Expulsión de inmigrantes
Señor Director:En el marco de la Ley de Extranjería que impulsa el Gobierno, sectores de oposición han tratado de incorporar un principio que impida la expulsión de extranjeros. Más allá del populismo detrás de la propuesta, creo que los autores no han considerado las implicancias que puede producir: ¿qué pasa si, el día de mañana, hay un terrorista provocando daños en el país? ¿Deberemos soportarlo sin más, producto del "principio de no expulsión"?
No parece lógico que un país decida perder voluntariamente su derecho soberano a decidir qué extranjeros pueden mantenerse en el país. Chile debe mantener abierta la puerta de entrada a los migrantes que quieran venir a colaborar y hacer el bien. Pero evidentemente debe mantener abierta también la puerta de salida, para proteger a nuestra población -chilenos e inmigrantes- de quienes llegan a Chile sólo a provocar desorden o a cometer ilícitos.
Renata García
Centro de alumno en Congreso
Señor Director:Qué bueno que el Servel ratificó que la devolución de fondos por parte del centro de alumnos Revolución Democrática. Con eso habían comprado unas carnecitas y prietas, el buen carbón; su botellón de tinto -por qué no-, algunas cervezas, una botella de pisco -Mistral, que no se note pobreza- y, para después del evento, un desodorante Old Spice, la máquina de afeitar y un traje de baño para pasar el mal rato de lo comido y lo tomado. Hay que descansar también.
Qué alegría ver cómo se renueva la clase política, bienvenidos los centros de alumnos al Congreso.
Valentina Ramírez
1.000.000 %
Señor Director:El FMI anunció que la inflación en Venezuela a fin del 2018 será de un 1.000.000 %, sí un millón por ciento, por lo que con toda seguridad, todos los que hoy aún defienden y apoyan al gobierno Venezolano, desde Chile, está "cayendo de maduro", que ni soñando se irían a vivir a Venezuela, pero igual sería muy recomendable que se dieran el tiempo de escuchar los sentidos y sufridos relatos de los innumerables venezolanos que han llegado a Chile, dejando a sus familias para buscar una nueva vida, porque todos aquellos que no experimenten y respiren "en vivo y en directo" la restringida vida actual del pueblo venezolano, "cae de maduro" que les resulta muy fácil apoyar su gobierno, mientras gozan de todas las comodidades en nuestra querida patria.
Hagan un esfuerzo y escúchenlos. Dato de la causa: para tener un parámetro comparativo, en los años ´70 la inflación en Chile llegó aproximadamente al 600%, según estudios contemporáneos de ese periodo.
Luis Enrique Soler Milla
Pérdida del encanto socialista
Señor Director:El socialismo olvidó como seducir a los chilenos no desde el carisma de un liderazgo; sino desde las ideas, los proyectos y de una práctica política.
En los últimos días ha vuelto a emerger en el debate nacional la crisis interna del Partido Socialista. El apoyo al ex Mandatario de Brasil acusado por corrupción, las reiteradas obstrucciones y las fuertes críticas que recibe a diario la mesa por el estilo de conducción que se impone, dan cuenta de un escenario interno de alta conflictividad.
La crisis existe, y los principales focos que lo generan son el tipo de manejo autoritario de Elizalde, la política de alianzas arbitrarias, las tensiones generacionales y la falta de un proyecto país. Y por si fuera poco, vemos como personeros iconos del socialismo, como lo son Camilo Escalona y Osvaldo Andrade repudian las propias acciones de su partido.Viendo cada día más lejana la posibilidad volver a La Moneda, la necesidad de cuidar el patrimonio Bachelet y los desesperados movimientos por acabar con el gobierno ha terminado por debilitar el debate, la democracia interna y prolongar una política de alianzas cada vez más agotada.
Ricardo Oyarzún G.
¡A la fila!
Señor Director:Por diferentes motivos, muchos chilenos debieron abandonar el país. La mayoría optó por no volver y adoptaron la nacionalidad del país que los acogió. De esta manera, accedieron a todos los derechos y garantías correspondientes. Lo que sería importante saber, es si esos países, dejaron de lado a sus propios ciudadanos por favorecer a los inmigrantes chilenos.
En relación con los inmigrantes que están ingresando a Chile, humanitariamente, se les debe acoger y entregar la ayuda necesaria para que se establezcan y vivan dignamente. Sin embargo, hay que ser realista, lo que no significa ser egoísta. La caridad empieza por casa. Es absurdo que tantos chilenos que viven hacinados por años y en paupérrimas condiciones, vean como se buscan soluciones para los extranjeros y ellos deben seguir esperando la casa propia y un mejor pasar. Con todo respeto: ¡ bienvenidos futuros chilenos, pero.... a la fila!
Jorge Valenzuela Araya