Mateo Mendoza: "La natación es lo que más me ha costado retomar"
DEPORTES. El destacado triatleta local relata que ya volvió a los entrenamientos presenciales con su club Universidad Católica. Además, cuenta las horas para rendir la PTU.
El prolongado tiempo de cuarentena ha sido, por muy poco, fatal para varios deportistas de alto rendimiento. Si bien la mayoría se las ingenió para seguir entrenando en la intimidad de su hogar, definitivamente no es lo mismo de manera presencial y en grupo.
Ese es el caso del prometedor triatleta chillanejo Mateo Mendoza, quien hace poco armó sus maletas para trasladarse nuevamente a la capital. Esto, principalmente porque allá, tras varios meses de confinamiento obligatorio, abrieron el complejo deportivo de San Carlos de Apoquindo, sede del Club Universidad Católica al cual pertenece.
Lo anterior le ha permitido retomar de a poco los entrenamientos en persona, aunque con casi nula certeza de futuras competencias. Según cuenta el muchacho, poder utilizar la piscina fue la razón más importante que lo llevó de vuelta a Las Condes, donde llegó hace casi tres semanas atrás.
"Estaba en Chillán, porque como no se podía entrenar en grupo y las instalaciones de la UC estaban cerradas, no cambiaba mucho. En tanto, ahora se puede comenzar a nadar, algo que en mi casa no podía realizar", destaca.
Obviamente, el proceso de adaptación a las prácticas normales ha sido duro, cuenta Mateo. "Antes de esto, uno encontraba normal pedalear varios kilómetros y nadar todos los días. Con la cuarentena traté de mantenerme lo más parecido con entrenamientos, pero ya cuando uno vuelve completamente, se siente. Me ha costado volver esta semana, pero ya de a poco vamos acostumbrándonos, sobre todo en la piscina", asegura.
De hecho, este último tema de los chapuzones le ha complicado un poco más. Y es que claro, en casa es casi imposible imitar a la perfección el nado, sobre todo cuando las exigencias de competencias son de un nivel mucho mayor que el promedio.
"Desde los siete años que nado y nunca paré de hacerlo tanto. Yo siempre lo encontraba normal, tanto así que es lo que más me gusta. Entonces, cuando volví ahora, me sentí como esa gente que nunca se mete al agua y queda toda cansada. Esa sensación fue muy rara", confiesa el chillanejo.
Ante aquel panorama, vale destacar que la única competencia programada hasta el momento es una copa continental, aplazada para enero próximo. "Esa es como mi única fecha clara dentro de toda la incertidumbre. Este mes será de control y chequeos médicos en Católica, esperando que todo mejore y en el verano comenzar las carreras calendarizadas", sostiene.
Responsable
Más allá que todavía no se encuentra la cura para el covid-19, hay quienes han hecho caso omiso a las indicaciones de la autoridad sanitaria. En contraparte, el propio Mendoza reconoce que ha sido una persona meramente responsable, que ahora aprovecha a fondo cada minuto con sus compañeros de equipo.
"Yo fui bastante consciente con la cuarentena. El primer trote fue como en agosto. Por más que viera que la gente salía, estuve entre tres a cuatro meses encerrado. Un descuido puede dejar la embarrada. No salía por precaución y porque no se podía. Además, mi mamá es médico, así que me tenía cortito", relata entre risas.
En esa línea, comenta que, ahora más que nunca tiene ganas de superarse. "Por más que mi deporte sea individual, entrenar en equipo hace diferencia. Somos entre 10 a 12 triatletas que siempre estamos ejercitándonos juntos. Cuando uno lo hace solo, depende de cada uno nomás. En cambio ahora hay otra sensación", agrega.
Cuenta regresiva
A veces, compatibilizar deporte con estudio podría resultar una tarea difícil, sobre todo en las circunstancias actuales. Para Mateo todo ha sido un desafío, sobre todo porque a fin de año tiene la gran oportunidad para entrar a estudiar Medicina, lo que siempre ha querido.
"Como combiné ambas cosas, puedo decir que la actividad física ha sido una forma de despejarme. Eso fue bacán. Ahora en realidad ha sido un poco más complejo, ya que estoy más cansado y no he tenido las mismas horas de descanso de antes. Eso sí, es cosa de tener ganas y organizarse bien. Si no quisiera, no entrenaría", explica el joven Mateo.
Asimismo, asegura que "fue complejo acostumbrarse al preuniversitario, pero ya estamos mejor. Faltan pequeños detalles, pero estoy cerca de lograr el objetivo e ingresar a lo que quiero", sobre la rendición de la PTU que será el próximo 4 y 5 de enero.
3 semanas va a cumplir en la capital el joven triatleta, quien volvió a entrenar al complejo deportivo de San Carlos de Apoquindo.
7 años tenía Mateo cuando comenzó a nadar. Desde esa edad que no ha parado de hacerlo. Ahora está retomando la técnica.