Tatiana Aular Aguirre
C ristián Monckeberg, ministro de Vivienda y Urbanismo, reconoció durante su visita a Chillán, "que en la región tenemos un déficit de 9.100 viviendas, que no todas son sociales, aproximadamente son 2/3 de todo eso, y la región está haciendo un tremendo esfuerzo. No obstante está recién iniciando funciones como región autónoma, para lograr disminuir este déficit de manera importante".
Aunque la vara, puede verse alta, afirmó que en la región "durante los 4 años de gobierno vamos a lograr construir con recursos propios alrededor de 7.100 viviendas".
Con respecto a la realidad de la región para el 2019 y 2020, se han trazado como meta la cartera de Vivienda y Urbanismo dar inicio a la construcción de 2.100 unidades habitacionales, las cuales deberían estar listas en un lapso de 18 meses.
Aclaró que las viviendas previstas para Ñuble, no solo contempla atención para la población más vulnerable, sino "que son viviendas donde no están involucrados los recursos públicos".
Enfatizó que "se está haciendo un esfuerzo importante en la región , a diferencia de otras gestiones, esta se ha destacado por su eficiencia y su buena gestión, que recién esta iniciando funciones".
De acuerdo a la calidad de las viviendas sociales y si estas cuentas con aval internacional en cuanto a las condiciones y capacidad de habitabilidad para las familias, apuntó "que para ser bien claros, las políticas de la construcción chilena son bastantes buenas en nuestro continente, estamos en mejores condiciones que otros países, pero nos queda mucho por hacer".
Rescató que uno de los grandes desafíos de la gestión como Estado, es "cómo logramos llegar a las familias con una respuesta más rápida, porque muchas veces las familias tienen que espera mucho tiempo para poder obtener una vivienda".
Ejemplificó que parte de la realidad que conoce es "que una familia espere uno o dos años para obtener una vivienda, puede ser razonable, porque es más o menos lo que uno se tarda en buscar una vivienda, pero cuando una familia tiene que esperar 10 ó 12 años, ese es nuestro gran problema".
En cuanto a gestión tangible, se comprometió con las familias del campamento transitorio de Oro Verde quienes tendrán viviendas definitivas".
Una muestra de la relación Estado - Empresa, queda reflejada en que la misma firma que construye las viviendas sociales, dentro de su contrato de obra, debe construir las unidades residenciales para las viviendas transitorias.
Además manifestó que si bien la vivienda es una urgente necesidad, "queda un poco más atrás en las solicitudes que hace la ciudadanía, esto no mérito de uno o dos años, sino de una política habitacional que ha venido dando respuesta", remató el ministro.