, pero los resultados siguieron siendo decepcionantes. Hay que cambiar algo en las dinámicas del equipo. Veo a un grupo de jugadores que evidentemente no funciona", consideró.
Respecto a su propia experiencia con la selección argentina, con la que se coronó en el Mundial de 1978 al ganar la final del Estadio Monumental de Buenos Aires contra Holanda, Kempes aseguró que guarda unas emociones inolvidables.
"El Monumental lleno de papeles blancos antes y después de la final contra Holanda. Era una muestra de cariño de nuestra afición. Luego la alegría de la gente, nunca he visto tanta alegría. Todos bailaban, gritaban, cantaban. Argentina era un país en fiesta y nosotros les habíamos regalado esa emoción", recordó.