Una reunión de trabajo sostuvo el alcalde de Cobquecura con el delegado provincial del Serviu en Ñuble, con el fin de gestionar el avance de los proyectos habitacionales para vecinos de la comuna.

Julio Fuentes explicó que "en esta reunión le dimos a conocer al Delegado Enrique Rivas los proyectos más emblemáticos que tenemos acá en la comuna como es por ejemplo de la certificación de la postulación del proyecto habitacional del comité "Pan de Piedra" que se construiría en el terreno municipal que tenemos en calle Rehue.

Esperamos que este año sean adjudicados los subsidios y tenemos la esperanza puesta en que sea aprobado y por eso le pedimos apoyo al Delegado provincial para que nos apoye en este proyecto que beneficiaría a 134 familias que desde hace varios años esperan porque se concrete este proyecto y tener su vivienda".

El alcalde Fuentes agregó que "junto con ese proyecto habitacional, a través de la EGIS municipal hemos ayudado para conformar 5 nuevos grupos que actualmente se están postulando a subsidios en terreno propio, los que están en tramitación y que permitirían que nuestros vecinos y vecinas de distintas zonas rurales que sueñan con tener su casa propia".

Finalmente el alcalde reconoció y valoró el respaldo entregado por el Delegado Rivas a estas iniciativas, surgiendo el compromiso de seguir reuniéndose con los equipos técnicos para lograr la asesoría necesaria, que permita concretar estos proyectos habitacionales en la comuna que podría favorecer a cerca de 250 familias de Cobquecura.

En el marco de la inauguración del año académico del Departamento de Ciencias Sociales de la UBB de Chillán, hoy se dictará la conferencia titulada "Las nuevas inmigraciones y la discriminación racial en Chile", actividad que estará a cargo de la Dra. María Emilia Tijoux, académica del Departamento de Sociología de la Universidad de Chile. La jornada se llevará a cabo a las 10:30 horas en el Aula Magna de la UBB, Campus Fernando May, y cuenta con el patrocinio de la Escuela de Trabajo Social y el Grupo de Investigación en Género, Ciudadanía y Equidad (Gecieq).

En el marco del avance del proceso de instalación de la región de Ñuble, el 6 de septiembre se instalará en Chillán la Contraloría Regional de Ñuble. El órgano superior de fiscalización de la Administración del Estado, que tiene una labor fiscalizadora de carácter jurídico, contable y financiero, se ubicará en calle Carrera 657.

Contraloría es un organismo autónomo que controla la legalidad de los actos de la Administración del Estado y resguarda el correcto uso de los fondos públicos, con independencia de los demás poderes del Estado.

El delegado presidencial Martín Arrau, tras reunirse con el Contralor General de la República, Jorge Bermúdez, afirmó que es de vital importancia contar con la Contraloría Regional de Ñuble para supervisar todos los actos administrativos de la administración en la zona. "La naciente región de Ñuble va a contar con una nueva institucionalidad y dotación. Por tanto, para todos los actos administrativos se requerirá que esta institución autónoma vise la legalidad y constitucionalidad en todos sus procesos que se lleven a cabo en esta región", puntualizó.

Hasta la fecha, los actos administrativos y fiscalizaciones correspondientes a la provincia de Ñuble eran atendidos por la Contraloría Regional del Biobío, situada en Concepción. Con la puesta en marcha de una nueva sede de la Contraloría General de la República en Ñuble está previsto que se agilicen todas estas funciones.

Crónica Chillán

En el marco del ciclo de formación en materia de Prevención de Abusos de Menores que la Diócesis San Bartolomé de Chillán inició en enero de 2016, esta vez fue más de un centenar de docentes y asistentes de la educación de los Colegios Polivalente Padre Alberto Hurtado, San Vicente, Instituto Santa María, San Agustín de Quirihue y Nuestra Señora del Carmen de Portezuelo, los que recibieron la certificación tras participar de las charlas que son promovidas desde la Comisión de Formadores para la Prevención de Abusos de Menores, establecida por la Conferencia Episcopal de Chile (CECh) e impartidas por un equipo local a nivel diocesano.

Guillermo Stevens, encargado Diocesano de la Comisión en Prevención de Abusos, explicó que "este ciclo de charlas se realiza desde hace tres años, es decir un par de años antes de la visita del Papa. Se han hecho 58 jornadas en las que han participado 3.209 personas de la diócesis. La importancia que tienen es que buscan concientizar a los terceros distintos al abusador y a la víctima para que tomen un rol más activo y para ello es preciso conocer de qué se trata el abuso sexual a menores", especificó.

"La idea -puntualizó Stevens- es ir empoderando a la gente, para que tengan claro qué cosas no se deben aceptar bajo ninguna circunstancia, porque el conocimiento los ayudará a decidir mejor y tomar las medidas oportunamente", enfatizó.

El taller contempla tres módulos, donde los participantes pueden entender y reconocer cómo distinguir los signos de un posible abuso y su adecuado abordaje; comprender la forma en cómo la Iglesia universal y en Chile ha respondido a estas situaciones; tener claridad sobre la legislación civil y la normativa canónica en torno a la posibilidad de un abuso sexual a un menor de edad, además de una actividad práctica sobre el reconocimiento de los factores de riesgo en las personas vulnerables.

Cabe recordar que este proceso se remonta al 2003 cuando la Iglesia nacional elaboró el primer Protocolo para enfrentar estas situaciones, el que fue actualizado y complementado el año 2011, y luego -a petición de la Santa Sede- se elaboró el documento "Cuidado y Esperanza. Líneas Guía de la Conferencia Episcopal de Chile para tratar los casos de abusos sexuales a menores de edad", presentado en 2015, en donde se establecen procedimientos claros y coordinados en el manejo de los casos de abuso, tanto para asistir a las víctimas como para formar a la comunidad eclesial en la protección de los menores de edad.

Hasta el momento todos los consagrados, agentes pastorales, movimientos y trabajadores del Obispado, parroquias y casi la totalidad de los colegios católicos de la Diócesis, han realizado el curso que entrega un certificado, que es un requisito obligatorio en los diversos servicios de la Iglesia. Se espera concluir este proceso a fines de este 2018.