La victoria (3-1) de este domingo por la noche ante Deportes Santa Cruz, dejó a Ñublense un paso más cerca del objetivo principal: ascender a Primera División.

Con tres partidos pendientes a raíz del receso por el brote de coronavirus en el plantel, Jaime García y compañía tienen la primera opción de mantenerse como líderes absolutos antes que termine el campeonato.

La situación es tan favorable para el rojo que, incluso, podrían asegurar el ascenso y el título de campeones de Primera B este próximo sábado.

Para que esto se lleve a cabo, la fórmula debe ser la siguiente: en el duelo que se disputa hoy a contar de las 19 horas, Unión San Felipe (39) debe vencer a Rangers (42) en el Valle del Aconcagua.

Si se da este resultado, Ñublense tiene que ganar mañana a Santiago Morning en La Pintana y el sábado a Deportes Temuco en Chillán, sus dos próximos cotejos.

Si pasa aquello, los chillanejos llegarían a la línea de los 49 puntos, los que serían inalcanzables para cualquier otro elenco del certamen, contexto que los coronaría triunfadores de la categoría con al menos tres fechas por celebrarse.

Confianza a tope

Desde el plantel rojo no esconden para nada las intenciones de ser campeones. De hecho, consultado por la ansiedad que genera todo este último tramo del certamen, Mathías Pinto se muestra bastante seguro de cara a lo que se viene.

"Si Dios quiere, trataremos de estar levantando la copa el sábado. Ganando mañana y el sábado, y si se nos da otro resultado, ya somos campeones. Estos dos encuentros son los más importantes de todo el campeonato", asegura.

Bajo esa lógica, agrega que, "sabíamos que este partido contra Santa Cruz iba a ser el más importante, principalmente por la vuelta de la cuarentena. Pero cada día nos acercamos más al objetivo y al sueño que es el anhelado ascenso".

Junto a ello, hay una situación sumamente esperanzadora para toda la familia ñublensina. En estos momentos, los Diablos Rojos solo dependen de ellos para estampar su presencia en la primera categoría del fútbol nacional.

Sí, tal cual. Resulta que si no ocurre lo de la fórmula anteriormente explicada, el equipo puede asegurar de igual manera el ascenso si gana los próximos tres partidos. Esto independientemente de los resultados de Rangers y San Felipe, elencos que marchan como sus escoltas a esta fecha.

La principal diferencia radica en que ambos contendientes solo tienen tres pleitos más por jugar, lo que contrasta con los seis restantes para Ñublense.

Sacando cuentas, si los rojinegros ganan todos sus compromisos hasta fin de campeonato, la máxima cantidad de puntos que podrían sumar sería 51, mientras que los del Aconcagua solo pueden aspirar a 48.

En tanto, los de Jaime García tienen la chance de llegar a 61, números que solo serían impedidos por una real debacle futbolística lejos de suceder.

Satisfechos

El triunfo ante Deportes Santa Cruz dejó solo buenas sensaciones en el camarín rojo. Primero, por cómo se dio el desarrollo del mismo y, por supuesto, del buen y convincente resultado (3-1) que les devolvió el liderato exclusivo.

Tras el pleito, el propio delantero confesó que ante los unionistas era sumamente importante llevarse los tres puntos, luego de una extensa cuarentena y varios días sin fútbol.

"Teníamos que golpear durante los primeros minutos. Gracias a Dios se dio así, comenzamos manejando el partido y obviamente nos favorecieron las expulsiones que tuvieron. Eso nos ayudó bastante y supimos manejar los momentos. Luego nos salieron los dos goles rápidamente", sostiene.

En esa línea, añade que, "este era el partido más importante dentro de lo que nos queda, por la importancia del receso que tuvimos. Ya se nota que dependemos de nosotros mismos y que estamos fuertes como grupo".

Finalmente, el formado en Universidad de Chile aprovecha para explicar el fuerte entrevero con el defensor central albiazul Diego Urquieta. Al término de la primera fracción, ambos jugadores se enfrascaron en una dura pelea verbal, donde intervinieron varios compañeros de equipo para separarlos.

"Lo que él (Urquieta) tenga que decirme o si en algún momento me lo quiere decir, que me lo diga. Es fácil hablar en la cancha si al final te defiende un árbitro. Para mí no tiene mayor importancia y trato de no salirme del partido por cosas así. No me da mucha importancia hablar de ese tema", finaliza el ariete que ya suma seis goles en ocho partidos desde su regreso a Chillán.

21.30 horas