
Recursos de festivales de verano de comunas se redestinan por la pandemia
MUNICIPALIDADES. De acuerdo al panorama sanitario que se vive hoy en la región de Ñuble, localidades como Cobquecura, Pinto, San Fabián y Quillón ya decidieron que no realizarán los tradicionales shows artísticos y fiestas criollas.
De cara a la pandemia, la realización de festivales de verano en las distintas zonas turísticas de la región de Ñuble se han visto suspendidos, primero porque esos eventos congregaban a mucha gente de diferentes puntos del país, situación que hoy está muy limitada y por otro lado, porque los dineros que se usaban para esos eventos se han tenido que destinar para mitigar nuevos gastos que tienen que ver con la situación sanitaria y la prevención de esta.
"La suspensión es debido a la contingencia que estamos viviendo, pero estamos esperanzados en que tal vez en algún punto podamos realizar algunas actividades de verano. De todas maneras, dependemos de la disposición sanitaria. Por otra parte, la mayoría de los fondos se han usado en relación al tema social, salud y prevención, para lo cual hemos gastado más de $50 millones, los que estaban destinados a actividades artísticas del año", comenta Manuel Guzmán, alcade de Pinto.
En tanto, el alcalde de Quillón, Miguel Peña, comenta que también ha tenido que redestinar los recursos que en años anteriores se usaban para festivales y fiestas costumbristas, usándolos para optimizar las medidas preventivas en el lugar. "Ha habido un gasto enorme en cuanto al control sanitario y tenemos que pensar que esto no ha terminado, porque podemos sufrir la segunda ola de contagios, entonces esos recursos están destinados para darle prioridad a la salud de nuestra gente, por lo mismo queremos remodelar las instalaciones de ingreso a la Laguna Avendaño".
Son $100 millones los que se ahorrarían por la suspensión de las actividades masivas de verano, monto que ocuparán en la activación de la laguna, la que contará con todos los protocolos sanitarios necesarios y así también para tener la posibilidad de hacer eventos, pero con poca participación, principalmente instancias recreativas y culturales con las agrupaciones de la comuna.
En Cobquecura la Fiesta de la Candelaria y otras actividades criollas que se realizaban igual se suspenderán, por lo que están planificando otras instancias que cumplan con la normativa y con una convocatoria limitada de público. "En este minuto podemos reunir a un máximo de 50 personas al aire libre, así que nos vamos a abocar quizás a hacer actividades en la playa. Ya estamos patrocinando instancias deportivas, tenemos pensado hacer un encuentro de rugby y varias otras más, de acuerdo como vaya evolucionando el plan paso a paso, tengamos la opción de contar con algún tipo de espectáculo al aire libre, en el anfiteatro que tenemos en la costanera", detalla Julio Fuentes, alcalde de Cobquecura.
Esta comuna tuvo un panorama muy parecido a las otras zonas, ya que tuvieron un desmedro económico, en que su presupuesto se vio disminuido en casi $300 millones que no fueron percibidos pese a estar aprobados, así lo indica Fuentes que "lo que invertíamos en verano que era alrededor de uno $70 millones no existe, estaban sólo considerados en el papel, por lo que aquí el quiebre fue tremendo y como comuna turística el que no exista la oportunidad de contar con actividades masivas en un momento es un alivio económico, pero no por ahorrar, sino que es plata que no tenemos y si se abriera esto de que pudiéramos congregar a más personas, tendríamos que obligadamente hacer shows, porque la verdad que no tendríamos como financiar".
El alcalde dice que una pequeña ayuda para poder realizar actividades, si es que se pudiese, vendría del acceso a fondos de cultura. "En total nosotros invertíamos en verano como municipio alrededor de unos $90 millones, pero esas platas hoy no están y en el presupuesto para el 2021 no lo tenemos, es que es incierto porque el Gobierno estableció prioridad solamente en fondos que tuviesen relación con la pandemia", añade.
Algo parecido sucede en San Fabián que como municipios pequeños dependen netamente del fondo común municipal, de cuanto la Subdere les inyecta en recursos y cuántas empresas pagan sus patentes. "No tenemos un presupuesto holgado como años anteriores y los montos que tenemos que son aproximadamente entre $30 millones en realidad se van a pensar para los recursos humanos, gastos del municipio, en la sanitización de los espacios y en inspectores que igual nos interesa que sigan un tiempo más previniendo brotes o contagios", dice el alcalde de San Fabián, Claudio Almuna.
Hasta entonces no tienen planificado realizar shows artísticos, por el miedo a superar la barrera sanitaria al congregar personas en espacios libres, según el alcalde serían instancias que incitarían a aumentar los niveles de contagios. "Estamos enfocados en desarrollar el turismo, por ende nos preocupa sanitizar los espacios públicos, hacer charlas preventivas para que los turistas visiten los camping, lo que nos ha permitido que habiliten esos espacios de la mejor manera posible y el pasajero pueda disfrutar del río. La prioridad es proteger la salud y la vida", finaliza Almuna.