Tatiana Aular Aguirre
L a Asociación de Centros de Ski de Chile, de la cual Nevados Chillán es miembro, presentó ante la Subsecretaría de Turismo y Deporte un documento con una propuesta de protocolo de seguridad para prevenir el covid- 19, dentro de los principales centros de práctica de ski que funcionan en el país y que son parte esta agrupación.
En este tenor Manuel Dinamarca, gerente general de Nevados Chillán, declaró que como gremio no se pueden quedar de brazos cruzados ante la realidad mundial, pero lo primero que debe suceder es que se cuente con autorización de la autoridad sanitaria para el reinicio de las actividades.
Ante ello "trabajamos un protocolo a nivel nacional, que se ha ido adecuado a las circunstancias, a lo que nosotros creemos que podría llegar a pasar, que obviamente, primero pasa por las normativas del Ministerio de Salud y también todas las indicaciones de seguridad. Nosotros estamos avanzando en los protocolos de algunas medidas que se deben ir revisando en la medida que se vayan incluyendo más cosas".
Además Dinamarca informó que este primer ejemplar de trabajo que está conformado por 44 páginas, "está en revisión para ser entregado a los alcaldes de las comunas donde hay centros de ski, de montaña y recreacionales a nivel nacional. En los próximos días queremos hacerles llegar estos documentos al resto de las autoridades de Ñuble", en este sentido vale comparar y recordar el procedimiento con el protocolo de bioseguridad propuesto por la Cámara de Comercio de Ñuble, a las autoridades sanitarias y seguridad en la región, ante de la reapertura de los locales en las comunas de Chillán y Chillán Viejo.
Con respecto al trabajo que adelante la Asociación de Centros de Ski de Chile, la directora regional de Sernatur en Ñuble, Heidi Inostroza, indicó "que a nivel nacional, ellos han estado trabajando, recibiendo inquietudes, en un trabajo colaborativos con instituciones nacionales, recogiendo las experiencias internacionales, para poder contar con todas las recomendaciones necesarias para cuando, al llegar el momento de reaperturar sus espacios puedan hacerlo cumpliendo con todos aquellos lineamientos que nos han ido entregando la autoridad sanitaria, así como todas las medidas que requieran estos centros en nuestra región, para brindar una reactivación segura del turismo en Ñuble".
Destacó que a la fecha "en la industria del turismo nos encontramos en un trabajo colaborativo del Servicio Nacional del Turismo, a nivel nacional y regional, con la Subsecretaria de Turismo, con el Ministerio de Economía y Salud, y con los gremios de los distintos subsectores del turismo para ir preparándonos en todo este proceso gradual, paulatino de lo que va a hacer la reactivación del turismo en Ñuble".
Inostroza destacó que "debemos comprender que estamos en una pandemia, esto está evolucionando, no podemos adelantarnos a lo que va a ocurrir en las próximas temporadas, y esto está sujeto a la evolución sanitaria. Nosotros esperamos que el turismo en Ñuble empiece su reactivación lo antes posible, todas las proyecciones nos habla que puede ser a partir de septiembre".
En tanto Robert Betancourt, administrador de la Municipalidad de Pinto, confirmó tener conocimiento sobre el protocolo de seguridad que ha diseñado la Asociación de Centros de Ski de Chile, el cual pudiera hacerse efectivo "bajo la eventualidad que la autoridad sanitaria les permita trabajar".
Además, confirmó que el alcalde de Pinto, Manuel Guzmán, recibió el libro que contiene las propuestas de medidas de bioseguridad, pero aún el mismo no ha sido consignado de manera formal.
Resaltó que como Municipalidad están en el deber de atender "las inquietudes de los empresarios de cabañas, o de centros turísticos que hoy están cerrados por decreto alcaldicio".
Además Betancourt, compartió, que la Municipalidad está trabajando en "una ordenanza que va en la línea de establecer protocolos, todos sujetos a la autorización de las autoridades sanitarias".
Los tres voceros coincidieron que trabajan desde sus espacios de responsabilidad, con la finalidad de diseñar, crear y contar con los protocolos de funcionamiento de bioseguridad necesarios en los distintos niveles de los prestadores del servicio, ante un eventual levantamiento de la medida de cierre para los espacios turísticos.