Defensas del rojo asumen que localía será clave en carrera por el ascenso
TORNEO. Tras casi ocho meses de abandono, mañana Ñublense volverá a pisar el césped del Nelson Oyarzún en un duelo clave ante Melipilla.
Canasta casi completa es la que sacó Ñublense en su periplo por el CAP de Talcahuano. Y cómo no, si es que de 18 puntos, sacaron 16 en limpio. Por supuesto, invictos y con un porcentaje por sobre el 90% jugando de local en esta primera rueda.
Pero si se trata de buscar una fortaleza altamente conocida, regresar al Nelson Oyarzún Arenas cae de cajón. El hospital de campaña que se emplazó por más de seis meses cesó sus funciones y, por ende, los Diablos Rojos tendrán la posibilidad de luchar por el ascenso en la cancha que más conocen.
Al menos, eso es lo que indican los propios pupilos de Jaime García. Por ejemplo, el lateral diestro de los rojos, Guillermo Avello, asegura que si bien se mantuvieron sólidos en el césped siderúrgico, la frase 'hogar, dulce hogar', se hace más necesaria que nunca.
"Se terminó invicto, solo se empató uno y se ganó todo el resto. Pero estar acá, a 10 o 15 minutos del estadio, es distinto. Jugar en tu casa, en tu cancha, es distinto. Ya la tenemos bien estudiada, es esponjosa y come piernas, como se dice. Tenemos que sacarle provecho a eso", explica el otrora jugador de Fernández Vial.
De hecho, son pequeños detalles que de pronto pasan desapercibidos, pero que desde ahora se suprimen con el regreso al Ñuble. "Aunque era un viaje de una hora o una hora y quince minutos, se hacía tedioso estar sin comer en el bus, o tener que hacerlo temprano y luego jugar, se hacía complicado", detalla el carrilero.
Ante aquel panorama, otro que alcanzó a sumar varios minutos en el NOA antes del parón por la pandemia es Nozomi Kimura. El ex zaguero de Santiago Morning no esconde su buena vibra por este anhelado regreso a Chillán
"Significa mucho volver a jugar al Nelson Oyarzún. Es nuestra casa, donde tenemos que hacernos más fuertes que nunca. Si bien nos fue bien en el CAP, en un estadio lindo y cancha que nos favorece, la verdad es que el trayecto nos complicaba un poco, porque teníamos que viajar el mismo día y eso cansa un poquito", justifica.
Además, complementa con que, "volver a nuestra casa nos hace tomar un poco más de confianza y saber que, el que entre ahí, tiene que matarnos para poder ganarnos. Estoy feliz de poder volver a jugar, sobre todo acá en Chillán".
Asimismo, luego de los trascendidos sobre un eventual retorno del público en la recta final del campeonato, las posturas son bien claras: el hincha es un jugador más, sobre todo cuando el equipo atraviesa un buen momento en puestos de avanzada.
"Es importante el apoyo de la gente. Aquí en Ñublense se hace sentir la localía, van al estadio sobre 3 o 4 mil personas. Y sobre todo si vas puntero o estás peleando algo, se llena de personas. Te da un plus extra, te motiva, se hacen sentir y el rival igual lo sufre", repasa Avello.
Vienen los potros
El último antecedente de este compromiso data de no hace mucho. Precisamente, el 27 de septiembre pasado fue el cruce de la primera rueda entre Melipilla y Ñublense. En aquel pleito llevado a cabo en el sintético de La Florida, los metropolitanos se impusieron por la cuenta mínima, con anotación de Gonzalo Sosa.
Sin embargo, para el cruce de mañana, hay dos antecedentes bien importantes que valen consignar. Primero, el equipo de Héctor Adomaitis viene de caer estrepitosamente en su último pleito disputado ante Deportes Copiapó. Por si fuera poco, los Potros sufrieron la baja -delicada- del volante Joaquín Montecinos, uno de los mejores valores del certamen y quien, en breve, será presentado como nuevo jugador de Audax Italiano.
De todas maneras, dicha realidad no interviene mucho en la interna de Ñublense. "No hay que mirar al rival por debajo de los hombros. Siempre he dicho que hay que jugar de igual a igual con todos, sea el último o el segundo. Si triunfamos en todos los partidos de local, sabemos que lograremos el objetivo que es ascender y salir campeones", afirma el también ex defensa de Independiente de Cauquenes.
En tanto, el futbolista de 24 años cierra con que, "si bien ellos vienen de perder y de ver irse a una de sus figuras, hay que darlo todo igualmente. Desde ahora en adelante, en la segunda rueda, todos los partidos son finales".
11.00 horas será el duelo entre los Diablos Rojos y Melipilla, en el regreso al Estadio Nelson Oyarzún de Chillán.
27 de septiembre fue la primera rueda entre Ñublense y Melipilla, donde este último superó por un gol a los locales.