Las conexiones a Internet han tenido un importante incremento en nuestro país. El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) ha dado a conocer que las conexiones en los hogares chilenos aumentaron en más de 670 mil en los últimos cinco años y si se consideran las empresas, el incremento alcanzó a más de 701 mil. En marzo de 2015 se contabilizaron un total de 2.574.641 usuarios y la mayor parte de ellos, es decir, 2.274.025 clientes, correspondió a consumidores de residencias particulares, mientras el resto fueron conexiones de empresas. En marzo de 2020, en cambio, se registraron un total de 3.276.058 clientes.Esas cifras fueron destacadas por el INE a raíz del Día Mundial de las Telecomunicaciones, fecha que tuvo como objetivo difundir la contribución que estas tecnologías pueden hacer al desarrollo de las sociedades.

La crisis por la pandemia ha permitido valorar la importancia de Internet, por ejemplo, en el teletrabajo, que había tenido un lento avance en el mundo, pero que con la emergencia se puso de relieve rápidamente en las empresas y servicios, para permitir a los trabajadores desempeñar sus labores a distancia, sin asistir en forma presencial. La actividad en el trabajo a distancia ha implicado el uso frecuente de métodos de procesamiento electrónico de información y algún medio de telecomunicación para el contacto entre el empleado y la empresa.

Del mismo modo, ha permitido que en colegios y universidades hayan continuado las clases a distancia. Así, a raíz de la emergencia del coronavirus, el teletrabajo y la educación a distancia han dado un gran salto. Ya las universidades habían planteado hace algunos años la posibilidad de adoptarlas, pero avanzaron poco hasta que la crisis sanitaria y la necesidad de que las personas se quedaran en cuarentena en sus casas obligaron a su aplicación acelerada, tal vez sin un plan muy metódico. Anunque nuestra región esta al debe en la materia, durante la pandemia, Internet ha tenido una prueba de fuego y ha cumplido, al mantener conectadas a las familias, a los trabajadores con sus empresas, a los estudiantes, a los usuarios con los servicios públicos y la banca, y al mundo en general.

Un grupo importante de la clase media se sitúa por sobre, pero muy cerca, de la línea de la pobreza. Así, en Chile hay más de 10 millones de personas que, a pesar de no estar en situación de pobreza, viven con menos de $350.000 mensuales. Es decir, son personas que requieren el apoyo del Estado para enfrentar eventos adversos que podrían ser catastróficos, llevándolos a perder lo que con esfuerzo han logrado. Clase Media Protegida avanza en institucionalizar el trato del Estado con la clase media, a través del ingreso del proyecto de ley que crea este sistema, de la creación de su Secretaría Ejecutiva, y de incorporar a la clase media como beneficiario de la política social del Ministerio de Desarrollo Social y Familia. Además, avanza en simplificar y modernizar el acceso a beneficios existentes, a través de una plataforma que articula 148 beneficios públicos y más de 16 trámites de distintos servicios del Estado. Esto ha permitido que más de 590 mil personas realicen más de 15 mil trámites de manera totalmente digital sin la necesidad de salir de sus casas. Por último, Clase Media Protegida mejora y aumenta la oferta de beneficios disponibles para hacer frente a eventos adversos. El Gobierno del Presidente Piñera ha impulsado 42 iniciativas legislativas los últimos meses, de las cuales al menos 28 benefician directamente a la clase media, de las que 17 ya están aprobadas. Todas ellas fortalecen la red de seguridades con que cuentan estas familias y/o amplían las oportunidades que les permiten seguir surgiendo. A un año del lanzamiento de Clase Media Protegida, aún quedan importantes desafíos por abordar, los cuales se han profundizado con la actual crisis que enfrenta nuestro país producto del covid-19. Entre las iniciativas legislativas o administrativas impulsadas por el Gobierno que ya están aprobadas e incorporadas como parte de los beneficios de la red Clase Media, destacan: rebaja a las Contribuciones para personas mayores; subsidio al Transporte para las personas mayores; Ingreso Mínimo Garantizado; eliminación del tope en atenciones kinesiológicas y fonoaudiológicas para personas con discapacidad; descuentos a medicamentos para los afiliados a Fonasa; creación de los programas Reinvéntate y Talento Digital del Sence; Seguro de Protección al Empleo; e Ingreso Familiar de Emergencia, entre otros. Entre las iniciativas que se encuentran en tramitación en el Congreso, destaca el Seguro de Salud de Clase Media; el Seguro y Subsidio de Dependencia incluidos en la Reforma de Pensiones, en los cuáles resulta fundamental avanzar para asegurar un apoyo a largo plazo a los sectores medios de nuestro país; y Seguro para trabajadores independientes. El llamado es a trabajar unidos por la pronta aprobación de proyectos de ley que permitirán implementar instrumentos para seguir haciendo frente a los riesgos que están afectando a las familias chilenas, como el Seguro para Trabajadores Independientes y la ley que crea el Sistema Clase Media Protegida para asegurar un apoyo permanente e institucionalizado a este segmento.

