El sentido de la vida
Explica el autor del librito titulado "Eutanasia", que la palabra eutanasia viene del griego y significa "buena muerte". Sin duda esta es la trampa. ¿Qué es eso de la buena muerte? Esto es más propio de los cuidados paliativos y, desde luego, en ese ámbito de la ciencia nadie piensa en la eutanasia.
La OMS define la eutanasia como "acción del médico que provoca deliberadamente la muerte del paciente". Y visto así, al médico le da grima y piensa en su juramento hipocrático.
Algunos quieren proponer como algo normal ayudar a una persona a morir, porque lo está pasando mal. Hasta hace muy poco, si una persona veía a alguien con intención de suicidarse, ponía todos los medios para evitarlo.
¿Qué es lo que ha sucedido para que hayan cambiado tanto las actitudes y los razonamientos? Ha cambiado el modo de considerar la vida humana. El porqué de la vida, el sentido de la vida. Hasta no hace mucho, la mayoría de las personas contaba con la eternidad. Y solo esa idea, si se quita del panorama humano, cambia totalmente la paz interior, la serenidad ante la enfermedad, la idea del bien y del mal.
Enric Barrull Casals
Marzo
Ya queda menos para llegar a Marzo, y a la fecha resulta imposible pasar por alto la gran cantidad de movilizaciones ya agendadas para tan polémico mes. En este contexto, y para aquellos que creen que solo la violencia da resultados, sería apropiado recordar la vida y obra de grandes personajes como Rosa Parks, Martin L. King, Tenzin Gyatso o Desmond Tutu. Hombres y mujeres que entendieron que no hay nobleza en sacrificar a otros por sus ideas, sino que fueron ellos mismos quienes asumieron los costos de desafiar lo establecido para alcanzar lo que ellos concebían como un mundo más justo.
Aquí no se trata del trasfondo de cada causa (aquello puede discutirse en otra instancia), sino de la forma en que estas son planteadas y la forma en que cada individuo escoge luchar por ellas. Como dijo King: "La no-violencia no es pasividad estéril, sino una poderosa fuerza moral que se hace para la transformación social"
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Bárbara Haas
Incertidumbre y caos
No es de extrañar que ejemplos constitucionales tal como el caso de Estados Unidos, Alemania e incluso Japón presentan Cartas fundamentales que han perdurado y demostrado su éxito durante décadas y que salvo del último caso, han sufrido distintas reformas, tal como ha experimentado nuestra Constitución Política.
Hay que destacar que Chile durante los últimos 30 años ha tenido un crecimiento sin precedentes. La pobreza se redujo de un 44% al 8% según la encuesta Casen 2017, el índice de desarrollo humano de 0,843 en calidad de muy alto, mide variables tales como salud, educación y riqueza, siendo además líder en el continente sudamericano. Se redujo la desigualdad en base al Gini de 0,56 en 1987 a 0,46. Chile además se encuentra posicionado como el país con mayor movilidad social a nivel mundial de la OCDE, permitiendo la reducción paulatina de la desigualdad.
Un eventual proceso constituyente implica que nuestro país se vea sometido en un periodo de incertidumbre por 2 años reinado por el caos, la violencia y el estancamiento, aseverando aún más los problemas actuales.
Carlos P. González
¿La Lingüística subestimada?
El escritor y humorista británico A.P. Herbert (1890-1971), Profesor de Derecho en el New College Oxford, nos dejó el siguiente pensamiento sobre el lenguaje humano: "preocúpate de las palabras, Bobby. Tu abuela tiene razón, pues, sea lo que hagas, siempre estarás usando palabras. Todos los días, las palabras importan. Aunque vivas en un barril y no hables más que contigo, las palabras importan, porque las palabras son las herramientas del pensamiento". Sin mayor prosopopeya, nunca pensó que podría existir una ciencia preocupada de ello.
La Lingüística es un campo altamente técnico hoy en el mundo, con un vocabulario especializado imposible de evitar. A pesar de ello es un campo despedazado por controversias académicas donde cada experto toma su porción sin mirar para el lado o visualizar horizontes que ayuden, por ejemplo, a entender el lenguaje humano y sus disfunciones así como contribuir a la enseñanza de lenguas.
Las diferencias son enormes y prejuiciadas, que a la larga repercuten en el diseño de metodologías efectivas para la enseñanza de lenguas. Otra cuestión igual de grave es lo que ocurre en la formación de comunicadores (periodistas, relaciones públicos, y afines). La pregunta que surge es más o menos igual a lo que pudiera ocurrir en campo clínico ¿se podría formar un médico sin anatomía humana, o, agrónomos sin conocimiento de análisis de suelos. ¿Por qué la lingüística tiene un espacio tan reducido en la academia hoy?
Omer Silva Villena exacadémico UACh/Ufro