Enoturismo se reinventa para funcionar de cara al verano
ECONOMÍA. Empresarios del rubro relataron distintas realidades, con un denominador común: destacar la producción local y cómo dar valor a la vinicultura en la región.
El enoturismo es aquel tipo de actividad enfocada en las zonas de producción vinícolas, y que en Ñuble, con profusos y reconocidos viñedos, toma fuerza. Pese a la pandemia, empresarios del rubro mantienen en pie la labor, adecuándose y reinventándose en medio del contexto actual. Los productores de la zona destacan por la alta calidad de sus vinos, y es por ello que turistas de hasta Europa reconocen aquello y viajan hasta Ñuble para ser testigos de lo anterior.
Casi a 20 kilómetros de Chillán, Enzo Pandolfi, desde la viña Pandolfi Price, recibió por última vez a visitantes el 22 de febrero del presente año. De ahí en más la actividad ha debido cesar, pese a que proyecta positivamente el enoturismo en la zona. Para la fecha mencionada, se trató de un grupo de productores de vinos de Austria.
"Nosotros en su minuto recibimos a varios grupos, amantes del vino, algunas empresas que realizaron varias visitas. Lo último fue recibir a un grupo de turistas austriacos, un grupo de productores de vino, y después de eso, lamentablemente, quedó todo parado. Nosotros tenemos una cabaña incluso para recibir gente local, alcanzamos a recibir a algunas personas, pero llegó la pandemia y el enoturismo está virtualmente congelado", declaró Pandolfi.
La viña Pandolfi Price destaca por sus tours por los viñedos, degustación de todos los vinos, aun cuando también dependerá del tamaño del grupo. "Hemos hecho de todo un poco, ha habido caminatas cortas, más largas, dependiendo del tiempo de los clientes; hay picoteos, algunos contundentes, también hay almuerzos, casi onces, porque llegan a las 10, 11 de la mañana, y se termina tarde", dijo. Los vinos con los que cuenta la viña son syrah, sauvignon blanc, chardonnay, pinot noir, entre otros, aun cuando también existen cepas país.
Itata
Desde Coelemu, los socios Gonzalo Llanos y Giuliano López, en agosto del año pasado le dieron vida al proyecto Itata Expediciones, que busca rescatar de la gastronomía endémica del territorio y realizan guías por sus principales rincones. La propuesta posee hincapié en el uso de productos silvestres, cocina en olletas, a la usanza de los antepasados. "Mezclamos la gastronomía y la operación turística de algunas rutas que hemos diseñado con el tiempo", explicó Gonzalo Llanos.
Expedición Itata, desde antes de la pandemia, cuenta con rutas definidas donde se realizan guías que consideran servicios como tour de vinos, full day de vinos, ruta de cicloturismo, taller de cocina consciente, y travesía del pipeño, siendo esta última una que recientemente llamó la atención de empresarios turísticos del Valle Las Trancas. "Estamos mostrando eso. Nosotros trabajamos con 18 productores del Valle del Itata (…) Nosotros aparte de Itata Expediciones, en el verano lanzamos un bar de vinos naturales en Guarilihue, que es como nuestro centro de operaciones. Vino la pandemia, e igual fue súper fuerte para nosotros, y lo que hicimos, por una parte, fue vender vinos a través de internet, y en cuanto a los tours, esperar a que pasáramos a una fase que nos permitiera trabajar más posiblemente", dijo Llanos, quien añadió que ya con Coelemu en Fase 3, lo que han hecho es adaptarse a dicha realidad, considerando grupos de turistas más reducidos. "El otro día hicimos una cabalgata para una familia de tres personas", dijo.
Respecto de las proyecciones para el enoturismo, Enzo Pandolfi, a propósito de los protocolos y los avances en las fases y con ello el retomar las actividades productivas, explicó que como viña ya se encuentran preparados, y que incluso para noviembre del año próximo, si la contingencia lo permite, tienen agendado la realización de un matrimonio. "En el viñedo hemos hecho cerca de cuatro matrimonios, tenemos otro para noviembre del año que viene", explicó.
Los empresarios del rubro destacaron que la actividad es una que responde al lema de "de Ñuble al mundo", pues se considera frecuentemente la visita de extranjeros. Desde Itata Expediciones explicaron la importancia de trabajar con vinos de la zona, mientras que desde la Seremi de Economía de Ñuble, el titular del ramo Roger Cisterna, explicó que "el desarrollo del enoturismo en Ñuble es un tremendo impulso para hacer crecer la región en el ámbito turístico, potenciando sus cepas patrimoniales, su geografía y productos endémicos que lo diferencian del resto de Chile".
"Aparte de Itata Expediciones, en el verano lanzamos un bar de vinos naturales en Guarilihue, que es como nuestro centro de operaciones. Vino la pandemia, e igual fue súper fuerte para nosotros".
Gonzalo Llanos
Itata Expediciones
Actividad en medio de la pandemia
El seremi de Economía, Roger Cisterna, sostuvo que el enoturismo es una de las industrias más golpeadas por la pandemia. Es preciso mencionar que el turismo a secas también es una de las industrias fuertemente afectadas, y acerca de posicionar las bondades del Valle del Itata, Cisterna, y en particular acerca del enoturismo, declaró que "esta industria es una de las más golpeadas por la pandemia, pero sabemos que paso a paso saldremos adelante y es por ello que debemos convertirnos en portavoces de todos los atributos que posee el Valle del Itata para que cuando estén dadas las condiciones, más personas nos visiten y se encanten de su entorno", dijo.