La película francesa Les Voulers ("Los Ladrones", 1996) describe un triángulo amoroso peligroso. Un hombre y una mujer disputan al amor de una joven ligada a una banda de delincuentes. Los dos personajes rivales pactan unirse para rescatar a la joven que ambos aman, y una vez que ésta se encuentre a salvo, continuarán la disputa sentimental y que gane el mejor.

Este triángulo cinematográfico propone la comunión de esfuerzos para el bien común, sin abandonar los aspectos identitarios de los personajes. Y este punto es clave para entender la esquiva unidad que el gobierno de Sebastián Piñera tanto clama y dice perseguir. Cuando los problemas arrecian y se expanden más allá de las capacidades resolutivas, o los problemas del país se complejizan y las posibles soluciones resultan esquivas, emergen los llamados de la autoridad.

Es posible que el gobierno no comprenda lo que es unidad en política hoy. La unidad de los amantes rivales de "Los Ladrones" ofrece algunas posibilidades de significado y acción a la unidad nacional, básicamente para entender que, si el oficialismo pretende llegar a ella para vencer la pandemia, no puede neutralizar a la oposición en sus críticas y demandas, a la hora de formular propuestas. La unidad no puede lograrse a expensas de la identidad del otro y, por ende, del total del colectivo. Respondemos a los llamados de unidad que hace el gobierno, aportando sin reservas nuestra identidad crítica y fiscalizadora, para remediar omisiones o equivocaciones, y nuestras propuestas para acrecentar el bienestar de la población.

En estos últimos días constatamos que Chillán no registra datos sobre la incidencia de los virus respiratorios que anualmente se incluyen en la vigilancia epidemiológica. El gobierno local debe aceptar la crítica y dar explicaciones por esta omisión, pues complica la evolución del esfuerzo colectivo por combatir la patología viral respiratoria general en la comunidad, y la Covid-19 en particular.

En otras ciudades chilenas ya se ha detectado la infección por virus respiratorios, incluyendo el virus respiratorio sincicial (4%) y el adenovirus (40%), siendo este último más temido, pues es tiene mayor letalidad en niños, y sus severas consecuencias crónicas, según la variante infectante. Y aunque la circulación del virus sincicial en esas otras ciudades ha sido extrañamente baja (4%), también está asociado a neumonía en adultos (9%) y bien podría ser un factor agravante del Covid-19.

Hoy es más necesaria que nunca la participación de la oposición en la mesa Covid-19 de Ñuble. Hasta hoy la autoridad regional no reconoce nuestra identidad ñublensina, nuestra vocación por ayudar a la población, y nos excluye. Aportaríamos crítica, fiscalización y propuestas. Como en la película, propongo que juntos pongamos a Ñuble a salvo, y cuando llegue la contienda electoral, que gane el mejor.

Jorge Fernández Vargas

Médico PhD en Inmunología, Presidente (s) del PS en Chillán