Desde que se inició el estado de Catástrofe en el país y, especialmente, desde que se decretó el toque de queda para la intercomuna Chillán y Chillan Viejo, nos hemos percatado de una dinámica no muy alentadora al enfrentar la pandemia del Covid-19: somos la región con mayor número de incumplimiento de medidas sanitarias en Chile. En efecto, hasta la última jornada, registramos más de 500 detenciones por vulneración de éstas medidas, lo que se traduce en un gran número de personas que actúan de forma irresponsable y poco comprometida con sus propias familias, con la comunidad donde viven y con la salud pública en general.
El trabajo de Carabineros en terreno ha permitido establecer que, sin miedo al contagio y a las responsabilidades legales asociadas, las personas de desplazan por la zona de cuarentena y barrera sanitaria sin haber solicitado las autorizaciones respetivas y argumentando necesidades no urgentes para ello. De hecho, incluso hemos sorprendido a familias completas en supermercados, farmacias y locales de abastecimiento, cuando la recomendación ampliamente difundida ha sido que sólo un miembro de la familia acuda a hacer el trámite.
El aumento de los contagios en la región es preocupante. Sin embargo, más preocupante es que en nuestros patrullajes y fiscalizaciones continuemos encontrando gestos de indolencia absoluta frente a un enemigo invisible que está acabado con miles de vidas en el mundo y que está causando también lamentables pérdidas en Ñuble.
Los servicios policiales preventivos están desplegados en toda la región, durante las 24 horas del día y con el mayor compromiso por la integridad de nuestros vecinos. Pero, ¿de qué valen las planificaciones policiales y labores en terreno si la ciudadanía no asume total conciencia del riesgo? De nada.
Chile es un país solidario y quedó demostrado en el terremoto del 2010, en los aluviones del norte, los incendios del centro y sur, etc. Ñuble, también es una región que se caracteriza por el trato de su gente, la dinámica familiar y el trabajo colaborativo, justo ese que necesitamos ahora más que nunca para frenar el contagio del coronavirus y evitar muertes. Todos los actores de esta sociedad somos responsables en esta lucha desde distintos escenarios. Las autoridades, los profesionales de la salud, los equipos municipales y tantos otros que aportan cada día a frenar este flagelo. En nuestro caso, los Carabineros estamos en la calle para que las familias puedan quedarse en su casa, protegidas, fuera de riesgo y teniendo conciencia siempre que nuestra prioridad, como Institución fundamental de la República es salvaguardar la vida e integridad física de todas las personas.
General de Carabineros Mario Sepúlveda Peralta
Jefe XVI Zona Ñuble