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Abusados por clérigos serán acogidos a metros de la casa sacerdotal

IGLESIA. Casa Tabor es parte del terreno del Obispado de Chillán que se encuentra en la esquina de O'Higgins con Collín. Ahí vive Renato Toro, sancionado dos veces por abuso.
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Comenzó a operar el Departamento de denuncias, acogida y acompañamiento a víctimas de abusos, entidad a cargo del Obispado de Chillán que será manejado por tres profesionales y que tendrá como principal función atender a quienes hayan resultado víctimas de abusos de poder, conciencia o sexual por parte de algún miembro de la Iglesia.

La inauguración del espacio se realizó ayer y estuvo oficializada por el Obispo Carlos Pellegrin. Tras finalizar la ceremonia en la que el prelado esparció agua vendita en las dependencias del inmueble, fue consultado por la idoneidad de la cercanía del espacio con la Casa Sacerdotal, recinto en el que viven clérigos que han sido denunciados, investigados y sentenciados por abuso sexual de menores, como el sacerdote Renato Toro.

"Si bien éste es un recinto único, no es lo mismo. Esa casa sólo tiene acceso a Avenida O'Higgins y así también la casa del obispo y la Hospedería Municipal. Sí, hay cercanía física (entre la Casa Sacerdotal y el Departamento de denuncias…)", informó monseñor Carlos Pellegrin.

Dentro de lo mismo, Paulina Benavente, psicóloga de la iniciativa que emerge como parte de las decisiones y compromisos que los obispos de la Conferencia Episcopal de Chile asumieron al término de la Asamblea Plenaria en Punta de Tralca, fue consultada si las eventuales víctimas atendida podrían sufrir algún tipo de trauma al asistir al espacio que colinda con la Casa Sacerdotal.

"Pudiera ser. Te mentiría si te dijera que absolutamente no. Pero también pudiera ser que para otras no. Cuando se pensó en esto se ideó para que tuviese una entrada independiente de manera que no tengan que pasar por nadie más para llegar hasta acá, y eso facilita la situación. La Casa Sacerdotal, como explicó monseñor, no tiene entrada directa hasta acá. Ahora, dentro de mi experiencia, cuando se ha trabajado con personas víctimas de abuso dentro de la iglesia eso no ha sido algo que los ha detenido, lo que los ha detenido es el dolor, la pena, el poner en palabras el abuso que es muy difícil", indicó la psicóloga.

Consultada Paula Cornejo, abogada e integrante del equipo a cargo del Departamento de Denuncias..., por el número de víctimas con que comenzará a funcionar el espacio en Casa Tabor, esta señala que "en este minuto no tenemos un datos exacto de las víctimas que hay. Lo que nosotros esperamos que ellas vengas, que se acerquen. Lo que sí nosotros haremos con Paulina (Benavente) es ofrecerles a las anteriores que está esta oficina y si quieren acompañamiento psicológico y espiritual pueden venir", señaló la abogada.

Daniela Vielma, la tercera profesional a cargo del Departamento de denuncias, acogida y acompañamiento a víctimas de abusos, manifestó por su parte sobre las medidas que desde el 2015 a la fecha la iglesia de Chillán ha realizado en materia de abuso de menores.

"En el año 2015 un equipo de formación conformados por 8 personas se capacitó en Santiago en la Conferencia Episcopal. Desde el año 2016 a la fecha se han realizado jornadas de formación en diversas comunidades. Hasta el momento llevamos 64 jornadas y hemos estado con más de 3000 personas de las distintas comunidades", informó.

Por su parte la Red Laical de Chillán, organización que también lanzó un servicio de acogida a víctimas de abuso clerical, criticó la iniciativa de la Diócesis de Chillán y se refirió a la cercanía del espacio con la Casa Sacerdotal. "El asunto cae por su propio peso. O sea, aquí se están tratando denuncias que afectan precisamente al mundo clerical de la Diócesis. Entonces parece una broma de mal gusto crear un departamento precisamente al alero de personas que están comprometidas por estos casos de abuso que la misma Diócesis ha reconocido", expresó Ramón Sola, vocero de la Red Laical de Chillán.

