Las regiones y la recuperación económica
La pandemia causada por el covid-19 ha puesto en evidencia que un país como Chile, cuyo 57% del PIB depende del comercio internacional, no puede restarse de los procesos que fomentan el libre comercio y la libre circulación de mercancías y servicios. El comercio exterior es hoy, sin duda, una herramienta clave que nos ayudará en nuestra futura recuperación.
A pesar del difícil contexto internacional en 2020, y a la caída de 12,5% del intercambio comercial en el periodo entre enero y julio, hay cifras en estos meses últimos que vale la pena destacar: por ejemplo, tuvimos una buena noticia gracias al crecimiento, por segundo mes consecutivo, de las exportaciones chilenas en julio de 2020, con ventas al exterior por US$5.841 millones.
Otra noticia destacable: 1.402 empresas chilenas exportaron por primera vez, en sectores como frutas frescas, servicios y maquinarias, registrando un récord en exportaciones de alimentos congelados -a China, Estados Unidos y Unión Europea (UE)- y orgánicos -a la UE, Canadá y Australia, principalmente- como resultado de los cambios alimentarios globales provocados por la pandemia.
Además, este año, más de 900 productos nacionales alcanzaron su máximo valor exportado en los últimos cinco años, entre ellos maíz para la siembra, puré de tomate, copos de avena, puertas de madera, inulina, ajos frescos, botellas de vidrio, queso gouda, avellanas, medicamentos.
Todos ellos son productos representativos de la oferta exportable de todo el país, donde las regiones cumplen un rol fundamental en contribuir a recuperar las cuotas de mercado que se han perdido producto de la situación sanitaria mundial.
En esa línea, desde subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales trabajamos para fortalecer la integración y el rol articulador de la institución en apoyo a los exportadores.
La semana pasada, por ejemplo, el Senado aprobó el Acuerdo de Libre Comercio Chile-Brasil y también el Presidente Sebastián Piñera, junto a su par ecuatoriano Lenin Moreno, firmaron el Tratado de Libre Comercio Chile-Ecuador.
Además, una de las iniciativas orientadas a escuchar las necesidades de nuestros exportadores de primera fuente son las mesas de Comercio Exterior Regionales (Comex) a lo largo de todo el país, las que han reunido a representantes del mundo público y privado de distintos sectores y que han permitido evitar interrupciones en los procesos de exportación e importación.
Estamos seguros que trabajando en conjunto podremos hacer una mejor política comercial y fortalecer la capacidad exportadora de las regiones. Y en este escenario, los números lo demuestran. Contar con una extensa red de tratados de libre comercio, así como acuerdos para la facilitación del comercio de productos y servicios; en conjunto con nuevas aperturas zoo y fitosanitarias para nuestra oferta exportable en los mercados del mundo, constituyen factores decisivos para que nuestros emprendedores puedan abrirse paso en medio de la crisis.