Una deuda de $486 millones, al 30 de junio, es la que se registra en el Servicio de Salud Ñuble (SSÑ) por concepto de prestaciones de servicio no pagadas por pacientes de ocho recintos de la nueva región.
Según la misma entidad, el monto representa el 0,28% del presupuesto anual dirigido al sistema público en la zona. Los establecimientos considerados son: los hospitales de Chillán y San Carlos, los comunitarios de Bulnes, Yungay, Quirihue, Coelemu y El Carmen y el Cesfam Violeta Parra de la capital regional.
Al respecto, el director (s) del SSÑ, Ricardo Sánchez, explicó que "el primer trimestre de cada año, el Servicio de Salud remite la información de las y los deudores al Fondo Nacional de Salud (Fonasa) para que, en conjunto con Tesorería General de la República, se retenga de la devolución de impuestos a la renta a quienes mantienen deuda con los establecimientos de la red de salud de Ñuble".
Los Hospitales de Chillán y San Carlos cuentan con una sección de Comercialización y Recaudación y en los Comunitarios son las áreas de Contabilidad las que efectúan el cobro. Para ello utilizan todos los mecanismos permitidos por la legislación vigente; desde cartas certificadas hasta visitas en terreno para contactar a los usuarios /as que registran deuda (adecuar).
"Paralelamente, con el propósito de facilitar el proceso de pago de los usuarios/as los Hospitales cuentan con diversos sistemas de recaudación. En el caso de Chillán y San Carlos, que son los que registran mayores ingresos, ambos tienen habilitado el sistema Transbank para que las personas puedan pagar con tarjeta de crédito o débito, además del efectivo y el tradicional sistema de pagarés", agregó Sánchez.
Motivos
El fenómeno de las deudas por prestaciones de servicios no pagas por partes de los usuarios de Salud, es algo que se replica en distintos puntos del país y tendría como fundamento principal la insolvencia económica de las familias más vulnerables.
El diputado Frank Sauerbaum cree que el no pago de estos cobros no es una decisión voluntaria de los pacientes, sino que no les queda de otra. Por ello, incluso, plantea agregar a la normativa posibilidades de atención para aquellos a quienes sus remuneraciones no les permitan cancelar dichas prestaciones.
"Esa deuda se debe, fundamentalmente, a los ingresos que no son percibidos por los hospitales de Ñuble, fundamentalmente por los bajos sueldos y salarios que tienen las personas que son atendidos en el Servicio de Salud, por lo tanto, estos hospitales no están ingresando hace mucho tiempo los pagos de los pagos -que son bien marginales- que la gente tiene que hacer por una atención. Por muy menor que sea el pago, la gente no lo puede realizar por sus bajos salarios", indica Sauerbaum.
El parlamenterio agrega que para él la solución pasa por "sincerar la situación, creo que efectivamente en Ñuble tenemos un nivel altísimo de pobreza, con personas que se atienden en los hospitales públicos y en recintos de localidades pequeñas como en el caso de El Carmen, Yungay o Quirihue. Habrá que hacer lo suficiente para poder tener a estos pacientes exentos de pago".
Repactación bilateral
El diputado del Partido Radical, Carlos Abel Jarpa, tiene una opinión similar a la de Sauerbaum. Según el también médico, si bien la deuda no representa un monto que incide en el normal funcionamiento de los recintos, sí se deben buscar mecanismos de refinanciamiento para tranquilidad de las dos partes. "Lo fundamental es que el Servicio de Salud Ñuble haga efectivo estos cobros por prestaciones no canceladas a los usuarios y busque los métodos más acordes tanto para el deudor como para el prestador de servicios, evitando que esta situación se transforme en un problema recurrente ", señaló.