Con una agenda que consideraba una serie de ítems, tales como inspecciones y verificación de estados de avance en obras, el subsecretario de Obras Públicas, Cristóbal Leturia, visitó la Región de Ñuble. La autoridad del MOP, con precauciones sanitarias de por medio, se refirió al avance de obras como el puente Pinto-Coihueco, para el que confirmó que su fecha de término se retrasó un mes respecto de lo estipulado producto de la emergencia sanitaria.
-¿De qué tratan los beneficios en materia de Agua Potable Rural, y cuántos serían los beneficiados en Ñuble?
-El covid es la crisis más grande que nos ha tocado vivir como generación, eso viene de la mano con una crisis social y económica que también es profunda, con altísimas cifras de desempleo, con la gente del sector rural sufriendo, y por lo mismo los APR también están sufriendo; son sistemas que viven del mes a mes, del aporte de sus usuarios, fundamentalmente con pagar los costos de operación, pagar las cuentas, los sueldos de los operarios. Al ver disminuidos los ingresos, se corre el riesgo de que el proceso de operación de los APR no pueda completarse en este período, y se creó un bono que busca que los sistemas de APR reciban un ingreso fresco con tal de pasar este mal momento. El monto depende exclusivamente de la cantidad de arranques que tenga el APR. Hoy en Chile tenemos más de 2 mil 800 sistemas desde Arica a Tierra del Fuego, y este no es un bono concursable, sino que para todos. En Ñuble tenemos aproximadamente 200 sistemas de APR, es una región de las más rurales de Chile, y la cantidad de sistemas APR son considerables.
-¿Cuál es el estado de las obras dependientes del MOP? ¿Ha habido paralización?
-Siguen su vuelo, han tenido algún grado de ralentización pero más bien menor respecto de su programación inicial, y que tiene que ver con la gran crisis de salud que estamos viviendo. Pero en este momento vamos recuperando el ritmo de las obras públicas y ninguna ha sido paralizada. Estuvimos en el puente Pinto-Coihueco, uno muy estructurante que le sirve a toda la región, este puente termina de estructurar una ruta, se trata de uno de dos vías, con un tremendo soporte y larga vida útil. Este puente se consideraba terminar en su construcción en diciembre, y hoy estimamos que terminará en enero. Es una ralentización razonable.
-¿Cuáles son las medidas y protocolos para los funcionarios y trabajadores en las obras?, ¿Se descartan contagios en faenas?
-Una de las inspecciones más importantes fue que todas tuvieran implementadas sistemas para minimizar el riesgo de contagio al interior de las faenas, son normas muy estrictas, y pudimos corroborar que las medidas han sido tomadas, y han permitido que ningún funcionario de ninguna de las obras del MOP hayan sido contagiados al interior de las faenas.
-Su visita además consideraba una inspección de obras en el río Cato.
-Claro, es un río al que se le extraen áridos. Se trata de un afluente del Río Ñuble, que genera ripio muy rico para la construcción, entonces hay una empresa con permiso para sacar estos ripios, pero construyó obras ilegalmente, construyó un puente, y nosotros vamos a echar abajo el terraplén, porque el cauce es del río y va a volver a ser del río.
-¿Cuál es la situación de los tres embalses contemplados para Ñuble en el Plan Nacional de Embalses?
-Ñuble tiene gran calidad de tierra, tiene temperatura adecuada para la agricultura, una de las grandes potencias agrícolas del país debiera ser Ñuble. Para eso debe contar con la disponibilidad y seguridad hídrica suficiente para cambiar su tipo de agricultura, y para eso se trabaja en estos tres embalses. Digámoslo claro: los embalses son obras complejas, de largo aliento; este Gobierno ha mostrado una decisión y visión de llevar a cabo estos tres embalses a como dé lugar. Hemos sabido que en el caso de Punilla, el más grande de los tres y uno de proporciones gigantescas que cambiaría la disponibilidad hídrica del cielo a la tierra, le cambiará la vocación a la región, y entendemos que proyectos de alta ingeniería, de altísima inversión, en el arranque, podrían tener problemas, y es lo que hemos vivido en el caso de Punilla. La empresa que estaba construyendo es una italiana con mucha historia, pero justo tocó la mala suerte que entró en problemas cuando se empieza a construir el embalse. Se derivó en asuntos legales, pero estos van avanzando; lo que quiero decir es que si los problemas hacen imposible la construcción del Punilla, entonces será con otra empresa, y si no es una concesionaria, será con fondos públicos. Será como sea, pero Ñuble tendrá el Embalse Punilla para regar sus tierras.
-¿Ha tomado fuerza la idea de construir Punilla con fondos del Estado?
-Es una posibilidad, pero yo diría que lo que tiene fuerza es que Punilla se construya. Con qué fondos, es una segunda derivada menos importante, dependerá de las condiciones del momento en que se tome la decisión, pero hoy no es relevante saber cuál es el mecanismo de financiamiento, porque cualquiera fuese, el Embalse Punilla se va a construir.