"El desafío es aplicar los mecanismos correctos para proteger el empleo"
ANÁLISIS Autoridad indicó que previo a la pandemia, el mercado laboral local venía mostrando indicadores positivos, como un alza sostenida en la participación femenina.
Han sido meses particularmente complejos en diversos frentes, asegura respecto a este año la seremi del Trabajo y Previsión Social de Ñuble, Yeniffer Ferrada. Es que la pandemia del Covid-19 ha repercutido, de forma inédita, en la situación económica y del empleo en la región y el país. Sin embargo, cree que, como en otras ocasiones, el escenario se puede revertir si hay voluntad desde todas las instituciones y actores.
Según la última Encuesta Nacional de Empleo (ENE), elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el trimestre móvil mayo-julio, Ñuble anotó una tasa de desocupación de 12,1%. En relación a los últimos doce meses, la cifra representa un alza de 2,3%.
¿Eran cifras esperables?
-Lamentablemente, sí. Nosotros hemos estado todos los días, desde el inicio de la pandemia, recorriendo el territorio, reuniéndonos con los trabajadores, con las empresas, y tomando el pulso de lo que ha significado esta crisis. Los necesarios confinamientos han tenido impacto en la actividad económica y eso se ve reflejado, en acto seguido, en el empleo. Hace dos meses el tema era que habían bajado muy notoriamente los ocupados y también la fuerza laboral. Durante estas últimas semanas había comenzado a recobrar movimiento, pero las oportunidades de encontrar empleo siguen, en muchos casos, estancadas.
-¿En los próximos reportes se podrá ver un aumento?
-En el Gobierno estamos en una posición realista, de no crear falsas expectativas o lanzar cortinas de humo. Evidentemente, en el caso de la capital regional y Chillán Viejo, que volvieron a la Fase 1, habrá un impacto en materia de desocupación, lo que tomará tiempo para que se revierta. Hay, además, un porcentaje importante de inactivos, vale decir, personas que están fuera de la fuerza laboral. En adelante, el desafío es aplicar los mecanismos correctos para proteger e incentivar el empleo, mediante subsidios u otros.
-¿Habrá anuncios concretos al respecto?
-Claro, cuando el Presidente Piñera anunció el Plan de Reactivación incluyó como una materia central el hecho de materializar iniciativas que apunten, justamente, a conservar puestos de trabajo y a incentivar nuevos, en la medida que las condiciones sanitarias lo permitan. En eso se ha estado trabajando a toda máquina y en los próximos días se conocerán los detalles.
¿En Ñuble esto se complementará con proyectos regionales?
-En el Gobierno Regional hemos realizado un trabajo intersectorial que tiene como principales objetivos apoyar decididamente a las pymes y el empleo que generan. Además, las obras públicas también tendrán un rol importante, así como la inversión privada. Previo a la pandemia, y particularmente tomando la última década, los indicadores de empleo regional venían evidenciando cifras positivas. La participación femenina venía creciendo de manera sostenida, pasando de ser el 37% del total de ocupados, a más del 41%. La formalidad también creció en más de 8% en el mismo periodo. Eso, claro está, dentro de una marcada estacionalidad producto de las labores agrícolas, aunque con otros sectores, como el de la construcción, en ascenso.
-¿Cómo toma las críticas cuando se dice que el Gobierno ha llegado tarde con las ayudas?
-Las críticas son legítimas, pero hay que mirarlas en perspectiva e ir a los datos. Desde que se decretó el Estado de Excepción Constitucional, en marzo, el Gobierno ha establecido y puesto en vigencia más de 50 medidas contenidas en una red de protección con una inversión fiscal histórica. Si uno mira a los países del continente, es muy difícil encontrar una red de protección de esta envergadura. Son cerca de 8 millones de personas que han accedido a ayudas y beneficios a través del Ingreso Familiar de Emergencia, la Ley de Protección del Empleo, el Bono Clase Media, los créditos Fogape, entre muchos otros. Esta crisis sanitaria ha sido un desafío a nivel de Estado.
-En cuanto a la Ley de Protección del Empleo, la norma necesitó extenderse. ¿Pensaron que el peak de la pandemia sería más breve?
-Esta es una realidad para la que ningún país del mundo estaba lo suficientemente preparado, por lo que hemos tenido que adaptarnos. En tal sentido, la Ley de Protección del Empleo ha sido un instrumento pertinente para lo que fue creado; evitar la destrucción de fuentes laborales y que los trabajadores puedan obtener ingresos de los fondos de cesantía individuales y solidarios. En Ñuble, hay cerca de 11.000 trabajadores acogidos, lo que representa alrededor del 6% del total de la fuerza laboral. Con las mejoras ya en régimen, aumentan los montos y meses, se extiende la aplicación hasta febrero de 2021, y más personas podrán acceder, en caso de requerirlo, al haberse flexibilizado los requisitos de entrada al Seguro de Cesantía. También se incorporan las trabajadoras y trabajadores de casa particular.
-¿Cómo se ha dado la aplicación del Formulario Único de Fiscalización en la región?
-De forma bastante orgánica, puesto que este formulario es parte del Plan "Paso a Paso Laboral" y se ha puesto a disposición pública, tanto para trabajadores como para empleadores. En este caso, las fiscalizaciones están a cargo de la Dirección del Trabajo y la Seremi de Salud, particularmente en puntos vinculados al artículo 184 del Código del Trabajo y a la Resolución Exenta 591 del Minsal. Los procesos se han llevado a cabo en comercios, servicios y faenas, y el espíritu es que nadie caiga en vulneraciones aludiendo a un desconocimiento de las medidas. Eso sí, nuestra principal misión es poder velar por el bienestar e integridad de los trabajadores.