Hace 3 años | 1 de agosto de 2016

Los candidatos "Sub 30" al concejo municipal

Tan sólo en Chillán, 56 postulantes disputan un cupo para integrar el Concejo Municipal. La savia joven apuesta por los rostros nuevos y un cambio. Entre las cartas de Ñuble figuran una ex dirigente estudiantil, la pareja del vocero del Movilh Biobío y la hija de un comerciante del Mercado Municipal.

Hace 2 años | 1 de agosto de 2017

Abogado de Navarro negocia por embargo

Guillermo Rioseco propondrá adelantar parte de las costas del juicio por

"acarreo", que ascienden a $19 millones. Jurista criticó que el dictamen del tribunal Oral se convierta en una "indemnización" que pudiese entrabar futuras denuncias. Ex alcaldesa Lorena Jardua espera cerrar pronto esta arista.

Hace 1 año | 1 de agosto de 2018

Plande Seguridad costará $120 millones

Entre los proyectos figuran ampliar el radio de acción de las cámaras de televigilancia, instalar luminarias en paraderos y alarmas comunitarias.

Consejo Comunal de Seguridad sesionará en Plaza Sargento Aldea y se repartirán boletines trimestrales a los vecinos. También habrá más patrullajes.

Por fin las isapres le dieron la razón al decir popular: es mejor prevenir que curar. En los últimos días, anunciaron que, a partir de ahora, darán mayor énfasis a la prevención. Aunque sin duda lo harán por motivos económicos, para disminuir el número de consultas, reducir costos e imagenología, procedimientos ambulatorios y hospitalizaciones, con ello contribuirán a la salud y una mejor calidad de vida de los chilenos. No es ningún misterio que el famoso Examen Anual de Medicina Preventiva, sin duda por ser gratuito, es casi un chiste. Consiste en responder una serie de preguntas y en un somero examen de presión, así como análisis de muestra de sangre y orina. Con las preguntas se llega a lo absurdo, bajo el manoseado pretexto del protocolo. Por ejemplo, si la persona es adulto mayor, le consultan la fecha, las tablas de multiplicar, si hay antecedentes de cáncer, infarto o diabetes en la familia y si puede bañarse solo. Con suerte, se logra un electrocardiograma de esfuerzo. Los primeros están apuntados a detectar anormalidades que puedan generar un accidente cerebro o cardiovascular. Los de sangre, a pesquisar diabetes.

En esta superficial prevención, se evita cuidadosamente incursionar en males que están afectando o terminando con la vida de muchos chilenos. Por ejemplo, a los mayores de 40 años no se les realiza un examen de antígeno prostático, y menos un tacto rectal, "porque son más caros y requieren un especialista". A los que tienen riesgo cardíaco, a sabiendas de que el electrocardiograma en reposo no entrega todos los indicios, ni siquiera les insinúan un electro de esfuerzo, que es el que realmente dice la verdad. ¡Ay de a aquel paciente que tenga un trastorno de salud mental o de estrés laboral! Le recomiendan viajar y no trabajar tanto, aunque no tenga un peso en los bolsillos y gane apenas para subsistir.

Por lo general, de estos exámenes preventivos, curiosamente, se sale con una serie de órdenes que requerirán otros más profundos que, curiosamente también, son más caros y, más curiosamente todavía, están lejos del alcance del paciente. Desde luego, son minoría las isapres y clínicas que cuentan con un gimnasio o que postulan el ejercicio, fuente de salud y de vida. Y la tendencia se mantiene si se trata de trastornos psicológicos. No, el psiquiatra es muy caro y están muy ocupado.

Este columnista, en muy pocas ocasiones, al igual que la mayoría de la población, ha utilizado este examen "preventivo", que, en realidad, previene poco y nada.

Si las isapres quieren realmente reducir costos, no subir sus planes y más vida y salud para la población, bienvenido sea el propósito de revisar este asunto. Todavía hay tiempo, para los que están vivos. Los muertos se cansaron de esperar.

Raúl Rojas,

Un profundo impacto ha generado en el país el informe de la investigación que llevó a cabo el abogado penalista Waldo Brown, a petición de la Congregación Jesuita en Chile, tras conocerse denuncias de abusos que apuntaban como responsable al sacerdote Renato Poblete, fallecido en febrero de 2010, y quien fuera el capellán más reconocido que tuvo el Hogar de Cristo durante 18 años, entre 1982 y 2000. Con un carisma público que le hizo acreededor de múltiples reconocimientos por su labor dedicada a los más pobres del país, administrando la obra fundada por el Padre Alberto Hurtado Cruchaga, Renato Poblete fue una persona admirada hasta su deceso.

Hoy, una investigación independiente, recibió 22 testimonios de mujeres afectadas y dio crédito a sus denuncias para llegar a establecer una serie de abusos de tipo sexual y de conciencia por parte del religioso. Lo anterior llevó al Provincial Jesuíta, Cristián del Campo, a reconocer con dolor la "doble personalidad" -"con sus luces y sombras"- del clérigo ya fallecido, ofreciendo ayuda en la reparación sicológica del daño causado a las víctimas, junto con la creación del Centro de Prevención de Abusos Sexuales y Reparación, y la solicitud a la Universidad Alberto Hurtado "que pueda contribuir a la investigación y aprendizaje sobre el fenómeno del abuso en sus más diversas expresiones". El reconocimiento, que dio plena confidencialidad a las víctimas, también analizó eventuales encubrimientos de lo ocurrido. Y si bien de parte de los Jesuítas se descartó ocultamiento de información, es justo preguntarse cómo estos delitos pudieron pasar inadvertidos durante 48 años. No obstante, serán ahora las víctimas las que podrán ejercer judicialmente sus derechos y revelar en dicha instancia u otras si tales actos fueron acallados, y perseguir también dichas responsabilidades. En Chile es conocida la frase: "las personas pasan y las instituciones quedan". En este caso el Hogar de Cristo, una obra de bien fundada en 1944 y que hasta el año pasado atendía a 30 mil personas en 300 programas, entre ellos Hospederías, como la de Chillán que recibe a personas en situación de calle; deberá sobrellevar una carga inmerecida por su asociación a la figura del Padre Poblete. Ante ello, resultan muy asertivas las palabras de su exdirector, Benito Baranda, cuando dice que "No es el hogar del padre Poblete, es el hogar para personas que han sido excluidas de la sociedad y que van a buscar allí conciencia de esta dignidad que les ha sido usurpada". La tarea del hogar y de sus cientos de voluntarios, que con convicción de fe y humanidad aportan con una mano solidaria a las personas más vulnerables, son el verdadero rostro del legado presente y futuro del Padre Hurtado para nuestro país.