"Que un cabro de mi edad haya estado rozando los Juegos Olímpicos es como un aliento súper grande"
DYLAN ITURRA. En el contexto pandemia, para este taekwondista el clasificatorio forma parte de uno de los hitos que lo motivan a entrenar de manera disciplinada y seguir superándose.
Para el chillanejo Dylan Iturra de 18 años y quien es seleccionado nacional de taekwondo categoría adulto, la pandemia ha significado un tiempo de reflexión, disciplina y enfoque. Ya terminó la enseñanza media y con la llegada del coronavirus sus planes para el 2020 no cambiaron tanto. En estos momentos, se encuentra entrenando a full con uno de sus compañeros y amigo, Sebastián Navea, el capitán de la selección chilena de la disciplina, pero también ha usado este periodo para decidir bien cuál será la carrera que quiere estudiar.
"En un principio partimos entrenando en casa de nuestro profesor de taekwondo que tenía un espacio para nosotros, pero nos complicaba porque no teníamos tatami. Ahora, con Sebastián nos organizamos mejor. Le pedimos ayuda a la Municipalidad de Chillán y nos pasaron un galpón donde estamos entrenando, con todas las medidas correspondientes. Los horarios de entrenamiento van cambiando, hay veces que entrenamos en las mañanas y luego en la tarde. Ya nos adueñamos del espacio, lo sentimos de nosotros ya que está mejor equipado", detalla Iturra.
Cuando comenzó el brote del virus, el taekwondista estaba en una gira europea y preparándose para ir al clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Tokio junto a otros seleccionados de la disciplina, instancia que por consiguiente se llevó a cabo, pero a puertas cerradas y con restricciones. "Cuando terminó nos volvimos a Chile y ese día, justo, esa misma noche, pasaron horas y el paso a nuestro país se cerró. Estuvimos a punto de quedarnos sin pasar".
Después de ese viaje, el clasificatorio se volvió uno de los hitos de su vida que ahora lo impulsan a superarse, aunque no quedó seleccionado, añade qué, "di el máximo e igual eso es un recordatorio a uno que si quieres puedes llegar a alcanzarlo. Es que el simple hecho de pensar que un cabro de mi edad haya estado rozando los Juegos Olímpicos es como un aliento súper grande. Pero en realidad cada avance lo tomo como un empuje para el día a día".
Así es como las artes marciales le han enseñado a que debe ser consciente de cada uno de sus procesos, tomar cada una de las situaciones como aprendizajes e ir con calma para tomar buenas decisiones. Asimismo, se cuestiona la decisión de elegir que quiere estudiar, por eso se tomó este año para informarse y así ver la mejor opción. "Igual es complicado, aun no estoy 100% decidido, pero si estaba viendo la posibilidad de ingresar a nutrición o buscar algo relacionado con el deporte, es que quiero ayudar a la gente", dice.
Antes que el covid-19 invadiera nuestro país, este joven, estaba viviendo en Santiago, lejos de su familia, proceso que le sirvió para darse cuenta del valor que tiene estar cerca de ellos y sobre todo, ahora con el confinamiento. "Ahora que volví a casa he podido compartir mucho más con mi familia, lo que me ha ayudado a ver las personas que tengo a mi lado, ver lo positivo de estar encerrados. Aunque igual es estresante, por el hecho de no poder salir, en realidad tiene sus pros y contras", comenta Dylan Iturra.
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