María Antonieta Meleán
Tras las escenas de pánico y desesperación que vivieron los habitantes de Quinchamalí durante la tarde y noche del jueves a raíz de los incendios forestales, la calma volvió a los ciudadanos, pero a medias ya que pese a que pudieron regresar a sus hogares, no conciliaron el sueño ante el miedo de que las llamas volvieran.
El boraz incendio arrasó con alrededor de 182 hectáreas, destruyó dos viviendas y puso en riesgo a otras casas, así como la Sala Cuna, la Escuela de Quinchamalí y el Retén de Carabineros.
Esa noche, los voluntarios de la Séptima Compañía de Bomberos de Quinchamalí estuvieron vigilantes ante cualquier emergencia o posible rebrote de los focos de fuego.
La capitán del cuartel de Bomberos de Quinchamalí, Paulina Soto, indicó que tuvieron una noche 'tranquila'. "Salieron dos focos de incendio y se hizo control con agua, se trabajó con la Tercera Compañía de San Clemente y los voluntarios de San Clemente y la Séptima hicimos guardia toda la noche".
Añadió que "el incendio del jueves quedó contenido, pero no extinguido y durante la mañana trabajaron las brigadas de Conaf y Arauco en la extinción, además de la Tercera de San Clemente y nosotros estamos de guardia".
María Aedo (36), quien reside en el camino a Santa Cruz de Cuca, debió evacuar su casa en el momento más crítico del incendio pues las llamas bordearon la parte posterior de la vivienda y alcanzó a salir con su hijo y una caja con tres gatitos. "Nunca pensé que el viento me iba a correr para el lado de la casa. Temía que se me quemara la casa y perdiera todo, pero gracias a Dios no pasó nada, ni tampoco a las casas de abajo".
Cuando pudo volver a su vivienda, confesó, lo hizo con algo de miedo. "Anoche me acosté con miedo porque temía que podía pasar algo, pero gracias a Dios cuando desperté no había pasado nada. Antes de acostarme fui a darme una ronda para ver si habían focos y para este lado no había nada", dijo.
En tanto, Margot Osorio volvió a su casa sola, pues sus padres de 86 y 90 años fueron trasladados a casa de familiares para que no los afectara el humo. "Anoche (jueves) no dormí nada con mucho miedo y había mucho humo", indicó.
No fue hasta el mediodía de ayer que volvieron sus padres. Su progenitora, Elizabeth Machuca (86), expresó que "pasamos un sustito, nos fuimos a casa de una hija, pero no dormí. Si no hubiera sido por mi hija morimos quemados".
En el cruce ferroviario, en la calle principal de Quinchamalí está la casa de veraneo de Espinoza Carrizo (64) quien llegó hace tres días a Quinchamalí procedente de la ciudad de Santiago. Ella junto a su familia estuvo alerta a lo que ocurría.
"Estuvimos despiertos hasta tarde porque estábamos preocupados porque el fuego podía volver", explicó.
Agregó que "tomamos la ropa, el vehículo teniendo listo por si tocaba salir".
A pocos metros de la Escuela de Quinchamalí vive el matrimonio María Concha y Alejandro Ruiz, vieron como el fuego apareció por el costado de la casa. "El fuego pasó por tres costados de la casa y estaban todos tratando de pararlo y a mi me sacaron con una crisis de nerviosa", dijo Concha.
Su esposo es el cuidador de la casa de veraneo que se consumió. "La casa de los jefes se quemaron, una casa grandota de tres baños y otra cabaña de verano que tenían equipada (...), el fuego cruzó la autopista Itata y arrasó con todo", relató Ruiz.
Agregó que los propietarios acudirían a ver las ruinas de la propiedad destruida.
Balance
La gobernadora de la Provincia Diguillín, Paola Becker, realizó una visita inspectiva en las zonas afectadas. Destacó la valor ejercida por los voluntarios y el personal que combatió el siniestro.
"El último reporte de Conaf nos constata 182 hectáreas afectadas y dos viviendas quemadas, ambas de uso de veraneo. El siniestro está circunscrito y se están apagando los pequeños rebrotes que han ido surgiendo. Paralelamente, se han intensificado las vigilancias y resguardos para evitar que se inicien nuevos focos, y de momento se mantiene la Alerta Roja en Chillán", detalló.
