Piden que ciudad apure inversiones en beneficio de una mayor inclusión
INFRAESTRUCTURA. Durante la última década, se ha avanzado en mejoras para personas en situación de discapacidad, pero todavía hay aspectos que no se han abordado para el acceso de todo el público y las autoridades se comprometen.
Cada día, transitar por el centro de la ciudad constituye un riesgo para José Barrera. Por una secuela de polio, debe ayudarse con muletas para caminar. A la mala calidad de las veredas se suma la dificultad que ha encontrado en diversas instituciones públicas de la ciudad, cuyas rampas de acceso son muy elevadas.
Como él, la población de personas en situación de discapacitados en Chillán manifiesta su inquietud por disminuir cada día más la brecha entre el acceso del común del público, y las personas con una condición especial. "Chillán es muy poco amigable, hoy no sólo los discapacitados padecemos las incomodidades en las calles, sino todo tipo de público, los adultos mayores también se caen constantemente", señala.
Con mucho esfuerzo, Barrera se ha desempeñado en cargos que le han permitido desarrollarse en el servicio público. Sin embargo, postergó sus estudios, que recién en 2019 consolidó con el título de Ingeniero en Administración, en el Instituto Tecnológico UCSC, Sede Chillán.
Municipalidad
Desde 2006 existe la Oficina de Discapacidad, dependiente de Dideco en la Municipalidad de Chillán. Esta repartición trabaja por mejorar la calidad de vida de las personas con capacidades diferentes, sus cuidadores y sus familias, promocionando la inclusión, el estilo de vida saludable y el reconocimiento como sujetos de derecho. En 2019, gestionó la entre de 172 ayudas técnicas, como sillas de ruedas, catres clínicos y colchones anti escaras.
Pero esto parece no ser suficiente. La organización Los Bastones Blancos, agrupa a las personas no videntes en Chillán. Su presidente es Wilfredo Vergara, quien manifiesta su preocupación porque pocos semáforos de la ciudad tienen habilitado su aviso sonoro, por lo cual no es suficiente alerta que para la comunidad ciega.
"Falta por hacer todavía, aunque se ve que la gente está más civilizada en este aspecto. Se ofrecen más para ayudar a cruzar la calle. Pero en los espacios públicos no es fácil ingresar. Los semáforos actuales no nos sirven", señala.
La Dirección de Obras de la municipalidad recibe estas tareas, que aumentan su cobertura día a día. Sin embargo, en ocasiones el concejo municipal canaliza las demandas de los vecinos.
Uno de ellos es Joseph Careaga, quien cumple un rol crucial en esto, pues vive en primera persona las dificultades de su transitar.
"Chillán ha evolucionado bastante en el tema de vialidad, pero le falta todavía en las calles más alejadas del centro y que algunos edificios cumplan con la ley de accesibilidad universal", asevera.
En lo particular, muchas personas se acercan a él solicitarle que interceda por ellos para el tratamiento de sus necesidades en el concejo.
Su diagnóstico de osteogénesis imperfecta -más popular como "huesos de cristal"- no ha truncado sus sueños, que actualmente lo consolidan como un personaje relevante en la política local.
Discapacidad auditiva
En muchos aspectos, la comuni9dad de personas sordas dan ejemplo de la proactividad para insertarse en el desarrollo cotidiano de las tareas. Diógenes Concha tiene esta discapacidad desde que nació y hoy, a sus 30 años, es un destacado instructor de lengua de señas. Imparte talleres en Hilarión Consultora & Capacitación.
"Las dificultades que más he tenido son en el tema laboral. Hay discriminación y eso indigna, porque los profesores tampoco están preparados para educar a niños sordos, sino que trabajan con niños oyentes", evalúa.
Diógenes comparte la tarea de la docencia, con Javier Ibacache y Rafael Farías, quienes son oyentes, pero con fuerte vínculo con la comunidad sorda. Ambos ejercen como intérpretes en algunos actos públicos.
"Hoy no sólo los discapacitados padecemos incomodidades en las calles, sino todo público. Los adultos mayores se caen".
José Barrera, Discapacitado en movilidad
"Chillán ha evolucionado bastante, pero todavía falta que algunos edificios cumplan con ley de accesibilidad universal".
Joseph Careaga, Concejal de Chillán