Indigente fue asesinado con golpes de palo en el Mercado de Chillán

VIOLENCIA. Locatarios de la plazoleta Sargento Aldea señalan que se ha instalado un clima delictual en su lugar de trabajo y temen por su seguridad. Solicitan que la situación mejore.
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Una violenta situación se vivió ayer en el Patio 5 de Abril del Mercado de Chillán, plazoleta Sargento Aldea, luego que Freddy Pavón Iturra, de 42 años, reconocido indigente del sector, fuese golpeado por Luis Soto de 50 años, también en situación de calle, quien provisto de un palo golpeó al primero hasta dejarlo inconsciente. Posteriormente, producto de las heridas, Pavón falleció en el Hospital Herminda Martin.

Según locatarias del sector, el hecho se habría dado producto de una discusión entre los dos hombres luego que Soto fuese descubierto por Pavón acostado en su colchón, acción que gatilló que "Fredy" (como era conocido en el mercado) procediera a echar al primero, para que luego regresara provisto de un madero que utilizó para golpear en reiteradas ocasiones en la cabeza a "Fredy" hasta dejarlo inconsciente perdiendo abundante sangre.

Tras ello, el victimario gritó "te maté" y se alejó del lugar por uno de los recovecos del mercado, no sin antes ser detenidos por clientes del lugar que lo mantuvieron reducido hasta la llegada de Carabineros.

"Por aquí siempre anda un hombre que es como esquizofrénico y nos reta, nos dice groserías. Y como somos mujeres, siempre nos trata mal y le tenemos miedo", señaló Ximena Cifuentes, quien trabaja en un local de venta de hierbas y que presenció el hecho

"Se acostó en un colchón (…) llegó el dueño y le echo. El esquizofrénico se fue para otro lado y desde allá le tiraba piedras (…) El 'Fredy' se puso a conversar con la Alejandra, gordita que también duerme por acá. De repente el esquizofrénico se fue despacito hasta el colchón de donde lo habían echado y sacó un palo como de 3x2 y se fue donde el 'Fredy' que alcanzó a verlo venir, pero el otro le pegó antes en la cabeza y cayó como un saco y le siguió pegando en la cara, en la cabeza. Quedó inconsciente con el primer golpe. La gente acá le gritaba que se detuviera. Después paró y gritó 'te mate'. Y un cliente corrió para detenerlo, como entre cinco personas lo detuvieron", narró la mujer.

Andrea, quien no quiso entregar su apellido por temor a represalias, fue una de las que intentó prestarle ayuda a "Fredy" luego que el agresor se retirara del lugar.

"Hice lo que pude dentro de lo que uno puede. Yo llamé al Samu y la señora me decía que lo toque, pero cómo lo iba a tocar si yo vi en el estado que estaba, se veía todo muy mal, él estaba desangrándose y tenía bastantes golpes en la cabeza. No lo vi en un estado como para que nosotros pudiésemos ayudar (...) Ahí les dije que ellos tenía que venir y se demoraron 5 minutos, la nada misma, ellos fueron los primeros en llegar y luego, como a las 15 minutos, llegó Carabineros", indicó aún en shock por lo que presenció y aprovechó de señalar que "Carabineros se lo llevó".

Según información proporcionada por la Brigada de Homicidios (BH) de la PDI, "al examinar el cadáver, presentaba fracturas en cabeza". En cuanto a los primeros antecedentes, "habrían tenido una discusión en el mercado y posterior pendencia".

En cuanto al fallecido, sería "Freddy Pavón Iturra, 42 años, persona en situación de calle, quien habría sido agredido con un palo en reiteradas oportunidades en su cabeza, en el sector del Mercado de esta ciudad". Posteriormente la BH recogió evidencia en el lugar.

Violencia en el Mercado de Chillán

Las locatarias del Patio 5 de Abril del Mercado de Chillán manifiestan que la situación vivida se veía venir por el ambiente de delictual que se ha instalado en el lugar. "Este es un lugar violento. Aquí incluso se ven transacciones de droga. Todo se ve aquí. Hace un tiempo otro indigente le partió la cabeza a un tipo también de la calle. En esa ocasión también fue con un palo. Llamamos a la ambulancia, pero no llegó, Carabineros se tuvo que llevar al herido. Acá la situación tiene que mejorar", señaló una comerciante que no quiso identificarse por miedo a una acción de venganza contra ella.