Atletismo reclama desigualdad sanitaria en comparación al fútbol
SUSPENSIONES. Dos eventos internacionales de gran prestigio se suspendieron en el país debido al covid, mientras el fútbol profesional continúa desarrollándose en el país, critican entrenadores.
Molestia existe en el atletismo regional por la suspensión de importantes campeonatos que se iban a desarrollar en el país, incluyendo dos Grand Prix, lo que se sumó a una serie de eventos deportivos que tuvieron que aplazarse debido a la actual emergencia sanitaria, y el posible colapso del sistema de salud ante el aumento de los casos activos de Covid-19.
La molestia eso sí, no pasa por no querer tomar consciencia de lo que está pasando hoy en el país con la emergencia sanitaria. Los técnicos locales reclaman ya que ven cómo muchos deportes deben acomodarse a los protocolos sanitarios existentes, mientras que el fútbol profesional comenzó a desarrollarse en todo el país, con protocolos sanitarios, pero pudiendo llevarse a cabo.
"Lo encuentro lamentable. Es una bajeza y una falta de respeto para todos los otros deportes, para los deportistas que de una u otra forma están tratando de sacar esto adelante. Cuesta entender. Uno entiende que el fútbol es un deporte que vende un poco más desde la parte comercial, pero si se están tomando medidas por el contexto sanitario, me parece que ley pareja no es dura. O todos tenemos accesos bajo todos los resguardos, o nadie. De verdad que duele, molesta, cuesta comprender. Hay deportistas que están luchando por acceder a distintos campeonatos internacionales, algunos hasta buscando clasificaciones a Juegos Olímpicos, y la verdad es que no se entiende el contexto", señaló el técnico del Club Atlético Quilamapu, Emiliano Del Pino.
Del Pino añadió que los "clubes de fútbol que tienen una masa mucho más amplia en cuanto a planteles y cuerpos técnicos son autorizados a poder entrenar durante toda la semana, y como por ejemplo en nuestro ambiente de atletismo, no nos autorizan ni siquiera estar más de tres veces por semana en una pista más de 10 personas . Es algo ilógico y no me parece".
Por su parte, la entrenadora del programa Promesas Chile, Bernardita Maldonado, comentó sobre la situación que "si hacemos la comparativa entre el fútbol y el atletismo, donde ambos se pueden desarrollar sin público, en el atletismo el distanciamiento físico es mayor que en el fútbol. Tenemos menos contactos y nuestros protocolos son más estrictos si los comparamos con el fútbol. Cada atleta cuenta con su implementación. Considero que no es justo suspender el deporte en tiempos de pandemia. Es un factor que favorece a estar mejor psicológicamente. Estos campeonatos se pueden ver de forma online y son un elemento de distracción para las personas que son bombardeadas con temas de pandemia. Existe un discurso de siempre decir lo que no debemos hacer, por sobre el qué podemos hacer".
Maldonado agregó que "el año pasado cuando empezó la pandemia en Ñuble fui de los primeros técnicos en suspender los entrenamientos de forma independiente, sin haber pedido autorización para resguardar a mis deportistas y sus familias, considerando los complejos casos médicos del paraatletismo. Se necesitan decisiones prudentes en beneficio de los deportistas. El paraatletismo tiene menos contacto físico que el fútbol. Si están autorizando el fútbol se pueden autorizar otros deportes".
El técnico del Club Atlético San Nicolás, Alexis Quiroga, indicó sobre el tema que "uno entiende la situación sanitaria que existe hoy en el país, y siempre debemos velar por la salud de nuestros deportistas. Podemos aceptar la suspensión de eventos, por más que encuentre que el atletismo cuenta con modalidades que perfectamente se pueden aplicar en pandemia, ya que se trata de un deporte individual. La injusticia nace porque existe un discurso de cuidarnos, mientras por otro lado, se inicia el torneo nacional de fútbol profesional".
Para Quiroga, "lamentablemente el fútbol como es un negocio rentable es visto de otra forma, como un negocio, a diferencia de nosotros, que somos visto como un deporte. Es muy difícil poder trabajar en estas condiciones, ya que además de la falta de competitividad, nos cuesta mucho poder entrenar. Uno acepta las determinaciones donde se privilegia la salud de las personas, pero no se entiende cuando hay planteles profesionales de fútbol, con cuerpos técnicos, entrenando toda la semana, y después viajando delegaciones completas por distintos puntos del país para realizar los partidos".