Agregó que "hay apoyo de unidades bomberiles de la Región de Maule, específicamente dos, gesto por el cual estamos muy agradecidos, así como del accionar y disposición que han tenido voluntarios y brigadistas, trabajando de manera intensa por combatir las llamas y defender las viviendas", dijo la autoridad.
Por otra parte, personal de la Municipalidad de Chillán se constituyó en Quinchamalí para efectuar un catastro de daños.
"El equipo de Emergencias de la Dideco de Chillán se trasladó la mañana de hoy viernes hasta el lugar del suceso y constató que fueron cuatro las propiedades destruidas por el fuego en Quinchamalí. Dos de ellas son viviendas transitorias, de las cuales solo una venía siendo ocupada para vivir. La tercera de las casas afectadas es usada como propiedad de veraneo por sus dueños que viven en Santiago; cabe indicar que en el momento del incendio, la estructura estaba siendo habitada por los cuidadores a quienes, vale recalcar, el siniestro no les afectó su casa. El fuego también afectó un galpón y viñas en el sector sur de Quinchamalí", detalló Dideco.
Destacaron el inicio de gestiones para ayudar a la persona damnificada. "Dideco de Chillán empezó a gestionar la ayuda necesaria para la familia unipersonal que perdió la vivienda transitoria que habitaba y que se encontraba físicamente instalada en un terreno herencia no regularizado".
Además, manifestaron futuras coordinaciones para que las directivas de los APR puedan postular proyectos para mejorar el vital servicio, del cual aseguraron presenta daños en las cañerías desde antes del incendio.
"Se trabajó con la Tercera Compañía de San Clemente, sus voluntarios y los de la Séptima hicimos guardia toda la noche". Paulina Soto Capitán de la Séptima Compañía "El siniestro está circunscrito, y se están apagando los rebrotes que han ido surgiendo y se ha intensificado la vigilancia". Paola Becker Gobernadora Provincia Diguillín "Estuvimos despiertos hasta tarde, estábamos preocupados porque el fuego podía volver. Tomamos la ropa y el vehículo por si tocaba salir". Espinoza Carrizo Veraneante "Estamos haciendo faenas de liquidación en el perímetro del incendio para evitar que el incendio continue".
José Bustamante, Jefe de Cuadrilla de Conaf"
"Tenemos 30 años en este lugar y nunca nos había pasado algo parecido. Estuvimos muy cerca de perderlo absolutamente todo". Alejandro Ruiz Vecino "En un momento mi casa estuvo en peligro, cuando se acercó el fuego a la escuela pensé que iba a pasar lo peor".
Pabla Melo, Vecina"
Encuentran mujer extravíada en incendio
La Policía de Investigaciones de Ñuble logró ubicar a Celina Rivas Alegría (71), quien vivía en una de las viviendas afectadas por el incendio forestal en Coelemu, y que no fue hallada en el sector tras la alerta de evacuación emanada este jueves. El trabajo investigativo de los detectives de diversas brigadas de esta Región Policial, que incluyó la consulta a vecinos y empadronamiento del sector, permitió ubicar a Marcos Valdés Rivas, sobrino de la mujer extraviada, quien señaló haber trasladado a su tía a la casa de un familiar, en la comuna de Penco. La PDI se dirigió al domicilio para constatar la información, confirmando de esta manera que la mujer se encontraba en calma y en buenas condiciones de salud.
"Temía que se me quemara la casa y perdiera todo. Lo que alcancé a rescatar fueron mis gatitos de tres meses y un poco más". María Aedo Vecina "Los hombres durmieron afuera y l hicieron por ratos pensando que se podía levantar de nuevo el fuego".
María Concha, Vecina"
182 hectáreas quemadas por el boraz incendio que afectó a Quinchamalí y puso en riesgo las infrasestructuras públicas como escuelas y el Retén de Carabineros.
4 propiedades destruidas completamente por el fuego que se registró en la población de Quinchamalí. Dos de las infraestructura eran viviendas, una de veraneo.
1 persona resultó damnificada tras perder su vivienda en el incendio. Dideco Chillán manifestó que proporcionarán la ayuda necesaria.