Casinos 2.0: adaptándonos a los cambios
La aparición del covid-19 en Chile, y en el mundo en general, ha provocado que nos replanteemos la manera en que hacíamos las cosas rutinarias. La seguridad y la salud se han convertido en la pieza angular de todas nuestras actividades cotidianas. Las simples dificultades que anteriormenente nos cuestionábamos han pasado a un segundo plano.
Hoy en día las compañías de servicios como Sodexo están cumpliendo un rol mucho más preponderante, que es el de alimentar a la primera línea de salud y a todas las empresas que mantienen el funcionamiento normal del país. Nuestros servicios se han tenido que adaptar a esa nueva realidad y estamos seguros de que nuestro actuar genera valor en la actividad de todas aquellas personas que a pesar de la crisis tienen que trabajar de manera presencial.
Es por esto que, hemos cambiado la forma en que hacíamos las cosas enfocándonos en las necesidades de nuestros colaboradores, consumidores y clientes. Ahora los sitios nacionales operan en base a los aprendizajes adquiridos por el grupo Sodexo en otros países y basados en las normas de salud recomendadas tanto por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como también por las autoridades de salud de nuestro país. Con medidas que van desde la distancia social hasta reforzar nuestras minutas alimenticias con materias primas que aportan vitaminas, proteínas y nutrientes para mantener alerta y activo nuestro sistema inmunológico.
Sin duda son tiempos difíciles y de cambio permanente, todos tenemos que adaptarnos a esta nueva forma de vivir. De todas maneras, nuestro objetivo sigue siendo el de entregar servicios de alimentación, junto a nuestros equipos de cocina, aún en áreas críticas como la primera línea de salud.
Francisco Layera Chef Ejecutivo Corporativo de Sodexo
No olvidemos a Carlos Condell
Sin ninguna duda el nombre de Arturo Prat Chacón es sinónimo de patriotismo para todos los chilenos, su sacrificio en medio del Combate Naval de Iquique en el año 1879 lo catapultó a la galería de los chilenos destacados que dieron su vida por su patria, hecho no solamente destacado en Chile, sino que también en el mundo, basta recordar que en 1985 la Academia Naval de Japón en la isla Tajimo rindió tributo a quienes consideró los tres más grandes héroes de la historia naval en el mundo, nuestro Capitán Arturo Prat, Almirante Nelson (inglés) por Trafalgar y el Almirante Togo (japonés) por Tsushima, inmortalizándolos con los respectivos bustos…, sin embargo, si nos remitimos a los hechos ocurridos en aquel 21 de mayo de 1879, hubo otro chileno que también el destino le tenía reservada su presencia en la historia grande de Chile, Carlos Condell De La Haza comandante al mando de la goleta Covadonga, quien puso toda su inteligencia y sagacidad para lograr encallar a la poderosa fragata blindada peruana Independencia en el Combate de Punta Gruesa, obteniendo para Chile un verdadero triunfo al dejar fuera de combate una parte importante de la marina peruana, situación que junto a la gesta de Iquique marcaron el comienzo del triunfo de Chile en la Guerra del Pacífico. Tal vez el arrojo y la inmolación de Prat hace que todas las miradas de los chilenos hasta el día de hoy se fijen en él como héroe nacional, por lo que Carlos Condell ha permanecido siempre a la sombra, vaya de mi parte un justo homenaje para nuestro Comandante Carlos Condell De La Haza, que al igual que Prat dejaron muy en alto el nombre de Chile como personas y miembros de nuestra gloriosa armada….
Luis Enrique Soler Milla
Sobre el bien común
Desde pequeños hemos tenido una idea sobre lo que es el bien común, sin embargo, la presente crisis hace preguntarnos ¿realmente los chilenos/as entendemos el bien común? Puede ser que solamente estamos en presencia de una mera idea declarativa carente de profundización.
La pandemia ha puesto en evidencia cuales son nuestras principales necesidades cotidianas, y no me refiero a las básicas. Más bien, a las que giran en torno a la necesidad del consumo por sobre la priorización del bien común de cuidarnos, reflejado en el aumento significativo de contagiados.
Pareciese ser que nuestra idea de bien común no va direccionada hacia el bien de una mayoría, sino más bien a los intereses individuales de cada uno y es que es inevitable no pensar con detención en esto, siendo que son nuestros adultos mayores los que se encuentran con una mayor desventaja ante el covid-19, bajas pensiones y un Estado que no regula una salud digna. Pareciese ser entonces que son menos merecedores a vivir que los jóvenes, relegados a su vez por los avances de una sociedad de consumo y contemporánea.
Es entonces, la idea de bien común entendida como el bien de la mayoría o los intereses individuales de una minoría.
Gustavo Troncoso Tejada